NATURALEZA

¡El Arcoíris: más que un fenómeno, una maravilla óptica!

Al llegar al lado opuesto de la gota, hay una pequeña porción de luz que no la consigue atravesar, dando lugar a lo que vemos

El arcoíris del hidrógeno

Un arcoíris circular

Un arcoíris circular / BVPVisuals

En un mundo donde la naturaleza nos sorprende a cada paso, no todo es lo que parece. Esto es lo que ocurre con el fenómeno del arcoíris, un hecho de luz y colores que deslumbra y cautiva a todos por igual. Gracias al paso de la borrasca Nelson, son muchos los lugares que se han visto agraciados con la presencia de un arcoiris. Pero ¿qué es y cómo se produce?

En primer para que este acontecimiento ocurra debe llover y hacer sol al mismo tiempo. Entonces los rayos de luz atraviesan las gotas de agua. Esto hace que la luz se descomponga en colores y cambia su dirección. Al llegar al lado opuesto de la gota, hay una pequeña porción de luz que no la consigue atravesar, dando lugar a lo que vemos.

Sumado a esta combianción de fenómenos metereológicos, la posición del sol también es improtante. La estrella debe estar a menos de 45º grados y cuanto más bajo este, más visible sera el arcoirís. Teniendo esto en ceunta ¿es posible visualizar un arcoiris lunar?

Arcoiris nocturnos y dobles

La respuesta es sí. Se trata de un evento complejo pero no imposible de que pase. Y es que durante una noche de lluvía, este fenómeno se genera cuando la luz de la luna choca en las gotas de agua presentes en el aire. Por causas lógicas los colores que se visualizan en un arcoiris lunar son más débiles, ya que la intensidad de la luz es menor. El amanecer o el atardecer son las mejores ocasiones para presenciarlos.

No es la única forma que se puede contemplar, cuando los rayos de luz blanca entran en contacto con las gotas de agua en suspensión dan lugar a los arcoiris dobles. Esto ocurre porque en vez de rebotar en la pared interior una vez, lo hacen dos.