Cantabria prohibirá los parques eólicos en el 90% de su territorio

El presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, ha anunciado que el futuro Plan Regional de Ordenación del Territorio, en el que trabaja en estos momentos la Consejería de Obras Públicas, catalogará como “zona de exclusión eólica al 90 % de Cantabria”. La proliferación de parques eólicos ha causado numerosas protestas tanto en esta autonomía como en el resto de España, por su impacto ambiental.

Revilla ha subrayado que Cantabria apuesta por las energías renovables, incluida la eólica, pero lo hará con “restricciones” y con “todas las garantías y controles legales para preservar la riqueza paisajística de la comunidad”.

El jefe del Ejecutivo cántabro se ha expresado así durante la inauguración de la jornada “Transición energética en Cantabria: retos y oportunidades para las energías renovables”, organizada por la Asociación para la Transición Energética (ATE), según informa el Gobierno autonómico en una nota de prensa.

“Que tengan la seguridad los ciudadanos de que en Cantabria no vamos a acometer ningún atropello paisajístico. Esta región tiene un activo en sus bellezas naturales extraordinario y donde se pongan los molinos serán lugares que han de contar, además, con todos los informes”, ha dicho Revilla.

Estimular las energías limpias

Según ha explicado, esta protección será ya un “primer tope” a la instalación de parques eólicos, mientras que en los lugares donde sí se autoricen iniciativas de este tipo, la Administración regional activará todos los mecanismos de control para garantizar el cumplimento de la normativa.

El presidente ha señalado que, ante la realidad del cambio climático, es un “imperativo” europeo y mundial cambiar los sistemas de producción tradicionales por otras fuentes de energía más eficientes y menos contaminantes.

Y en este contexto, ha añadido, “Cantabria no puede estar al margen” ni “desechar ninguna forma de energía”.

En concreto, se ha referido a algunos proyectos ya planteados en la región de la mano de la iniciativa privada como la ampliación de la central hidroeléctrica de Aguayo por parte de Repsol, el Plan de Transición Energética de Solvay o el liderazgo de Bondalti en el desarrollo del hidrógeno.

Revilla ha lamentado la “demora” de España para hacer llegar los fondos habilitados por Europa y ha urgido una respuesta al Gobierno de España.

También se ha mostrado partidario de mantener las centrales nucleares que están en activo y que aportan “el 25 %” de la energía que consume España. “No tiene sentido cerrar aquí cuando en otros países están abiertas”, ha enfatizado.