NOCHE DE REYES

Así es el roscón de reyes de Mercadona: qué lleva, cuánto cuesta y qué opciones hay

El rosco, que debe tener una figurita de rey y un haba seca, dice que quien encuentre la legumbre debe pagar el postre

roscón reyes mercadona

roscón reyes mercadona / Mercadona

A. V.

Tras las comilonas navideñas, llega el punto final: los Reyes Magos. La noche mágica en la que los niños (y no tan niños) se acuestan pronto y sin chistar a la espera de que los tres magos de Oriente les traigan todas sus peticiones.

Esa mañana, la del día 6, se celebra el último festín, el que pone fin a las últimas (y primeras) fiestas del año. Y el desayuno-comida (el llamado 'brunch', por la contracción de las palabras inglesas 'breakfast' -desayuno- y 'lunch' -almuerzo o comida-) está protagonizado por el tradicional roscón de reyes, un dulce típico que en sus orígenes -la celebración pagana de las saturnales romanas, que festejaban el fin del solsticio de invierno- eran tortas redondas rellenas de dátiles y e higos.

Dulces actuales

En la actualidad, son roscos de hojaldre o brioche, generalmente, que suelen ir decorados con fruta confitada y almendras laminadas, y que pueden estar (o no) rellenos de crema, nata, chocolate...

El único punto en común es que deben contener la figurita del rey y un haba seca. La tradición dice que quien encuentre la figurita se convertirá en el rey y quien encuentre el haba debe pagar el dulce.

Y eso es lo que llevan los roscones de reyes de Mercadona. El supermercado valenciano vende cinco variedades de este tradicional dulce, hecho de brioche con mantequilla, azúcar y huevo: sin relleno (de 400 gramos), con relleno de crema, de nata o de nata y chocolate (todos, de 800 gramos) y sin relleno y sin gluten ni lactosa (apto para celiacos y alérgicos o intolerantes a la lactosa, de 370 gramos). Y todos, decorados con fruta confitada y almendra laminada.

Consumo

Y a pesar de que este año la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) no le ha otorgado uno de los primeros puestos, este año volverá arrasar precisamente por eso, porque tiene para todos los gustos, incluso para celiacos e intolerantes al gluten.

El supermercado valenciano aconseja descongelarlo dentro del envase en nevera durante el tiempo que se indica en el envase, mantener el producto a temperatura ambiente una hora antes de su consumo y conservarlo dentro del envase en nevera. Además, recomienda consumirlo antes de 2 o 3 días desde su compra o congelación.

El precio varía desde los 5,50 euros que cuesta el roscón sin relleno de 400 gramos a los 8,50 euros que cuestan cualquiera de las variedades rellenas de 800 gramos, pasando por los 8 euros del roscón de 370 gramos sin lactosa ni gluten.