Los árbitros amenazan con "medidas drásticas" si no para la "campaña" en su contra

Los árbitros españoles han trasladado su "profunda preocupación por la lamentable situación que se ha generado en torno a su colectivo" en lo que consideran como "una campaña perfectamente medida y organizada". La denuncia llega después de una serie de comunicados emitidos por diferentes clubes de LaLiga en contra de su ejercicio y de agresiones como la que sufrió un compañero en Ceuta. "Lamentamos los ataques permanentes de LaLiga y de sus principales dirigentes", argumentan desde el CTA.

Desde este organismo ponen en el disparadero a Luis Gil, director de Competiciones de LaLiga, por un vídeo -se refirió a "la falta de criterio arbitral"- donde "tratan de señalar y ridiculizar las actuaciones arbitrales, una muestra más del interés de LaLiga en generar un clima irrespirable hacia nuestro colectivo, sembrar la duda sobre nuestras decisiones y menoscabar la profesionalidad arbitral". Por ello, los árbitros de Primera y Segunda División solicitan "respeto y responsabilidad institucional ante un hecho sin precedentes en el fútbol español".

Defensa de las designaciones arbitrales

Además, ponen en conocimiento de la opinión pública "que el CTA no designa a los árbitros, sino que lo hace un órgano denominado CACP (comité de designación) miembro de la RFEF, un miembro de LaLiga y otro miembro de designación por común acuerdo o, si no existiera, por el CSD". Uno de los miembros que durante años fue designado por LaLiga para desarrollar esta labor es el excolegiado Antonio Jesús López Nieto, "quien, al contrario de lo que está haciendo LaLiga, enarbola la autonomía del colectivo arbitral. López Nieto manifestó públicamente que durante 16 años estuvo 'designando árbitros', aseguró que 'todo es mentira' y pidió 'reposición para los árbitros, para el fútbol y para la credibilidad”.

Por todo lo expresado en su comunicado, los árbitros mandan "un mensaje para la reflexión y así no tener que lamentar ninguna desgracia más de las ya acaecidas, ni tener que adoptar medidas drásticas y con urgencia que repercutirían directamente en nuestra competición". El CTA, duro en su comunicado, zanja así la escalada de la tensión vivida en las últimas semanas y la amenaza de la huelga queda latente, aunque no hay convocatoria por el momento. Con todo, es uno de los momentos más tensos en la relación de los árbitros con los clubes en los últimos tiempos, donde el VAR y otras medidas han terminado en peticiones de "justicia arbitral" por parte de los equipos.

'Caso Negreira' y lucha por su autonomía

"Queremos dejar clara nuestra autonomía, que debe serlo y lo será siempre de LaLiga y delos clubes, a pesar de la confusión en la que se ha tratado de sumergir al aficionado", defienden los colegiados en un contexto donde su credibilidad se ha puesto en entredicho tras las indagaciones derivadas del Caso Negreira. A esto hay que unirle, tal y como informó EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, la intención de Javier Tebas para desligar a los árbitros de la RFEF, en busca de una mayor independencia. Algo similar a lo que sucede en Inglaterra, donde los colegiados tienen una institución propia.

En el vídeo difundido por el CTA, se recogen, con un fondo negro, las denuncias del colectivo. "Sois unos hijos de p***, os vamos a matar" o "de aquí no sales vivo" son algunos de los mensajes que figuran en la pieza audiovisual, donde se cuantifica la violencia: "Más de 100 árbitros agredidos, 15 de ellos menores de edad, ¿qué más tiene que pasar?", denuncia el CTA. Su presidente, Luis Medina Cantalejo, se personó en Ceuta, junto a Luis Rubiales, máximo mandatario de la RFEF, tras la agresión sufrida por el árbitro Antonio Pozo a manos de un grupo de jugadores del equipo juvenil del CD Polillas y familiares.

Cruce de comunicados

El divorcio entre los árbitros y el resto de estamentos del fútbol es evidente. Los clubes han levantado la voz en contra de "la falta de criterio arbitral". Las notas de prensa se han sucedido en las oficinas del Sevilla, Espanyol, Cádiz o Atlético, que han realizado comunicados mostrando su disconformidad con la deriva de los colegiados. Entre las jugadas recientes que han generado controversia está un penalti no señalado por Del Cerro Grande al Valencia. El director corporativo del conjunto che, Javier Solís, denunció la mano no señalada a Fernando Reges, del Sevilla. "Ha sido un robo, huele muy mal el fútbol", aseguró en unas declaraciones que están siendo investigadas por la RFEF.

Para el CTA, estas reacciones demuestran un odio sistémico hacia su colectivo. "Es una situación que no sólo afecta al colectivo arbitral profesional sino, lo más preocupante aún, a menores que comienzan en categorías inferiores y que carecen de seguridad en el campo, niños que son señalados, insultados, amenazados. Y lo que es más grave, agredidos físicamente, algo intolerable y efecto directo de la campaña mediática de desprestigio que sufrimos por parte de LaLiga y los clubes profesionales", sentencia el CTA en una nota que quiere ser un llamamiento a toda la sociedad.