LA OTRA CARA DE LAS SUBVENCIONES

Las ayudas por zona catastrófica tardan más de un año y cubren solo el 50% de daños

Vinaròs recibirá la mitad de lo que pidió en 2021 por las lluvias torrenciales

Tres bomberos durante la extinción del incendio forestal en Azuébar en 2021.

Tres bomberos durante la extinción del incendio forestal en Azuébar en 2021.

Núria B. Bigné

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció el pasado lunes, en su visita al incendio de Bejís, que la zona afectada por el fuego forestal que ha consumido casi 20.000 hectáreas de monte en el Alto Palancia será declarada catastrófica para poder agilizar las ayudas económicas. Y aunque esta es una noticia que, sin duda, recibieron de buen grado los municipios afectados, el dinero no llega precisamente con celeridad ni suele cubrir la totalidad de los daños.

Así lo confirman varios alcaldes de la provincia que en el pasado sufrieron en sus localidades graves incendios, inundaciones o granizadas, por ejemplo. Sostienen, en términos generales, que la materialización de las ayudas se dilata durante más de un año --en ocasiones, llega a los 18 meses-- y que el Gobierno suele financiar la mitad del coste de los destrozos.

Hace ahora un año, Azúebar se declaró zona catastrófica tras el incendio que calcinó 440 hectáreas de masa forestal y obligó a desalojar el pueblo. Su alcaldesa, Jéssica Miravete, recordó ayer en conversaciones con este periódico que "al no superar las 500 hectáreas, no fue considerado un gran incendio y el Gobierno central notificó que financiaría el 40% de los daños, pero un ayuntamiento tan pequeño como el nuestro no podía costear el 60% restante, así que en nuestro caso no se materializaron las ayudas".

Dice la munícipe que la localidad vecina de Soneja tuvo la misma situación. «A nivel particular solo se vieron afectadas algunas parcelas de cultivo. Consultamos a qué ayudas se podían acoger y solo podían hacerlo si tenían el seguro agrario», recuerda Miravete.

Vinaròs sufrió en septiembre del 2021 lluvias torrenciales que llegaron a descargar casi 250 litros por metro cuadrado en solo dos horas y propiciaron también la declaración de zona catastrófica. Precisamente, el pasado 16 de agosto se publicó oficialmente en el Boletín Oficial del Estado la concesión de las ayudas --11 meses después--, como confirmó ayer el alcalde, Guillem Alsina.

"La subvención es realmente al 50% porque solicitamos 830.000 euros y se han concedido 415.000 para arreglar caminos rurales, carreteras etc..", incidió el primer edil. "La entidad beneficiaria es la Diputación y es este organismo el que debe repartir los fondos a los ayuntamientos. Ahora tenemos tres meses para licitar las obras", destacó Alsina.

Temporales como Gloria, en enero del 2020, o Filomena, en enero del 2021, dejaron daños cuantiosos en la costa sur de Castellón. En Almenara, la alcaldesa, Estíbaliz Pérez, señaló que las ayudas llegaron "un año y medio después". "Recuerdo que el Gobierno sufragó gastos de la maquinaria utilizada en la emergencia, pero no todos los costes eran subvencionables. Quizás hablamos del 50%", aseveró la munícipe, quien recordó que la mayoría de las casas inundadas eran segundas residencias, hecho excluyente en supuestos de zona catastrófica.

Las ayudas por el temporal Gloria también tardaron en llegar a Moncofa para acometer las reparaciones. "Muchísimo", según el primer edil, Wenceslao Alós.

El pasado verano las lluvias torrenciales también dejaron viviendas anegadas, coches destrozados y caminos intransitables en Benicàssim, pero la declaración de zona catastrófica fue denegada por el Ministerio.