PRODUCTIVIDAD

Fórmulas de cronotrabajo: "A la hora de configurar una plantilla laboral se debe prestar atención a la cronobiología"

Recomendaciones a la hora de adaptar la jornada laboral a los ciclos circadianos: cronotrabajo la última tendencia para mejorar la productividad

Búho, alondra o colibrí: cuál es tu cronotipo y cómo saber en qué turno de trabajo serías más productivo

Un hombre sentado frente al ordenador durante su jornada laboral.

Un hombre sentado frente al ordenador durante su jornada laboral. / Pexels - Marc Mueller

Andrea San Martín

Andrea San Martín

¿En qué momento del día eres más productivo? ¿Por la mañana, nada más tomarte el café? ¿Por la tarde después de una siesta? ¿O eres del club noctámbulo? "Es importante conocer el cronotipo de la persona para poder optimizar el tipo de trabajo que va a realizar, así como su turno de trabajo", explica Celia García Malo, vocal del grupo de estudio de trastornos de la vigilia y sueño de la Sociedad Española de Neurología a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA. Por ejemplo, una persona de cronotipo alondra (madrugadores) lo va a pasar "francamente mal" en turno de noche y le va a costar adaptarse.

En cambio, si su jornada laboral es diurna tendrá un mayor rendimiento, su nivel de productividad será mayor y tanto el estado de ánimo como la calidad del sueño será mejor. "La mayoría encontrarán mayor productividad por la mañana, pero sin olvidar las excepciones, que aunque sean una minoría, existen", detalla Marc Romera, autor del libro El manual de la cronobiología y los ritmos circadianos (Bubok Publishing). A diferencia de un cronotipo búho que serían los trasnochadores.

Cada uno de nosotros tenemos una preferencia para estar despierto o dormido a unas horas determinadas del día y en función de nuestro ritmo interno hace que estemos más cómodos trabajando por la mañana o en turno de noche. ¿Cómo saberlo? Cuando nuestro reloj interno, "predefinido por los genes", nos avise de que es la hora de acostarse, ya que el cuerpo libera la hormona del sueño, llamada melatonina, para ayudarle a sentirse cansado. Y es que la producción de hormonas está muy asociada a los ciclos circadianos. Precisamente el cortisol es la hormona que, en alternancia con la melatonina, hace que nuestro cuerpo regule sus descansos. Aún así, hay factores ambientales y reguladores que refuerzan esa adaptación como puede ser la exposición a la luz solar, e incluso, el ejercicio físico.

Disfruta de un sueño reparador incorporando alimentos ricos en melatonina a tu rutina de noche

Disfruta de un sueño reparador incorporando alimentos ricos en melatonina a tu rutina de noche / PEXELS

De hecho, la exposición al sol durante toda la jornada, "actúa a modo de reservorio de serotonina: un neurotransmisor o mensajero químico que nos genera una sensación de bienestar o felicidad, que a medida que la luz de la jornada desaparece, se va convirtiendo en melatonina, haciendo que podamos dormir", subraya Romera, el reconocido divulgador de salud (Elite Fitness). Sin embargo, el estrés, las horas de nuestras ingestas, las pantallas de luz artificial de espectro azul por la noche e incluso la temperatura pueden interferir en este proceso, dificultando la aparición de sueño.

En el caso de un patrón de sueño tardío que quiera adaptarse a una jornada laboral en turno de mañana podrá progresivamente ir adelantando la hora en la que se acuesta. Se trata de despertarse pronto para que esa segregración de melatonina se posponga a la noche y aunque sea difícil al principio acaba de manera progresiva ajustándose.

¿Y qué sucede con aquellos trabajadores con turnos rotativos? La mayoría de los casos presentan trastornos del sueño, es decir, "nunca consiguen dormir el número de horas necesarias", profundiza la experta en medicina del sueño. En la elaboración de turnos de trabajo lo ideal sería tener el periodo más largo posible de los mismos turnos, por ejemplo, siete días seguidos de mañana y siete de tarde. A la hora de configurar una plantilla laboral "se debe prestar atención a los aspectos de la cronobiología" que son importantes tanto para la productividad como para la salud porque "el cuerpo se va adaptando progresivamente, no se puede hacer cambios bruscos y pretender que ese trabajador vaya a dormir de manera normal". Asimismo, dentro de lo común, sin tener un trastorno del ritmo circadiano, "están los que se sienten más productivos por la mañana y otros a última hora del día", destaca la neuróloga experta en trastorno de sueños en la Clínica CISne.

Una trabajadora relajada durante su jornada laboral.

Una trabajadora relajada durante su jornada laboral. / Pexels - Andrea Piacquadio

Mientras que el grupo más numeroso de la población española corresponde a un "cronotipo indiferente", comúnmente conocido como los colibríes, y se caracterizan por ser ser especialmente diurnos y por poder adaptarse a madrugar o trasnochar con cierta facilidad. Suelen tener sueño alrededor de las doce de la noche y se levantan sobre las ocho, e incluso, tienen facilidad para adaptarse a un horario de mañana o de tarde y tiene dificultades para adaptarse al horario nocturno porque va contra nuestra biología humana.

Búsqueda de productividad en las empresas

El cronotrabajo permite a los empleados deshacerse del horario de oficina estándar y elegir horarios que coincidan con sus cronotipos personales, es decir, el momento natural en el que sus cuerpos quieren dormir. A raíz de la popularidad del teletrabajo en la era postcovid, llegando a ser España el cuarto mejor país del mundo para teletrabajar, gran parte de los empleados piden a las empresas que adapten sus horas de trabajo a los niveles naturales de energía para lograr la máxima productividad. En la actualidad se presenta un nuevo desafío: no sólo el trabajo híbrido, sino también el desafío del cronotrabajo.

Por mucho que este prisma garantice a los trabajadores una mayor independencia y satisfacción debido a que su rendimiento es mayor, aún hay grietas en esta tendencia que pretende romper con la jornada laboral no lineal. Esto se debe a que las reuniones y proyectos compartidos deben realizarse a la misma hora y no a horas cruzadas. Por lo que retar a la rigidez del horario de trabajo convencional puede tener determinadas contraindicaciones.

No obstante, este nuevo enfoque no solo puede mejorar la productividad individual, sino también el bienestar general, incluido el de los responsables de equipos. A medida que más empresas consideran adoptar esta práctica, podría estar en camino una transformación fundamental en la cultura laboral moderna.

La flexibilidad laboral se presenta como el equilibrio necesario entre las demandas profesionales y la vida personal. No es sólo el futuro. También es la llave para abrir la puerta al máximo potencial de los trabajadores y las organizaciones en la actualidad.