LOS ROSTROS DEL AÑO (VI)

Jon Rahm, de conquistar Augusta a subirse en el carro dorado saudí

El golfista español ha cerrado un 2023 impecable, con cuatro triunfos que se han visto empañados por su multimillonario contrato con el LIV

Jon Rahm.

Jon Rahm. / Nacho García

Isabel Guillén

Isabel Guillén

Los contratos multimillonarios de Arabia Saudí han marcado el 2023 en el mundo del deporte. El Mundial de Qatar era solo un ápice de lo que estaba por llegar. Este año, el imperio saudí ha demostrado un año más su imperiosa voluntad de utilizar el deporte para limpiar su imagen. Cristiano Ronaldo, Neymar, Benzema y ahora, Jon Rahm, el vigente campeón del Masters de Augusta y número tres del ránking mundial, que ha acabado el año aceptando la multimillonaria oferta de la liga saudí de golf, el LIV, firmando el mayor contrato de la historia del deporte.

Fuera de esto, y guste o no, el de Barrika ha culminado un año para enmarcar, cuyos dos puntos álgidos han sido la consecución del Masters de Augusta en abril y su segunda Ryder Cup con Europa, en septiembre. El deportista español ha conquistado cuatro triunfos individuales este 2023, el mayor número de su carrera: el Sentry Tournament, el American Express, el Genesis Invitational y el Masters.

Un inicio de oro

Rahm ha mantenido una regularidad impecable a lo largo de la temporada, especialmente en los primeros meses, donde arrancó a toda marcha con dos victorias en el mes de enero: el Sentry Tournament of Champions y el American Express. Era su año.

En febrero, llegaba el tercer premio, el The Genesis Invitational, que le llevó al número uno mundial. No contento con esto, llegó en abril su segundo 'Grande', el Masters de Augusta, donde el español fue el rey y señor del campeonato, lo que le hizo acabar con la chaqueta verde. Un inicio de oro que completó con el segundo puesto en el México Open.

Jon Rahm tras ganar el Masters de Augusta

Jon Rahm tras ganar el Masters de Augusta / Reuters

Desde ahí, su nivel fue de más a menos, y así lo reconocía el de Barrika: "Después del triunfo en el Genesis no volví a sentirme tan cómodo, aunque en Augusta encontré la manera de poner la bola casi siempre en juego. Y también es cierto que en los últimos torneos que he jugado este año me he sentido de nuevo un poco mejor con el driver".

Cerca de mantenerse en lo más alto

De grande en grande, Rahm también destacó en el US Open, donde se hizo con la décima plaza, mientras que en el Open Championship, en julio, volvió a rozar el triunfo, con un segundo puesto. El PGA Championship fue su único bache, ya que el español cayó al puesto número 50. En el torneo final del PGA Tour, The Tour Championship donde se decidía la FedEx Cup, no jugó al nivel que se esperaba del golfista que iba a camino de rozar la gloria en abril y se tuvo que conformar con el puesto 18.

De vuelta a Europa, tocaba el BMW PGA Championship, en Wentworth, en el que acabó cuarto, el Open de España, con la novena plaza y el DP World Tour Championship, donde volvió a derrochar la calidad de principios de año, que le sirvió para terminar quinto, tras una gran remontada.

Empezará Rahm el 2024 siendo número tres del mundo y uno de los mejores deportistas españoles del año, con más de 20 millones de dólares en premios, y con la sensación de que todavía no ha tocado techo a sus 29 años. Su siguiente objetivo es volver a ganar más ‘grandes’. Y tratará de lograrlo desde Arabia, siendo el deportista mejor pagado de todos los tiempos.

Su “lealtad” por el circuito americano

Desde el inicio del LIV Golf se había ido extendiendo el rumor de la posible incorporación del ganador del Masters de Augusta 2023, aunque el español tenía clara su fidelidad por el PGA Tour. "Esta es mi respuesta oficial, la única vez que hablaré de esto, donde estoy declarando oficialmente mi lealtad al PGA Tour", decía en 2022 ,cuando se le preguntaba por la posibilidad de acabar en Arabia.

No creo que el circuito saudí sea beneficioso para mí. Te ofrecen cifras para engatusarte, pero yo estoy aquí para hacerme un nombre

Jon Rahm

— Golfista español

Su cercanía y vinculación con Phil Mickelson, primer fichaje y motor inicial del LIV Golf, siguió alimentando las dudas. A ambos jugadores les representa la misma empresa (Steve Loy), pero su posición, hasta el momento, seguía siendo la misma. "No creo que el circuito saudí sea beneficioso para mí. Te ofrecen cifras para engatusarte, pero yo estoy aquí para hacerme un nombre", aseguraba.

El deportista mejor pagado del mundo

Y entonces, cuando parecía que el deporte español iba a dar una tregua este mes de diciembre. Cuando Rahm aseguraba que se mantendría en su querido PGA Tour. El español firmaba por el LIV Golf, el circuito saudí, un millonario contrato de 550 millones de euros hasta finales de 2029.

Jon Rahm saluda a Greg Norman en su desembarco en el LIV Golf

Jon Rahm saluda a Greg Norman en su desembarco en el LIV Golf / LIV Golf

Y así pasaba Rahm de ser el fiel defensor del circuito americano, criticando "las cifras para engatusarte" saudíes, a alegar que "es divertido jugar por algo más que por ti mismo" y que "LIV Golf ha traído algo fresco y nuevo, es algo que me emociona", tras hacerse oficial su firma con la liga saudí.

LIV Golf ha traído algo fresco y nuevo, es algo que me emociona

Jon Rahm

— Golfista español

A pesar de ello, el deportista defendía que no se movía por los millones saudíes: "El dinero está genial, pero no juego al golf por dinero, sino por el amor al juego. Hay otras motivaciones: ser parte de un equipo, ser capitán, liderar a mis compañeros... Es especial". Se refiería Rahm a que entrará en el circuito como capitán de los 'Fireballs', el equipo que capitaneaba hasta ahora Sergio García. De esta manera, habrá un equipo 100% español junto a Sergio García, Eugenio Chacarra y David Puig. 

Cambiar de opinión es una tradición tan arraigada como comprensible, y más aún cuando están de por medio 550 millones, que pesan y mucho. "Nadie nos fuerza a hacer esto, es nuestra decisión", decía Rahm. Nadie, excepto el dinero suadí, que empaña todo lo que gira alrededor de un país que vulnera los derechos humanos. Al fin y al cabo, el lavado deportivo siempre funciona. Y, en realidad, Rahm es solo uno más de los muchos que se han subido en el carro dorado saudita y que abrieron las puertas de todos los que vinieron detrás. Estemos de acuerdo o no, lo innegable es que Jon Rahm pone punto y final al mejor año de su carrera. De un inicio de oro en lo deportivo, a un final aún más dorado en lo económico.