GASTRONOMÍA

De 5 a 200 euros por persona: esto te cobran los mejores restaurantes de Madrid por no cancelar una reserva

La flexibilidad a la hora de que te carguen o no un depósito por anular reservas varía entre los locales con más éxito de la capital

Algunos restaurantes, como Smoked Room, donde vale 200 euros reservar por persona, piden cancelar con más de una semana de antelación "para estar libre de cargos"

Una comensal se prepara para degustar un plato en un restaurante.

Una comensal se prepara para degustar un plato en un restaurante. / UNSPLASH

"Podrás cancelar o modificar la reserva (en función de la disponibilidad) sin coste alguno hasta 24 horas antes de que sea efectiva. Si la cancelas o modificas transcurrido ese límite de 24 horas antes o no acudes al establecimiento, el restaurante te podrá cobrar 180 euros en tu tarjeta de crédito". El mensaje a la hora de reservar para cenar dos personas en el restaurante DStage de Madrid, uno de los restaurantes de moda de la capital, es claro y no admite interpretaciones.

Si uno no acude a la reserva se le podrán cobrar hasta 180 euros. Es decir, pagará con la tarjeta que introduzca para hacer la reserva hasta cerca de un 36% de lo que le costaría la comida: en este restaurante con dos estrellas Michelin el menú degustación cerrado con maridaje oscila entre los 250 y los 290 euros por persona.

La sentencia que ha dado la razón a Amelia, un restaurante con dos estrellas Michelin de San Sebastián que cobró 510 euros a tres comensales por no presentarse el día de la reserva, ha vuelto a poner el foco esta práctica que restaurantes con alta demanda vienen haciendo desde hace años, pero que se extendió y se afianzó con la pandemia, cuando muchos clientes cancelaban mesas con pocas horas de antelación, o simplemente no iban.

Estrellas Michelin

En Madrid, capital de la gastronomía, que cuenta con 24 restaurantes con estrellas Michelin, son numerosos los restaurantes que lo hacen a través de aplicaciones de reserva como Covermanager, donde uno introduce sus datos personales, peticiones específicas sobre la reserva (alergias alimentarias, petición de trona...) y su tarjeta de crédito.

El chef Dabiz Muñoz recibiendo el premio Best Chef Award en 2022.

El chef David Muñoz recibiendo el premio Best Chef Award en 2022. / FERNANDO SÁNCHEZ

Uno de los primeros restaurantes en la capital que adoptó esta política es Kitchen 154, con dos locales en el Mercado de Vallehermoso y en la calle del Acuerdo, y con un espacio de cervezas en José Abascal. En ese momento, experimentaban una cantidad de no shows (como se conoce a las faltas de asistencia en hostelería) de hasta del 50% de las reservas. Cuando llevaron a cabo esta medida, en un restaurante en el que el modelo de negocio se basa en la rotación y en el que cuentan con un volumen de clientes alto, recibieron protestas y apoyos a la par.

"No nos parecía bien ni para nosotros era viable la cantidad de gente a la que teníamos que decirle que no cualquier día de la semana porque no venían los clientes que habían reservado", justifica Txitxo, fundador y director de Operaciones de Kitchen 154. Desde entonces, imponen una penalización de cinco euros por persona para aquellos comensales que no cancelen con al menos tres horas de antelación. No obstante, son flexibles y permiten que se anulen las citas con menos tiempo si los interesados llaman por teléfono. "Es una medida disuasoria para aquella gente que reserva en varios restaurantes y decide en el último momento a cuál va sin anular el resto de reservas", sostiene Txitxo.

Algunos tienen condiciones más draconianas que otros. Por ejemplo, en Smoked Room, del grupo de Dani García y situado en el Hotel Hyatt Regency Hesperia del Paseo de la Castellana, te cobran directamente 200 euros por persona por el menú con maridaje “y se puede cancelar una semana antes libre de cargos”, tal y como señala su portal de reservas. Es decir, que si se anula cuando queden menos de siete días para la comida/cena se reservan el derecho a cobrar el menú entero de este dos estrellas Michelin.

