FEMINISMO

¿Qué diferencia hay entre violencia intrafamiliar y violencia de género? Estas son las claves

La violencia machista se ejerce contra las mujeres por el simple hecho de serlo y se extiende más allá del núcleo familiar

Feminismo

Feminismo / FERRAN NADEU

Los movimientos feministas utilizan el lenguaje con rigor para no dar pie a una terminología engañosa que intente ocultar la realidad de la violencia machista. Hay una violencia estructural que se ejerce hacia las mujeres por el simple hecho de serlo—derivada del sistema patriarcal—por lo que conviene tener especial cuidado a la hora de ponerle nombre a las vivencias que sufren las víctimas. También hay que evitar prejuicios y errores que minusvaloren cierto tipo de violencia y provoquen que muchas personas no sean conscientes de lo que realmente les ocurre.

Ahora, el acuerdo de gobierno en la Comunidad Valenciana entre PP y Vox ha reabierto el debate. Entre los 50 puntos del pacto fimado por los dos partidos figura uno en el que se dice que el futuro gobierno defenderá "los derechos de las familias" y promoverá políticas que persigan "erradicar la violencia intrafamiliar, en especial la que sufren mujeres y niños, garantizando la igualdad entre todas las víctimas".

Su forma de negar la existencia de la violencia machista ha provocado duras críticas desde la izquierda, que acusa también al líder del Partido Popular, Alberto Núnez Feijóo, de "cinismo e hipocresía" al reconocer que sí hay violencia de género tan solo 48 horas después de que su formación haya sellado un pacto con Vox que niega su existencia.

El núcleo del debate está en que se sustituye el término de 'violencia machista' o 'violencia de género' por el de 'violencia intrafamiliar'. Pero ¿qué dice la legislación al respecto?

Violencia doméstica (o intrafamiliar)

La violencia doméstica es aquella que se da en el seno de un hogar cuando uno de los miembros del grupo familiar tiene un comportamiento de abuso hacia alguno o todos los demás miembros de la familia, por lo que las víctimas pueden ser tanto hombres como a mujeres, sean menores o adultos.

Este tipo de violencia se recoge en el artículo 173.2 del Código Penal y en su definición cobra especial importancia el contexto en el que se desarrolla, que suele darse en el ámbito familiar y se extiende a todo el círculo de personas que conviven.

A nivel jurídico se define como la "violencia física o psíquica sobre quien sea o haya sido su cónyuge" o sobre aquella persona que esté o haya estado ligada a él por una relación análoga de afectividad, aunque no haya convivencia. También se aplica sobre los menores o personas con discapacidad que necesiten especial protección, ya sean convivientes o se encuentren sujetos a la potestad, tutela, curatela, acogimiento o guarda de hecho del cónyuge o conviviente, o sobre aquellas personas que estén amparadas en cualquier otra relación por la que se encuentren integrada en el núcleo de su convivencia familiar. Y lo mismo para las personas que por su especial vulnerabilidad se encuentran sometidas a custodia o guarda en centros públicos o privado.

Violencia de género (o machista)

La violencia de género es aquella que se ejerce exclusivamente sobre las mujeres por parte de hombres que estén o hayan estado ligados a ellas por relaciones de afectividad (parejas o ex parejas). De acuerdo con la doctrina, este tipo de violencia incluye tanto la física como la psicológica, agresiones sexuales, amenazas, coacciones y privación injustificada de libertad, de manera que se afecte tanto la integridad física y psíquica de la mujer, como su libertad sexual, ambulatoria y de decisión.

El Ministerio de Igualdad expone que, en este caso, "el objetivo del agresor es producir daño y conseguir el control sobre la mujer, por lo que se produce de manera continuada en el tiempo y sistemática en la forma, como parte de una misma estrategia".

Para que se reconozca como tal, el Tribunal Supremo establece que esta violencia ejercida debe ser "una manifestación de discriminación por razón de sexo, de desigualdad entre el hombre y la mujer y que tenga relación con el poder ejercido por los hombres sobre las mujeres".

A día de hoy, la violencia de género es una lacra social que ha dejado la escalofriante cifra de 1.200 mujeres muertas y más de 400 menores huérfanos desde que se tiene registro —sin tener en cuenta todas aquellas personas externas a ello que hayan sufrido las consecuencias, como aquellos casos donde el agresor ha acabado con la vida de otros familiares con el objetivo de hacer daño de forma indirecta a la víctima, o los casos en los que la víctima ejercía un trabajo sexual—.

Hasta 2004 se juzgaban bajo el mismo paraguas

Hay que tener en cuenta que, hasta la aprobación de la Ley de Violencia de Género en 2004 bajo el gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero, este tipo de casos se juzgaban bajo el paraguas de la violencia doméstica. El trasfondo que motiva la violencia machista es la desigualdad entre el género masculino y el femenino, la creencia de una superioridad esencial del hombre sobre la mujer.

Por tanto, la violencia machista se ejerce contra las mujeres por el simple hecho de serlo, y en un amplio abanico de ámbitos sociales que se extienden más alla del núcleo familiar.

Muchos organismos oficiales han destacado la importancia de mantener la distinción entre ambas violencias. Desde el Instituto de la Mujer se explica que este tipo de violencia “ha sido y sigue siendo una de las manifestaciones más claras de la desigualdad, subordinación y de las relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres”. La ONU estima que el 35% de las mujeres de todo el mundo ha sufrido violencia física y/o sexual por parte de un hombre.