FÓRMULA 1

Guenther Steiner, el "tipo feo y raro" de la Fórmula 1 que dirige la "banda de pringados" de Haas

Lidera desde 2016 el proyecto estadounidense de la Fórmula 1 con un estilo único, cargado de palabrotas, que le ha convertido en la estrella de la serie 'Drive to Survive'

En 2018, Haas fue quinto en Constructores y en 2020 perdió por la invasión a su piloto y patrocinador rusos: "Todo nos pasa a nosotros, pero estamos orgullosos de luchar"

Los jefes de la Fórmula 1 se rinden a Alonso: "Su Aston Martin es la única alternativa para ganar a Red Bull"

Guenther Steinar, jefe de equipo del Haas F1 Team, cabreado en cualquier otro momento de la temporada.

Guenther Steinar, jefe de equipo del Haas F1 Team, cabreado en cualquier otro momento de la temporada. / HAAS F1 TEAM

Denís Iglesias

Denís Iglesias

Hay "un tipo feo y raro", como Guenther Steiner (Merano, 1965) se define, al que paran en cada gran premio de la Fórmula 1 para hacerse cientos de fotos. Lo normal es encontrarse, sin importar el país, a una legión de seguidores con camisetas que llevan su cara con frases como "parecemos una panda de pringados". Aunque él asegura que nunca ha dicho eso -sí cosas peores- al Haas F1 Team, equipo al que dirige desde su fundación en 2016. Steiner, un "italiano, a pesar de mi apellido" -nació en la frontera con Austria- que aprendió inglés en el Mundial de Rallys gracias a un grupo de escoceses entre los que estaba Colin McRae, "de ahí que diga tantos tacos", justifica.

Aunque todos los directores tienden al exabrupto, él lidera la clasificación hasta el punto de que en su box le pusieron un bote para poner monedas por cada palabrota. Aquello fue peor que la inflación para un Steiner que ha saltado a la fama por sus apariciones en 'Drive to Survive', la serie de Netflix que cuenta las interioridades de la Fórmula 1.

Más allá del personaje excéntrico se encuentra un profesional comprometido, que ha revolucionado el 'paddock' con Haas, la apuesta estadounidense en un deporte donde consigue mucho con poco. La mejor prueba, en el GP de Canadá de este fin de semana donde Nico Hülkenberg fue segundo en la clasificación. Pero si algo prueba la historia de Haas es que siempre surge algo que empaña el resultado. El alemán fue sancionado por no cumplir el tiempo mínimo estipulado de antemano durante la bandera roja originada por el accidente de Piastri

"Parece que en la F1 hay que tirar el dinero"

"A veces parece que hay que tirar el dinero para competir. Lo más importante es ser eficiente. Todo ha mejorado con la limitación del presupuesto, porque de lo contrario era muy difícil continuar. Así jugamos más en el mismo terreno", defiende en conversación con EL PERIÓDICO DE ESPAÑA en un acto de promoción de 'Sobrevivir a toda velocidad: un año en la Fórmula 1' (Principal, 2023), libro que es una vuelta de tuerca a lo que se ve en Netflix. Un diario íntimo y divertido, esrito en primera persona y que utiliza la temporada 2022 para contar la génesis, evolución, éxitos y desgracias de Haas.

"Somos diferentes porque Haas es el equipo menos corporativo de la parrilla, pero mira, algunos dijeron: 'Os iréis de este deporte todavía más rápido de lo que habéis llegado'. Y aquí seguimos. No somos pobres, intentamos administrar nuestro capital de forma adecuada", reflexiona un profesional que empezó como aprendiz de mecánico en los rallyes. Fue prosperando hasta dirigir equipos en los que estaban Carlos Sainz, "el piloto definitivo" o Colin McRae, "el corredor con más talento".

Guenther Steiner, jefe del equipo Haas F1 Team, riéndose en algún momento de la temporada.

Guenther Steiner, jefe del equipo Haas F1 Team, riéndose en algún momento de la temporada. / HAAS F1 TEAM

Antes de la etapa de Haas, Steiner fue jefe de equipo en Jaguar y tuvo a sus órdenes a Pedro Martínez de la Rosa, "una persona de primera clase que tuvo la mala suerte de estar en el lugar no indicado en el momento inoportuno". También fue responsable de operaciones en una incipiente escudería Red Bull, a la que este año considera solo puede ganarle "el Aston Martin de Fernando Alonso, quien por fin tiene un buen monoplaza este año".