Dabiz Muñoz

En DiverXo, el restaurante triestrellado de Dabiz Muñoz, se advierte que para reservar hay que pagar un ticket, "como cuando acudes al teatro o a ver un partido de fútbol". Este asciende a 365 euros por persona, incluyendo el menú sin la bebida, que será descontado del precio final. "No admitimos cambios en la fecha de la reserva, pero si cancelan con dos semanas de antelación se reintegra el importe de los tickets", explican en su página web. En RavioXo, el nuevo restaurante abierto por el mediático chef en el Corte Inglés de Azca y que tiene un ticket medio de 100 euros, anular con menos de 24 horas supondrá un coste de 50 euros por persona.

En el restaurante de Paco Roncero, que también tiene dos estrellas Michelin y donde el menú degustación más barato cuesta 210 euros, son ciertamente más flexibles y advierten de que se cobrarán 50 euros por persona en el caso de anular la mesa con menos de 24 horas de antelación. En Coque, el restaurante de Mario Sandoval, sin embargo, van un paso más allá y piden a la hora de reservar un depósito de 100 euros por persona, que se devolverá si se cancela al menos 48 horas antes. Si no se perderá.

En el caso del restaurante de Ramón Freixa, otro de los puntales de la gastronomía madrileña -tiene dos estrellas- y que tiene su espacio en Claudio Coello, se cobra 70 euros por persona en el caso de anular con menos de 48 horas.

Diego Guerrero, chef de DStage, en una imagen promocional del Canal Historia. 

Diego Guerrero, chef de DStage, en una imagen promocional del Canal Historia.  / EFE

Ricardo Sanz Wellington

Un poco menos, 40 euros por persona, es lo que se carga si uno no se presenta a la reserva en el Ricardo Sanz Wellington, que tiene una estrella Michelin. En Lúa, que también fue galardonado con una estrella, el restaurante se reserva el derecho a cobrar 80 euros de penalización por una mesa reservada de dos comensales si no se anula con 24 horas de antelación.

Pese a tener una estrella también, el Invernadero de Ponzano penaliza con mucho más: hasta 130 euros por comensal en caso de anular con 24 menos de horas. Facua denunció en diciembre de 2021 que este espacio gastronómico ganaba "más dinero con las cancelaciones que con los clientes que acuden a comer allí". "Creemos que la pérdida de ingresos no es total, porque la comida se la va a servir a otro cliente y entendemos que se puede provocar un enriquecimiento injusto del restaurante. El comensal no le dice: 'Oye, como no voy, prepáramela igualmente y mando una moto a recogerla'", expone el portavoz de la organización de consumidores, Rubén Sánchez.

Facua denunció que El Invernadero de Ponzano "gana más dinero con las cancelaciones que con los clientes que acuden a comer"

Gaytan o Abarra, que han sido también reconocidos con una estrella, no tienen, sin embargo, una política de cancelación que obligue a sus clientes a desembolsar dinero por no ir. En cualquier caso, establecer este tipo de sanciones no es una práctica exclusiva de los restaurantes condecorados. También los locales de barrio han comenzado a seguir esta política de cancelación. Por ejemplo, el a.n.E.l. Puerta de Alcalá, situado en la calle de Villalar y con un ticket medio de unos 30 euros y un menú de mediodía inferior a 20 euros, pide 10 euros de adelanto para formalizar la reserva que se pierden si no se avisa con cierta antelación.

Otros buenos restaurantes de la capital también penalizan por no acudir, como Sacha, que cobra 35 euros por persona en el caso de que se cancele después de las 21.00 horas del día anterior en el caso de las comidas o de las 13 horas el mismo día de la reserva en el caso de las cenas. Uno de los restaurantes más en boga de la capital, La Tasquita de Enfrente, cobra asimismo 40 euros por comensal en la tarjeta de crédito que se ha facilitado siempre que no se avise con al menos 24 horas de antelación.

Por su parte, el asiático Ikagai Veláquez, una de las revelaciones de la temporada, tiene también una política de cancelación por la que se cobrará 25 euros por persona, en caso de no presentarse o cancelar esta reserva a menos de seis horas.