Madrid traslada los conciertos cancelados del Orgullo de la plaza del Rey a Barceló

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha confirmado este jueves en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno que los conciertos del Orgullo LGTBI 2022 que han sido cancelados por unas obras en las inmediaciones de la plaza del Rey serán reubicados en Barceló, también en el distrito Centro.

Los organizadores del Orgullo, MADO, anunciaron en redes sociales el martes por la noche que el Consistorio había decidido cancelar las actuaciones programadas en la plaza de la Reina, cómo se ha rebautizado a este enclave en el que solo tocan mujeres.

Madrid cancela los conciertos del inicio del Orgullo en la Plaza del Rey un día antes del pregón

MADO ya había anunciado esta mañana la reubicación del concierto de las Sex Bomb, Sonia Monroy y Yola Berrocal, que iba a tener lugar este jueves a las 21:10 horas, a la plaza de Pedro Zerolo a las 22:00 horas.

A la mañana siguiente y como reacción a las críticas que recibió el Ejecutivo de Almeida por las trabas que está poniendo a la celebración del Orgullo 2022, la vicealcaldesa, Begoña Villacís, informó desde la nueva plaza de Raffaella Carrà que estaban trabajando con el Área de Movilidad y con la Junta de Distrito Centro para reprogramar los conciertos en la plaza de Barceló.

El regidor de Madrid ha afirmado que esta mañana el concejal presidente de Centro, José Fernández, firmará la autorización para que se puedan realizar los conciertos en la plaza de Barceló y para que "no haya ninguna pérdida de concierto alguno durante esta semana de celebración del Orgullo".

Según avanzó ayer Begoña Villacís, los informes de Bomberos y Policía municipal del 27 de junio aseguraban que el área que rodea a la plaza del Rey "no era practicable" para la evacuación de los asistentes por las obras que hay en las calles colindantes.

"Han llegado ya todos los informes", ha destacado hoy Almeida, para que la plaza de Barceló sea utilizada durante la semana del Orgullo.

El alcalde ha aclarado que fue el viernes pasado cuando el Ayuntamiento comunicó a los organizadores que, "por razones de seguridad", no se podían celebrar los conciertos en la plaza del Rey. "Nos pusimos a su disposición para encontrar una solución y se puso encima de la mesa la plaza de Barceló", ha añadido.

Almeida ha tardado poco el lanzar un dardo a MADO, a quienes ha reprochado que no fue hasta el martes por la tarde cuando emitiesen la petición formal para encontrar una nueva localización. "A lo largo del día de ayer fuimos capaces de recabar todos los informes y esta mañana se va a firmar la autorización definitiva", ha dicho el alcalde.

Conflictos con MADO

El Ayuntamiento y MADO han tenido sus más y sus menos durante la organización del Orgullo 2022. Sin duda, la más sonada ha sido la negativa del equipo de Gobierno de colgar la bandera LGTBI de la fachada de Cibeles, sede del Ayuntamiento.

Almeida y su grupo han alegado en varias ocasiones que su rechazo a la colocación de la insignia se ve respaldado por una sentencia del Tribunal Supremo, la STS 1163/2020, que prohíbe expresamente "exhibir banderas no oficiales ni pancartas de carácter ideológico en el exterior de los edificios públicos que rompan con la debida neutralidad que han de tener las instituciones".

Pero no ha sido el enfrentamiento más largo y arduo. MADO ha estado reclamando públicamente hasta este martes, un día antes del pregón de la festividad, que el Consistorio se ha negado a retirar las limitaciones de las Zonas de Protección Acústica (ZPA).

El Área Delegada de Movilidad y Medio Ambiente, dirigida por Borja Carabante, se ha plantado y ha evitado eliminar las medidas de exención de ruido en las plazas en las que tienen lugar las actuaciones con motivo del Orgullo.

MADO solicitó la exención de los límites acústicos para la edición del Orgullo 2022, dado que esta festividad está considerada como un bien de interés general desde el 29 de junio de 2016. Esa excepción normativa ya se aplicó durante la celebración del MADO 2016, el World Pride Madrid 2017 y en las sucesivas ediciones de 2018 y 2019, "por razones sociales, económicas y de especial proyección para la ciudad de Madrid", agregan.

El concejal de Centro, que hoy firma la adaptación de la plaza de Barceló como punto de conciertos del Orgullo, fue el protagonista de otro sonado desencuentro. Él y la también concejala del PP Almudena Maíllo abandonaron la rueda de prensa de la festividad LGTBI más importante de la ciudad, después de que Uge Sangil, que preside la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales (FELGTB), acusase al alcalde de "LGTBfobia" por no colocar la bandera LGTBI.