NEUROMA DE MORTON

La reina Letizia normaliza las dolencias en los pies

El Neuroma de Morton, que sufren muchas mujeres, entre las que se encuentra la reina Letizia, se debe al uso de zapatos con altura y de punta

El protocolo establece el tipo de tacón que debe utilizarse en cada evento  

Qué es el neuroma de Morton, la dolencia que padece Letizia: síntomas y causas

PI STUDIO

Saray Fajardo

La reina Letizia siempre ha destacado por su elegante y rompedor estilo en cada uno de sus actos. Los zapatos suelen ser uno de los complementos más llamativos de la monarca, que siempre apuesta por tacones altos, que suelen rondar los diez centímetros de altura. Sin embargo, esta pasión por los tacones ha comportado que Letizia sufra desde el pasado 2022 una dolencia en los pies que, como se pudo ver hace unos días en el besamanos celebrado en Países Bajos, le impide estar de pie.

Este dolor es conocido como el Neuroma de Morton, una molestia que sufren las mujeres en mayor medida debido al abuso de los zapatos de punta y tacón. Como explica la presidenta del Ilustre Colegio Oficial de Podología de la Comunitat Valenciana (ICOPCV), Pilar Nieto, se trata de "un dolor muy molesto, ya que es de tipo eléctrico, como el que podemos sentir cuando nos damos un golpe en el codo, por lo que implica que, cuando aparece el dolor, vaya acompañado de una reacción corporal de movimiento brusco”.

En este sentido, el podólogo y miembro del ICOPCV, Jorge Escoto, señala que la causa del dolor que sufre la reina, y muchas mujeres, se debe a la utilización de tacones con puntera estrecha, que comporta "una compresión de los dedos y, por lo tanto, se comprimen los nervios". Añade: "El dolor lo provoca la inflamación que resulta del roce continuo sobre el nervio por las estructuras por las que discurre". Esta dolencia se puede curar evitando el uso de este tipo de calzados, que superan los 3 o 4 centímetros de altura, y sustituirlos por unos más anchos que respeten la anchura del pie. "La reina empezó a bajarse de los tacones cuando se le diagnosticó esta dolencia. La hemos visto con alpargatas o manoletinas, pero ha vuelto a utilizar este tipo de calzado apretado", recuerda Escoto.

Soluciones

Los podólogos también recomiendan el uso de plantillas hechas a medida. En los casos más urgentes, se pueden realizar infiltraciones que evitan el dolor. "La fase aguda se puede solucionar con anestesia. La reina podría haber recibido un pinchazo para calmar el dolor durante la recepción", explica el especialista. Sin embargo, en algunas situaciones, puede ser necesaria la cirugía abierta o ecoguiada.

El Neuroma de Morton no se trata de una dolencia persistente, sino que, como reconoce Escote, la persona afectada puede sufrir brotes. "En el momento en el que el nervio se desinflama, el dolor se reduce. Si Letizia deja de utilizar los tacones, deja de sentir el dolor. Pero si los lleva varios días, vuelve el dolor. Tal vez, esto es lo que le ha ocurrido", indica el experto, quien reconoce que "es fácil criticar desde fuera, pero deberíamos estar en sus pies".

Moda y estética

Los zapatos de tacón son uno de los complementos imprescindibles en el armario de la reina y, sobre todo, en su "dress code". Aunque Letizia opta por distintos tipos de zapato según el evento al que acude, la elección de los tacones es la preferida en la mayoría de ocasiones. La monarca adapta su vestuario al protocolo establecido en cada evento. "Los tacones siempre han sido una cuestión de moda y estética, sobre todo en el caso de la reina, que siempre ha tenido muy claro qué tipo de tacón debe llevar", explica la directora de la Escuela Internacional de Protocolo de Valencia, María Colomer. En sus palabras, "el manual de etiqueta recomienda que por la mañana no pueden superar los cinco centímetros y la altura va creciendo según pasa el día".

Sin embargo, explica que, en el caso de Letizia, "por salud le pidieron que bajara la altura, pero no lo ha hecho en la medida correcta". Por eso, la monarca tuvo que romper con todos los protocolos y aparecer sentada durante la recepción en Países Bajos. "Es natural que se tuviera que sentar, tenemos que tener en cuenta que la salud siempre va por delante de la etiqueta y, por lo tanto, dentro de los protocolos también hay excepciones", concluye Colomer.