"Un cuerpo bello es un cuerpo delgado" o cómo los 'influencers' impactan en la dieta de los jóvenes

¿Cómo impactan los influencers en la alimentación y en el aspecto físico de los adolescentes? La respuesta está en un informe que han presentado este jueves Fundación MAPFRE y la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR). Entre la conclusiones más destacadas, que el 44,5 % de los jóvenes recibe publicidad de alimentos poco saludables y que, cuando ven publicaciones de influencers sobre alimentos o aspecto físico, el 27,8 % siente "frecuente o muy frecuentemente" que "un cuerpo bello es un cuerpo delgado". Destacado, también que, para la mitad de esos jóvenes, tener un buen físico ayuda a ser más aceptado.

El estudio -titulado 'Digital Fit: la influencia de las redes sociales en la alimentación y en el aspecto físico de los menores'- resultado de una encuesta a 1.055 menores, entre 11 y 17 años- analiza qué efectos tienen las colaboraciones publicitarias de los influencers en sus hábitos alimenticios y en su actividad física, así como las repercusiones personales que les acarrea.

Escuchar a los adolescentes

Según han explicado en rueda de prensa virtual la profesora Beatriz Feijoo, investigadora principal del estudio, los autores buscaban respuestas a las siguientes preguntas: el tipo de redes sociales que siguen los menores, en cuáles siguen a influencers, qué opinión tienen sobre el contenido de las publicaciones que ofrecen los que siguen, qué publicidad reciben o qué efecto tienen estas publicaciones en la autoestima y la satisfacción personal de los menores.

"Llama atención cuando hablas con los padres y ves cómo tildan de tontería los contenidos que sus hijos siguen en redes", señala la profesora Beatriz Feijoo

A la vista de las conclusiones, la investigadora ha lanzado una serie de recomendaciones y ha destacado la necesidad de que, tanto las familias como los educadores, escuchen a los jóvenes y se interesen por los contenidos que les gustan y que consumen tanto en las redes como en las plataformas.

"Llama atención cuando hablas con los padres y ves cómo minusvaloran y tildan de tontería los contenidos que sus hijos siguen en redes sociales. Eso genera barreras y nos perdemos mucho de lo que les sucede. Tenemos la necesidad de escucharlos, generar debate y saber qué les interesa. Hay que hacer un seguimiento mucho más humilde de los menores", aseveró la experta.

TikTok, la favorita

Si se habla de las redes sociales favoritas, la encuesta revela que TikTok es donde los menores siguen a más influencers, seguida de YouTube e Instagram. En cuanto los influencers más seguidos son los gamers, y los que hacen contenido de entretenimiento y humor. El 70 % de los encuestados es consciente de que su publicidad tiene como finalidad que ellos compren el producto anunciado.

Además, el 42,4 % de los adolescentes declara recibir publicidad sobre alimentación y aspecto físico a través del móvil y el 44,5 % de los entrevistados afirma que recibe publicidad de alimentos poco saludables. La publicidad sobre cuidado del cuerpo que los menores reciben con mayor frecuencia es: moda (48,7 %), cosmética y belleza (33,1 %), fitness y gimnasio (23,2 %) y procedimientos estéticos (13,5 %).

Pero es cuando los adolescentes ven publicaciones de influencers colaborando con productos de alimentación y aspecto físico, cuando el 26,2 % siente "frecuente o muy frecuentemente" que su apariencia determina "mucho cómo te valoras a ti mismo". El 13,9 % siente "frecuente o muy frecuentemente" que no está a la altura y que su presencia física no cumple con el estándar y el 13,8 % establece metas para conseguir un cuerpo perfecto "frecuente o muy frecuentemente".

El aspecto físico figura como un indicador importante para la socialización en los menores: alrededor del de la mitad de los encuestados afirma que tener buena apariencia ayuda a que te acepten más, concluye el informe en el que, como dato positivo, según la profesora Beatriz Feijoo, consta que más del 66% participantes de la encuesta declara estar "muy satisfecho" con su aspecto y ese es un buen dato.