SISTEMA SOLAR

Así es el sorprendente fenómeno que acecha a la Tierra una vez al año

Es el día en el que la Tierra viaja más rápido alrededor del Sol

35.000 millones de kilómetros después, el cometa Halley inicia su viaje de retorno a la Tierra

Este fenómeno tan curioso afecta a la trayectoria orbital de la Tierra

Este fenómeno tan curioso afecta a la trayectoria orbital de la Tierra / Pixabay

Redacción

El 2 de enero marca un momento especial en el viaje de la Tierra alrededor del Sol, ya que alcanza su perihelio, la distancia más cercana al astro rey en su órbita elíptica.

Un fenómeno que desafía la intuición, porque la proximidad del Sol no determina las estaciones; es la inclinación de los rayos de sol los que dictan sentencian en el clima. Durante el invierno, la elevación solar menor se produce de forma más oblicua, en cambio, en verano con una posición más alta los rayos son perpendiculares e influencian directamente en las condiciones meteorológicas.

Históricamente, la astrónoma Hipatia de Alejandría destacó en un mundo dominado por hombres en el siglo IV d.C. Su padre, Teón, un astrónomo griego, le proporcionó educación en matemáticas y filosofía, rompiendo las barreras de género de la época. Hipatia participó en debates astronómicos importantes, incluido el fenómeno de las órbitas retrógradas de los planetas. Aunque se especula quabordó la idea de órbitas elípticas antes que Johannes Kepler, su legado se vio opacado por la quema de la Biblioteca de Alejandría, el gran centro de conocimiento de la antigüedad.

El perihelio es un recordatorio de la fascinante danza cósmica que la Tierra ejecuta alrededor del Sol, revelando que la complejidad de los fenómenos celestiales ha intrigado a mentes curiosas durante siglos, desde la Antigua Grecia hasta la actualidad.

En resumen, el perihelio del 2 de enero nos invita a reflexionar sobre la interconexión entre el cosmos y la comprensión humana a lo largo de la historia. Mientras la Tierra realiza su danza orbital, recordamos a figuras como Hipatia, cuyo legado, aunque perdido en la hoguera de la intolerancia religiosa, sigue inspirando la exploración del universo.