Un piloto y patrocinador rusos en Haas

En Haas, Steiner ha vivido de todo desde 2016. El proyecto empezó con Esteban Gutiérrez y Roman Grosjean como pilotos. En 2020, el francés sufrió un salvaje accidente en el GP de Bahréin que todavía estremece a Steiner, quien a diferencia de otros jefes de equipo vive el día a día junto a sus corredores. El que más alegrías le ha dado es el danés Kevin Magnussen, "el vikingazo", como él le llama, quien logró una 'pole' en el Gran Premio de Sao Paulo en 2022.

Tras ser repescado el año pasado, conforma equipo en 2023 con el alemán Nico Hülkenberg, segundo en la clasificación del GP de Canadá hasta que la sanción de la FIA arruinó su desempeño. "La primera vez que lo fichamos lo pusimos a hacer fotocopias", recuerda en el libro, donde le faltan exclamaciones para describir la campaña 2018, cuando Haas terminó quinto en el Mundial de Constructores. Pero en la escudería estadounidense "nos persigue el drama... ¡Ojalá saber por qué para evitarlo!", lamenta cuando saca a colación lo sucedido en 2021.

"Solo Haas podía tener un piloto y patrocinadores rusos (Nikita Mazepin y Uralkali, la empresa de la que era accionista su padre) justo en el momento en el que Putin invadía Ucrania y provocaba el odio mundial", rememora Steiner, quien a veces piensa que "no ponemos demasiado esfuerzo en evitar tanta tragedia, pero si lo hiciéramos a propósito no conseguiríamos este drama. Todo nos pasa a nosotros". A pesar de todo lo sufrido, "normalmente lidiamos con ello lo mejor que podemos y nuestro equipo lo hace casi todo bien".

"Muchos han copiado nuestro modelo de negocio"

Por eso Steiner no encuentra episodios de los que avergonzarse, ni siquiera cuando se excede en el box descubriendo mil y una maneras de meter la palabra 'joder' o 'jodidos' en una frase, "porque tenemos unas metas y estrategias: a veces suceden cosas sobre las que no tenemos control, pero el equipo siempre prospera", incide. El 'capo' de Haas cree que las dos únicas cosas que todos los adultos tienen común "son una opinión y un agujero en el culo, por lo que cuando ambas se encuentran de repente aparecen las gilipolleces".

Steiner no rehuye el combate cuerpo a cuerpo. "El momento del que me siento más orgulloso es cuando en 2016 salimos a competir y, obviamente, cada vez que logramos puntuar. Mucha gente no confiaba en nosotros. Tuvimos muchos detractores, porque adoptamos un modelo de negocio completamente nuevo y diferente a cómo se hacen las cosas en la Fórmula 1. Demostramos que no hay que hacer lo de siempre y mucha gente nos copió. De ahí que nos sentimos muy orgullosos de haber abierto una puerta", sentencia alguien que odia, sin tapujos, el exceso de glamour de algunos grandes premios como Mónaco, donde la carrera queda en un segundo plano.

"Peleas con la FIA. Sanciones por invasiones ilegales de países soberanos. Peleas con la FIA -como en Canadá-. Multimillonarios malcriados. Peleas con la FIA. Esa es mi vida. Muchos la querrían", enumera con acidez Steiner. El dueño de un bigote cuarteado por las miles de veces que se mueve su labio al día. Para reir y reirse. Del mundo y de él mismo. O para maldecir al universo. Es un soplo de aire fresco con el que combate el clasismo que detesta, "porque nos priva de talento". Una anomalía necesaria y, por suerte, única. "Un día me dijeron que me clonara y le dije: tú estás mal de la puta cabeza. Discutiría conmigo todo el tiempo. Sería una pesadilla".

Guenther Steinar, máximo responsable de Haas, pensando qué será de su equipo antes del GP de Canadá.

Guenther Steinar, máximo responsable de Haas, pensando qué será de su equipo antes del GP de Canadá. / EUROPA PRESS