ÚLTIMO BORRADOR

La negociación de Glasgow se atraganta con los combustibles fósiles

En la recta final de las negociaciones, el texto final de la Cumbre del Clima refuerza algunas peticiones y matiza el lenguaje sobre otras | El documento pide a los países ricos que doblen su aportación a los fondos de adaptación climática para el sur global

Dos activistas en una protesta llevada a cabo ante el recinto donde se celebra la Cumbre del Clima de Glasgow, este viernes.

Dos activistas en una protesta llevada a cabo ante el recinto donde se celebra la Cumbre del Clima de Glasgow, este viernes. / EP

Valentina Raffio

Arranca la cuenta atrás para el final de la Cumbre del Clima de Glasgow. Tras la enésima noche de negociaciones que se alargan hasta la madrugada, este viernes a primera hora se ha publicado el último borrador de unos acuerdos clave para el futuro del planeta. El texto matiza el mensaje contra las fuentes de energía contaminantes y pide a los países "acelerar la eliminación progresiva de la energía de carbón y de los subsidios ineficientes para combustibles fósiles". Esta petición ya aparecía en el borrador del acuerdo publicado el miércoles, pero en la recta final de las negociaciones parece que el lenguaje ha cambiado. En la nueva versión del redactado, la mención a los combustibles fósiles queda un tanto diluida en un llamamiento más genérico sobre la necesidad de apostar por fuentes de energías limpias. Eso sí, es la primera vez que un texto de este tipo tacha los subsidios a los combustibles fósiles como 'ineficientes'. 

El último borrador de los acuerdos de Glasgow también refuerza el mensaje sobre la necesidad de acelerar la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. El texto, de hecho, recuerda que para limitar el aumento global de las temperaturas a un máximo de 1,5 grados de media se necesita cortar las emisiones al menos un 45% antes de 2030 y llegar a un cero neto para 2050. Dicho esto, el documento "invita a los países a considerar más acciones para reducir sus emisiones" antes de que acabe la década. Asimismo, el texto reclama a todos los gobiernos que todavía no hayan entregado sus planes actualizados sobre cómo logar este objetivo a hacerlo antes del año que viene.

Según refleja este último borrador, los países también acuerdan la creación de un organismo externo para monitorizar el despliegue de las políticas climáticas. Este nuevo programa, liderado por Naciones Unidos, presentará informes anuales sobre la evolución de los niveles de emisiones de cada país. El primer balance se publicará el año que viene, durante la siguiente edición de la Cumbre del Clima.

Es así como el texto final de la Cumbre de Glasgow va cogiendo forma a contrarreloj. En algunos puntos, el lenguaje se matiza. En otros se refuerza. "Todavía falta pulir muchos detalles, aunque la mayoría de ellos son meramente técnicos", apuntan fuentes cercanas a las negociaciones consultadas por este diario. La presidencia de la COP26 ha prometido que el acuerdo final se anunciará este viernes por la tarde, a partir de las seis. Pero dado que aun quedan varios flecos por cubrir, son muchos los que apuntan a que el debate se podría extender hasta el fin de semana. Por el momento, todo apunta a que la opción más probable es la segunda.