SALUD
Qué son los electrolitos y por qué es importante mantenerlos en equilibrio, especialmente si hacemos ejercicio
Algunos síntomas relacionados con el desequilibrio de electrolitos son: fatiga, dolor de cabeza, confusión, espasmos musculares o ritmo cardíaco irregular
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Cuando hacemos deporte, sudamos y expulsamos minerales, siendo esencial rehidratar el organismo tras la sesión de deporte o ejercicio. A veces, no es suficiente con beber agua, y debemos reponer las sales minerales mediante otro tipo de bebidas o alimentos, con el fin de reequilibrar los niveles de electrolitos presentes en nuestro cuerpo. Para muchas personas, los electrolitos han pasado desapercibidos durante toda su vida, pero constituyen una sustancia imprescindibe para nuestro organismo, especialmente si hacemos deporte, pues favorecen la conexión eléctrica entre nuestras neuronas y los músculos.
Tal y como señalan desde la Academia Española de Nutrición y Dietética, estas sustancias "se encuentran en el cuerpo humano en forma predominante de sales minerales, tales como sodio, potasio, calcio y magnesio. Se disuelven en el agua del organismo y se separan en iones positivos y negativos. Esto hace que tengan carga, por eso su paso a un tejido ocasiona una diferencia de potencial", explican los expertos.
Cómo revertir el déficit de electrolitos
Es por eso, que los electrolitos desempeñan un papel importante, pues se encargan de mantener el equilibrio de fluidos, dentro y fuera de la célula "asegurando que tanto la hidratación como el volumen de la sangre sean adecuados", añaden. Su presencia es esencial para las contracciones musculares, el corazón o el sistema nervioso. Si nuestros niveles de electrolitos se desequilibran, los síntomas más comunes son "fatiga, debilidad, dolor de cabeza, confusión, espasmos musculares, ritmo cardíaco irregular y, finalmente, convulsiones si no se controla", según los expertos.
Este déficit de electrolitos se puede revertir con algunos alimentos y bebidas ricos en ellos, aunque si llevamos una dieta equilibrada y bebemos agua, no deberíamos presentar un desequilibrio de electrolitos. En caso de sufrirlo, existen bebidas, soluciones orales o intravenosas, dependiendo de la gravedad. Plátanos, patatas, frutos secos, sal, lácteos, semillas o legumbres, son algunos de los alimentos que contienen electrolitos en mayor cantidad. Además, las bebidas y suplementos deportivos los incluyen en sus fórmulas.
Este tipo de bebidas ricas en electrolitos "pueden ser de ayuda en alguna situación en la que exista una pérdida significativa, como en una enfermedad con vómitos o diarrea, o en climas muy calurosos con una pérdida abundante de sudor", insiste. Además, explica que estas bebidas deben consumirse durante el ejercicio, y no únicamente tras él, pues la pérdida de electrolitos comienza en la rutina deportiva.
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