CONTAMINACIÓN

Madrid presume a cierre de abril del mejor dato de calidad del aire de la serie histórica

Las 24 estaciones de medición marcan niveles de NO2 por debajo de los límites que establece actualmente como límite la Unión Europea

Ecologistas en Acción denuncia que los registros aún están lejos de los baremos que exigirá Europa en 2030 y de los que recomienda la OMS

Vista del paisaje urbano de Madrid,

Vista del paisaje urbano de Madrid, / BALLESTEROS / EFE

Víctor Rodríguez

Víctor Rodríguez

Un buen dato, pero con matices. La ciudad de Madrid registró entre enero y abril el mejor registro de calidad del aire de la serie histórica, con los valores de dióxido de nitrógeno (NO2) en las 24 estaciones de medición por debajo de los límites que marca actualmente la Unión Europea. Así lo ha expresado esta mañana el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Borja Carabante, en un mensaje publicado en su cuenta de X, en el que celebra que “nunca antes” ha habido “un avance de año tan bueno”. Y así lo ha celebrado solo unas horas después el alcalde, José Luis Martínez-Almeida.

Carabante ha acompañado el tuit con un gráfico de barras que refleja los registros de cada estación de medición de la capital. En ninguna de las 24 se han superado los 40 microgramos por metro cúbico (μg/m³) de NO2, el límite establecido por la directiva europea de calidad del aire. Tres de ellas están incluso por debajo de 20 microgramos por metro cúbico.

La ciudad infringió desde 2012 hasta 2021 los umbrales establecidos por la Unión Europea, siendo el peor año 2017, cuando se superó el límite en 15 de las 24 estaciones, lo que motivó una sentencia condenatoria del Tribunal Superior de Justicia de la UE a la capital y a Barcelona por superar sistemáticamente los valores permitidos entre 2010 y 2018. La capital española cumplió por primera vez con los estándares fijados por Europa en 2022 y en 2023, con descensos significativos en las estaciones de Escuelas Aguirre, plaza de España y Plaza Elíptica, este último el punto más contaminado de la capital, informa Efe.

"Mejor que París"

Hasta ahí todo bien. El alcalde, José Luis Martínez-Almeida, también ha celebrado el dato este mediodía. "El hecho de que en el mes de abril, por primera vez en la serie histórica, las 24 estaciones hayan cumplido los límites de calidad del aire de la Unión Europea y estén por debajo de los niveles establecidos es una noticia que nos debe alegrar a todos", ha señalado. "Esto viene por las políticas que ha implantado este equipo de Gobierno y que han permitido que Madrid esté cada vez mejor que París, por ejemplo, porque París, y otras ciudades y otras capitales, no cumplen los límites de calidad del aire".

Pero menos triunfalista es la visión de Ecologistas en Acción. Desde la organización reconocen que "hay que dar la razón al Ayuntamiento, pero llegamos tarde". No solo porque la fecha para cumplir con estos límites estaba fijada para mucho antes, concretamente para 2010, sino porque el Parlamento Europeo adoptó el pasado 24 de abril un acuerdo provisional con los países miembros de la UE sobre nuevas medidas para mejorar la calidad del aire mucho más restrictivas de cara a 2030.

"En dióxido de nitrógeno los límites pasan de los 40 microgramos por metro cúbico a 20", apunta Juan García Vicente, portavoz del grupo ecologista. "Solo tres de las 24 estaciones, El Pardo, Casa de Campo y Retiro, están por debajo. Las otras 21 están por encima, así que volvemos a estar fuera de juego. Y eso sin hablar de que la Organización Mundial de la Salud coloca a Madrid a distancia abismal de lo que señala para calificarla como adecuada". El límite que reconoce la OMS es de 10 microgramos de NO2 por metro cúbico de aire, un baremo superado por todas las estaciones de la capital.

"La iniciativa de Madrid Central", prosigue, "supuso un salto adelante para llegar a esta buena situación, la mejor en decenios, pero lejos de las nuevas exigencias comunitarias, contra las que votaron PP y Vox en el Parlamento Europeo". También llama la atención sobre el hecho de que en los meses de primavera se suelen registrar mejores valores por la acción del viento y la lluvia. "La demagogia y el oportunismo de los equipos de gobierno desde 1991 han estado poniendo trabas a las mejoras ambientales", concluye García Vicente.