Lobato dará su apoyo al PP para la compra de trenes en Madrid: "Vamos a salvar Metro"

Metro de Madrid tiene un problema y con él, Isabel Díaz Ayuso. La empresa pública que gestiona el transporte en metro de la Comunidad de Madrid necesita mayor financiación para comprar los actuales trenes que circulan en el subsuelo madrileño, pero es imprescindible que la Asamblea de Madrid dé el visto bueno a que pueda superar su límite de endeudamiento. Y el Gobierno regional ha encontrado un aliado poco habitual para lograr este rescate económico: el secretario general del PSOE de Madrid, Juan Lobato.

"Gobernar es gestionar y gestionar es aprobar presupuestos para que todo funcione y no hacerlo, como hace la señora Ayuso, implica problemas como este". Con estas palabras Lobato resume el problema que tiene la empresa pública: la presidenta regional no logró aprobar los presupuestos para 2023 porque no consiguió el apoyo de Vox; y sin la partida que en esos presupuestos se dedicaba a Metro, la compañía no puede hacer frente a la compra de los trenes que tiene alquilados y que debe comprar antes de que finalice el año si no quiere quedarse sin ellos. Sin presupuestos, la salida que propone el PP es financiarse mediante un mayor endeudamiento y este miércoles la Asamblea de Madrid debe decidir si permite o no ese incremento. Vox, desde que ha dejado de regalar de forma sistemática sus votos a Ayuso, se muestra reticente.

El PP de Ayuso aprovecha la debilidad de la ministra de Transportes y se vuelca en sus exigencias para los Cercanías de Madrid

Probable abstención

En estas circunstancias, y consciente de lo que supone para Madrid quedarse sin trenes por falta de financiación pero sin dejar de criticar al Ejecutivo regional, Lobato ha levantado la mano para presentarse como salvador de lo que considera "mala gestión" del PP: "Metro no va a colapsar, no se va a producir un bloqueo (en la comisión) que impida que los madrileños se queden sin transporte. Vamos a salvar el Metro de Madrid" si hace falta, ha señalado este martes tras la junta de portavoces. Dicho de otra manera, ha ofrecido al PP su abstención en la votación para permitir que la propuesta salga adelante si Vox finalmente vota en contra. "No hace falta que votemos a favor, haremos lo que haga falta para que Metro de Madrid no se hunda". Con estas declaraciones, en la Consejería respiran ya algo más tranquilos aunque políticamente el mensaje no beneficie necesariamente al PP.

Esta tarde, en cualquier caso, un equipo de la Consejería de Transportes y de Metro mantendrá una reunión con Vox en la Asamblea de Madrid para intentar amarrar su apoyo. La comisión de este miércoles está programada desde el pasado 8 de febrero, pero hasta este lunes Vox no registró la petición de información de los contratos de Metro con la adjudicataria de estos trenes para verificar la necesidad del incremento de presupuesto. "No tenemos acceso a cómo se ejecutó esa compra", ha apuntado la portavoz Rocío Monasterio, "esperemos que nos lo enseñen".

La portavoz de Más Madrid, Mónica García, se ha mostrado totalmente contraria a apoyar este rescate de Metro. Aunque en las comisiones han solicitado la compra de este material, no están de acuerdo en cómo quiere financiarlo la Comunidad. Más Madrid apuesta, como Unidas Podemos, por una ampliación de capital de la compañía. "Ayuso nos hace chantaje: quiebra o colapso", ha censurado García antes de rematar diciendo que se tenía que haber inyectado capital hace mucho tiempo porque Metro "viene de una quiebra técnica".

Caos de las Cercanías

García también se ha referido este martes a otro medio de transporte que está dando otros quebraderos de cabeza a los madrileños. Esta mañana las Cercanías han vuelto a colapsar, varias líneas (seis de doce) han sufrido retrasos a primera hora, en el momento de mayor tráfico de usuarios. Este problema, recurrente en la Comunidad de Madrid, se ha convertido ya en otra batalla política en estas semanas de precampaña. La gestión de las Cercanías dependen del Gobierno central y desde el PP llevan semanas atacando al Ejecutivo de Pedro Sánchez de dejadez y de falta de inversión, alegando entre otras cosas dejación de funciones en la región por no haber ejecutado las inversiones previstas en el plan de Cercanías de Madrid que presentó el Gobierno anterior del PP mientras destina los recursos a las Rodalies de Cataluña.

La la portavoz de Más Madrid ha querido dejar claro que su partido no forma parte de ese Gobierno central que gestiona este medio de transporte. Ha defendido las enmiendas que Más País presentó a los Presupuestos Generales del Estado reclamando mayores inversiones para las Cercanías de Madrid al mismo tiempo que en la Asamblea de Madrid registraba propuestas para mejorar las alternativas de transporte. El objetivo es doble, explican en su equipo. "Ayuso intenta dibujar esta pelea por las Cercanías en dos bloques, entre la izquierda y la derecha", pero en Más Madrid quieren dejar claro que ellos no forman parte del Gobierno de la nación y, por tanto, no se responsabiliza de su gestión. Además, tampoco quieren permitir que Ayuso capitalice el enfado legítimo por el mal funcionamiento de las Cercanías.

Efectivamente, justo al mismo tiempo que García intentaba reflejar este doble propósito, la presidenta del Gobierno regional lanzaba tajante su mensaje: "Me gustaría aclarar que las Cercanías de Madrid dependen de Pedro Sánchez y me gustaría que lo sepa todo el mundo". El PP ha tomado ya este asunto por bandera, hace dos semanas los diputados populares se manifestaron frente al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana aprovechando la debilidad de aquellos días de la ministra Raquel Sánchez por los ceses en su ministerio como consecuencia de la polémica por los trenes de Cantabria y Asturias, y las declaraciones contrarias al Gobierno por las Cercanías son también recurrentes en las últimas semanas. Ayuso ha acusado hoy a Sánchez de "crear el caos" en la región y de provocar además que con el mal servicio de Metro se perjudica también a Metro y se multiplican los atascos en la ciudad.

En esta guerra, también ha entrado Podemos. Aunque forma parte del Gobierno central, la portavoz de la formación en la Madrid, que también lo es del nacional, Alejandra Jacinto, ha optado por no respaldar la gestión de la ministra de Transportes y exige más inversión en Madrid. Aunque la pelea de Unidas Podemos con este ministerio viene de lejos y tiene más que ver con las resistencias que han encontrado en su sede desde el principio de la legislatura para sacar adelante la Ley de Vivienda.