Estos son los trucos para no volver a planchar nunca más

Hacer la colada a veces es una de las tareas domésticas más tediosas. Para alargar la vida útil de nuestra ropa es importante cuidar cómo y con qué la lavamos, además de hacerlo del modo más delicado posible. Una vez que las prendas están limpias y secas para lucir perfectas, toca una de las 'penitencias' del primer mundo: planchar para acabar con las arrugas. Pero, ¿por qué aparecen arrugas en la ropa?

Por lo general, este problema sucede cuando lavamos a una temperatura que no es la adecuada, no usamos suavizante o las tendemos sin haber alisado las prendas. Para hacer el trago más llevadero y, al mismo tiempo, cuidar tu ropa debes tener en cuenta una serie de consejos. El primero es tener cuenta que existe un momento clave para facilitar la tarea de pasar la plancha: el de sacarla de la lavadora: el de sacarla de la lavadora.

Cuando sacas la ropa tienes que darle un par de “golpes” en el aire. Estirarla todo lo que puedas a la hora de tenderla y sacudirla bien va a hacer que tus prendas estén mucho menos arrugadas. También te puede facilitar el planchado poner un foco de calor más o menos cerca de la ropa. Si, por ejemplo, tiendes la camisa en el baño durante la ducha previa a irte de casa, vas a conseguir que se reduzcan las arrugas.

Sin embargo, hay ocasiones, especialmente con determinados tipos de prendas, que por mucho cuidado que tengamos a la hora de sacar la ropa de la lavadora y tenderla, las arrugas hacen su aparición igualmente. Si te pasa esto, pero no tienes tiempo para ponerte a planchar, no te preocupes porque existen algunos trucos caseros que pueden salvarte en estos momentos.

Cómo alisar la ropa sin tener que planchar

Hay varias formas de eliminar el exceso de arrugas de la ropa sin necesidad de planchar. Aquí te presentamos algunas opciones:

1. Utilizar un secador de pelo: coloca la prenda en una percha y utiliza el secador de pelo en la configuración de calor medio o bajo para soplar aire caliente en la prenda mientras la estiras suavemente con las manos.
2. Colgar la ropa en la ducha: si estás en una habitación de hotel o en una casa de alquiler, cuelga la prenda en el baño mientras tomas una ducha caliente. El vapor ayudará a suavizar las arrugas.
3. Utilizar una plancha de vapor: una plancha de vapor es una buena alternativa si no quieres planchar, pero necesitas suavizar las arrugas de una prenda. El vapor penetra en las fibras de la tela y las suaviza, sin necesidad de presionar la plancha sobre la prenda.
4. Usar una toalla húmeda: humedece una toalla limpia y colócala sobre la prenda arrugada. Utiliza una plancha de vapor o un secador de pelo para soplar aire caliente sobre la toalla. El vapor creado por la toalla húmeda ayudará a suavizar las arrugas.
5. Emplear una botella de spray: llena una botella de spray con agua y rocía la prenda con una niebla fina. Estira suavemente la prenda con las manos y déjala secar al aire libre. Las arrugas se suavizarán a medida que la prenda se seque. Si, además, le añades un poco de suavizante y vinagre blanco a la mezcla, el resultado será aún mucho mejor.

Eso sí, hay que tener en cuenta que estas técnicas son útiles para eliminar arrugas ligeras o moderadas, pero si tienes una prenda muy arrugada, lo mejor será utilizar una plancha.