TENIS

Estas son las lesiones que ha tenido Rafa Nadal y que le han condicionado durante toda su carrera

Te contamos cuales han sido las ocasiones en las que el tenista mallorquín se ha visto obligado a parar por dolencias físicas

Rafa Nadal, este jueves, durante su rueda de prensa en Manacor.

Rafa Nadal, este jueves, durante su rueda de prensa en Manacor. / Europa Press

Álvaro Escorial

Álvaro Escorial

A lo largo de sus veinte años de carrera, Rafa Nadal ha conquistado todo lo que se puede conquistar en el mundo del tenis, pero también ha sufrido en su cuerpo el contrapunto más grave que le puede pasar a un deportista: las lesiones. El campeón mallorquín acumula una lista de hasta 21 lesiones localizadas en diferentes partes de su cuerpo que le han acompañado desde sus inicios en el circuito y le han condicionado durante toda su carrera.

Unos contratiempos que se han hecho más patentes, graves y frecuentes en estos últimos años, algo que ha provocó la retirada de Nadal del Roland Garros 2023 y el anuncio de que el año 2024 sería su última temporada como profesional. Esta es la lista de lesiones que han lastrado al campeón español en sus veinte años de carrera profesional: 

Las lesiones que ha sufrido Rafa Nadal durante su trayectoria:

  • Año 2003: Fisura en el codo derecho

La primera lesión de Rafa Nadal como profesional dentro del circuito ATP le llegó a los 17 años, pero no durante un partido, sino en un entrenamiento con su tío y, por entonces entrenador, Toni Nadal. Una mala caída mientras practicaba le provocaron una fisura de un mes de baja y tener que despedirse de la temporada de tierra batida de aquel año, incluida su ausencia en Roland Garros.

  • Año 2004: Fractura en el pie izquierdo

Tras esta primera baja, al año siguiente sufriria la lesión que causaría el origen de lo que sería un calvario para su carrera. En esta temporada, se fracturó el escafoides del pie izquierdo que le llevó a estar tres meses de baja, regresando en Suiza. Esta lesión fue el origen de muchos de los problemas que Rafa ha arrastrado desde entonces, ya que esa lesión del pie izquierdo ha ido debilitando progresivamente los huesos de su pie izquierdo debido a una anomalía en el desarrollo del tejido del escafoides tarsiano, que le derivaría en un problema mayor: el síndrome de Müller-Weiss.

  • Año 2005: Síndrome de Müller-Weiss en el pie izquierdo

El año 2005 fue el año de explosión definitiva de Rafa. Diez títulos, incluído su primera victoria sobre la tierra batida de Roland Garros. Tras ganar el Masters de Madrid, Nadal acusó un dolor en el pie que apenas le permitía andar y se vio obligado a retirarse de poder participar en Wimbledon y de renunciar a los Juegos Olímpicos de Tokio. El síndrome de Müller-Weiss es una enfermedad congénita y degenerativa que dificulta los movimientos y se hace peor cuanto más años pasen y mayor sea el esfuerzo al que sometas al pie. Es la lesión que más ha condicionado y martirizado a Nadal desde entonces, a pesar de las múltiples dolencias en otras partes del cuerpo.

Rafa Nadal, en una imagen de archivo.

Las lesiones no han dado un respiro a Rafa Nadal pese a ganar 22 Grand Slams. / Archivo

  • Años 2006 y 2007: Sendas lesiones en el hombro y brazo izquierdo

Durante los siguientes años, siguió combatiendo las molestias en el pie, pero fueron años tranquilos y de plenitud. En 2006 solo apareció un problema en el hombro izquierdo en Queen's, en un duelo contra Lleyton Hewitt. Se retiró y estuvo dos semanas de baja, aunque llegó a tiempo para Wimbledon, donde disputaría su primera final ante Roger Federer. En 2007 los problemas en la zona izquierda se harían más recurrentes, pero esta vez en el brazo. Nadal se vió obligado a retirarse del Masters de Cincinnati.

  • 2008 y 2009: Tendinitis en las dos rodillas.

Los años siguientes se centraron para curar esa principal dolencia, el síndrome de Müller-Weiss. Pero esa rehabilitación le llevó a sobrecargar otras zonas, como al rodilla, donde empezó a sufrir diferentes lesiones. En 2008 empezó a sufrir tendinitis en el tendón rotuliano y en 2009 se perdió la gira de hierba.

  • Año 2012: Rotura del tendón rotuliano.

En Wimbledon de aquel año, Nadal sufrió la que fue hasta el momento la lesión más grave de su carrera. La rodilla en aquella ocasión dijo basta y se fracturó el tendón rotuliano en segunda ronda de Wimbledon, que le haría perderse el resto del año competitivo.

Nadal, sentado tras lesionarse ante McDonald.

Nadal, sentado tras lesionarse. / Archivo

  • Año 2014 y 2016: Problemas e inflamación en la muñeca izquierda

En el año 2014, Nadal estuvo casi tres meses de baja perdiéndose la gira americana, hasta el US Open. Tres meses de baja que arrastró todo 2015 hasta que en 2016 se vió forzado a retirarse de Roland Garros. En ese año pudo acudir a los Juegos Olímpicos de Río, pero no pudo hacerse con medalla tras perder contra Kei Nishikori.

  • Año 2018: Problemas en el muslo, la rodilla y el tobillo

2018 fue el año más duro para el físico de Nadal. En Australia fue el psoas ilíaco (lesión que le remitiría mas tarde), en el US Open se vio obligado a retirarse por un problema en la rodilla derecha y a la vez, el tobillo no remitía en sus molestias.

  • Años 2021 y 2022: Síndrome de Müller-Weiss en el pie izquierdo y estrés

Durante esta temporada, el síndrome de Müller-Weiss hizo pasar más factura que nunca a Nadal. Rafa jugó uno de los mejores partidos de su carrera en las semfinales de Roland Garros contra Djokovic, pero el sobresfuerzo le hizo renunciar a los JJOO de Tokio y una vez más, a jugar sobre la hierba de Wimbledon. Nadal en este caso quiso apostar a un regreso triunfal en 2022 y comenzó de manera fulgurante. Una victoria incontestable en el Open de Australia y una racha de 20 victorias seguidas hicieron pensar que la mejor versión del balear había regresado.

Pero en la final de Indian Wells, reconoció que no estaba en su mejor momento ni mental. El estrés provocó una fisura en su tercer arco costal izquierdo en el partido de semifinales ante su compatriota Carlos Alcaraz. Esta fisura le mantuvo seis semanas en el dique seco y tras su vuelta en Madrid y Roma, los problemas con la necrosis de su pie fueron a más.

El 2023 le trajo al tenista de Manacor una lesión en el psoas ilíaco que le ha imposibilitado prácticamente poder competir durante toda la temporada. Este 2024 ha sufrido recaídas de la misma lesión, ya son 22 durante todos estos años de carrera, pero que no le han lastrado de ser uno de los tres mejores tenistas de la historia y un ejemplo de superación. Con una microrrotura en la zona de la cadera izquierda, podría haber jugado el Open de Australia, pero el balear optó por no arriesgar y asegurar su objetivo, que es poder competir en buenas condiciones a medio plazo, con el fin de brillar de nuevo en Roland Garros.