La 'maldición' del castillo más caro de España, residencia de Juana 'La Loca': por qué lleva diez años en venta

Si uno busca en Google casas para comprar en el condado de Castilnovo, en Segovia, la primera propiedad de las ocho que se va a encontrar en Idealista no se la podrá permitir (casi con toda seguridad). No es que ande justo de dinero para invertir, es que 15 millones de euros son muchos millones. Eso es lo que cuesta hacerse con el castillo en venta más importante de España, y las 78 hectáreas que lo rodean. Se trata de una bella construcción medieval que fue residencia de Juana la Loca allá por el siglo XVI y en cuyo recinto se casó, recientemente, Lucía Pombo, piloto comercial y hemana de la conocida ‘influencer’ María Pombo.  

Además del castillo, la vasta parcela tiene un molino, un chalet, una ermita, naves, piscinas y zona de hostelería, elementos todos ellos rodeados de encinas y pinares donde conviven corzos y jabalíes. “Se celebran muchas cacerías y sueltas de perdices, viene gente muy pudiente”, cuenta un paisano de la zona sobre el paraje, que salió por primera vez a la venta hace casi una década. El complejo está a una hora de Madrid, entre las bellas Pedraza y Sepúlveda y dispone, obviamente, con licencias de hostelería, ya que alberga un gran salón de banquetes. Durante su reciente historia ha albergado eventos, cenas de empresa y bodas.  

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Fortaleza

Aunque hay teorías que apuntan que el castillo se construyó en el siglo VIII, la documentación histórica señala que su origen se remonta al reinado de Alfonso VIII, cuando en el siglo XIII conquistó la villa de Castilnovo y mandó construir una fortaleza donde está situado en la actualidad el castillo. No fue hasta el siglo XV cuando los señores de Castilnovo, la familia de los Mendoza, vinculada a los Trastámara, encargaron la construcción de un nuevo castillo en el mismo lugar, que es el que ahora deslumbra cuando uno va en coche por la carretera comarcal SG-205, alzándose imperial en una hondonada del valle de San Juan.

Prisión para hijos del rey

El castillo ha sido posesión de don Álvaro de Luna, valido del rey Juan II; del duque de Escalona; de los Reyes Católicos, del duque de Frías (que guardaba aquí las numerosas rentas que tenía), de la familia Hohenzollern, del secretario de Isabel II, J. Galofre, y de los marqueses de Quintanar, entre otros. Hay constancia de que Juana de Castilla, conocida como Juana la Loca, vivió una temporada larga tras morir su marido Felipe el Hermoso y parte de la leyenda del lugar dice que sus paredes sirvieron de prisión para los hijos del rey de Francia, tras la batalla de Pavía, en 1525.  

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El castillo, de estilo gótico-mudéjar, y que fue declarado Monumento de Interés cultural en junio de 1931, sufrió graves daños durante la Guerra Civil española. La primera vez que salió a la venta fue en 2015 y son varias las inmobiliarias que tienen el producto en cartera en la actualidad. Actualmente, según explica en su anuncio el portal Idealista, el castillo, uno de los mejores conservados de España, cuenta con 21 habitaciones construidas en el siglo XIX y adaptadas a finales del siglo XX. De acuerdo al anuncio del portal inmobiliario, su protección “lo hace candidato de ayudas para su conservación”. Su venta, sin embargo, es complicada de ejecutar. 

Mantenimiento caro

“Son productos muy específicos y por eso son más difíciles de vender. No todo el mundo puede comprarse un castillo. Además, tiene un coste mayor por el mantenimiento y porque sufre un desgaste mayor porque es más antiguo”, explican fuentes de una inmobiliaria de lujo que tiene en su portfolio construcciones fortificadas.

Desde Viva Sotheby´s International Realty, que es una de las agencias que vende este castillo, aseguran que es "difícil" encontrar clientes para este tipo de propiedades porque no es como una vivienda regular, por lo que no existe "una necesidad especifica". "Hemos de buscar clientes con un perfil muy nicho atraídos por el valor cultural, histórico, la ubicación y el potencial de la inversión. Son propiedades con unos requisitos legales y de conservación muy específicos por lo que el buen asesoramiento es fundamental", apunta Paloma Pérez Bravo, CEO de VIVA Sotheby’s International Realty.

Desde la agencia aseguran que los potenciales clientes de este tipo de construcciones son franceses, "que valoran además de la parte cultural e histórica, los paisajes y el estilo arquitectónico", británicos, que se "sienten atraídos por el clima, la cultura y la cercanía"; y estadounidenses, que "buscan la Europa auténtica y además ven una buena inversión para utilizarlo como hotel o para organizar eventos de lujo".

En el caso de Castilnovo, y otros similares, los operadores trabajan la propiedad 'off market': "La ofrecemos de forma proactiva a clientes de Sotheby’s Realty del perfil mencionado. También recibimos consultas sobre la propiedad mayoritariamente con objetivos de inversión".

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 El castillo, una mezcla entre fortaleza y palacio, tiene seis torreones, tres redondos y otros tres rectangulares -uno de ellos la torre del homenaje- y mantiene las almenas perfectamente conservadas, mientras las ventanas y pórticos son de diferentes épocas. Según destaca el portal inmobiliario, el complejo cuenta con varias edificaciones entre las que destaca un antiguo molino de agua rehabilitado para vivienda con amplio salón y chimenea, cuatro dormitorios con tres baños, cocina office, zona de jardín y piscina, con una superficie total de 431 metros.

Bibliotecas

Tiene también una casa de estilo provenzal, llamada "casa piramidal", con piscina y jardín y dos campamentos para estudiantes con jardín, pistas de fútbol y baloncesto, piscinas, etc. 

“El antiguo dueño, D. José Gárate, enamorado de la cultura mexicana, realizó varias obras para albergar eventos de la asociación Hispano-mexicana de Castilnovo, construyendo varias naves y espacios que albergan bibliotecas y colecciones. La explotación del complejo tiene muchas posibilidades desde la hostelería, al turismo rural pasando por la actividad museística”, concluye el anuncio de Idealista.