FORMACIÓN DEL ASTRO

La Luna revela su pasado: un viaje al secreto oculto del satélite

Gracias a un reciente estudio ahora se sabe que la Luna experimentó una transformación inesperada: literalmente, 'se volvió del revés'

El enorme cráter Herschel domina la luna Mimas de Saturno, dándole una apariencia similar a la de la Estrella de la Muerte. Nueva evidencia sugiere que un gran océano también podría esconderse debajo del hielo de este satélite.

El enorme cráter Herschel domina la luna Mimas de Saturno, dándole una apariencia similar a la de la Estrella de la Muerte. Nueva evidencia sugiere que un gran océano también podría esconderse debajo del hielo de este satélite. / Créditos: JPL-CALTECH/NASA, INSTITUTO DE CIENCIAS ESPACIALES.

Primero fue la carrera por la conquista de la Luna, luego, la necesidad de conocer y estudiar su 'cara oculta'. A lo largo de los años, el ser humano ha pasado de ver al gran satélite como una deidad asociada a las mareas, el amor o la fertilidad, a querer saber cual es el su origen o cómo acabó ligada a nuestro planeta. Gracias a un reciente estudio de la Universidad de Arizona, se ha podido dar repsuestas a una de estas incognitas: la creación del manto lunar.

Impresión artística de una pluma del manto activa que surge de las profundidades de Marte y empuja hacia Elysium Planitia, una llanura del norte del planeta.

Impresión artística de una pluma del manto activa que surge de las profundidades de Marte y empuja hacia Elysium Planitia, una llanura del norte del planeta. / ADRIEN BROQUET Y AUDREY LASBORDES

El estudio públicado en la revista Nature parte de un radiografía similar entre la Luna y la Tierra, es decir, nuestro satélite tiene un núcleo, un manto y una corteza, compuesto de una geología más simple pero curiosa. Según Jeff Andrews-Hanna, coautor del estudio la Luna experimentó una transformación inesperada: literalmente, "se volvió del revés". Pero, ¿cuál es el origen de este fenómeno?

Hasta el momento, todo lo que se sabía provenía del estudio y análisis de rocas extraidas en las misiones espaciales y estudios teóricos. En el nuevo estudio, se determinó que el manto lunar está compuesto por roca basaltica, sorprendentemente con altas concentraciones de titanio. Este material es más abundante en lo que se conoce como 'la cara visible', algo que llamó la atención a los científicos.

Remontandonos al origen, la teoría estándar de la formación de la corteza lunar dicta que rocas ricas en ilmenita (FeTiO3) se formaron a partir del océano de magma que cubría la Luna cuando se fusionó por primera vez a partir del material arrojado durante el gran impacto que provocó su formación. Númerosos estudios apuntan a la hipotesis de que este suceso fue resultado del choque entre un planeta pequeño contra la Tierra hace unos 4.500 millones de años.

La Luna del reves

Por otro lado, la teoría convencional sostiene que la formación de la corteza lunar se originó a partir de rocas ricas en ilmenita, que se hundieron en el manto lunar, desencadenando lo que se conoce como vuelco global del manto. Este proceso provocó una inversión en la disposición de las capas internas de la Luna, con el manto sobre la corteza. Los investigadores, liderados por Weigang Liang, han identificado evidencia geofísica de este evento trascendental, proporcionando una visión sin precedentes de la evolución lunar. La presencia de ilmenita debajo de la corteza lunar es coherente con las simulaciones realizadas, confirmando así la teoría del vuelco global del manto.

Este descubrimiento no solo arroja luz sobre la historia temprana de la Luna, sino que también revela su desequilibrio fundamental: "La Luna está fundamentalmente desequilibrada en todos los aspectos", comentó Andrews-Hanna. Y es que el lado más próximo de la Luna se caracteriza por presentar una elevación más baja, una corteza más delgada, extensos flujos de lava y una alta concentración de elementos, que contrastan sobremanera con cómo es el denominado 'lado oculto de la Luna'.

En definitiva, este estudio representa un hito en nuestra comprensión del pasado lunar, demostrando que, incluso después de milenios de observación, la Luna aún guarda secretos por descubrir bajo su superficie. Con cada nuevo hallazgo, nos acercamos más a desentrañar los misterios de nuestro vecino celestial y su asombrosa historia de transformación.