COMUNIDAD DE MADRID

Un proyecto sobre acentos y 'Yo estudié en Madrid': las bazas del director de la Oficina del Español en su primer examen

Ramiro Villapadierna comparece el próximo miércoles en la Asamblea de Madrid para hacer balance de sus tres meses en el cargo y explicar la participación de la Oficina en el Congreso de la Lengua Española que se celebra en Cádiz

Presentará también las ideas principales de un proyecto para generar un sentimiento de pertenencia entre los estudiantes extranjeros en Madrid

Ramiro Villapadierna

Ramiro Villapadierna / CAM

Elena Marín

Elena Marín

A diferencia de lo que ocurría con su antecesor, a Ramiro Villapadierna poca gente le pone cara. Tampoco le ubican en su actividad profesional actual fuera de su ámbito más cercano. El interés por su agenda no tiene nada que ver con el que generaba la de Toni Cantó cuando estaba al frente de la Oficina del Español. Villapadierna heredó el cargo el 14 de diciembre de 2022, tras tres meses de vacío, y este miércoles pasará examen en la Asamblea de Madrid, en la que comparecerá para explicar los proyectos tangibles en los que trabaja.

Lo tangible, defiende él, es lo que se puede ver o presupuestar, pero reconoce que en la Oficina del Español, igual que en el Instituto Cervantes, para cuyas sedes de Frankfurt y Praga ha sido director en el pasado, hay mucho más de intangibles. El español y lo latino, sostienen en este departamento de la Consejería de Cultura, están de moda, y los ejemplos para justificar esta afirmación los encuentra Villapadierna en la música actual: la canción que Shakira dedicó a su ex Gerard Piqué fue lo más escuchado en Spotify durante 48 horas a nivel mundial, un éxito similar al del portorriqueño Bad Bunny en los Grammy de este año. Uno y otro, ha dicho el director de esta Oficina en las últimas semanas, han "hecho más por el español que el Cervantes".

Madrid tiene que ser capaz de canalizar lo que trae esta ola latina para que perdure en el tiempo, no se pierda y, sobre todo, no se difumine entre tantas capitales de habla hispana. A eso, grosso modo, se dedica esta Oficina que sigue siendo casi unipersonal: la conforman el propio Villapadierna y un asesor.

Cita en Cádiz

Precisamente esa lengua común y sus distintas formas son uno de los ámbitos en los que Villapadierna quiere incidir en las próximas semanas. El próximo miércoles asiste a la Comisión de Cultura de la Asamblea de Madrid para explicar que uno de los proyectos que dejará como legado será la participación de la Oficina del Español en el Congreso Internacional de la Lengua Española (CILE), que se celebrará en Cádiz entre el 27 y el 30 de marzo. La iniciativa consistirá en profundizar en los distintos acentos del español.

Qué valor o repercusión puede tener esta iniciativa del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso está aún por ver, pero Villapadierna la defiende, en conversación con EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, como algo divulgativo y académico (la propuesta, asegura, está trabajada con el apoyo del exdirector de la RAE José Manuel Blecua). El objetivo es reflexionar sobre la ausencia de clasismo en la lengua española (tan correcto es el que hablan en Buenos Aires, La Habana, Madrid o Córdoba, apunta, sin un español tipo que se enseñe en los colegios o se difunda por la televisión) y que esto sirva para posicionar Madrid como un lugar de encuentro donde caben todos esos acentos. Acentos que se traducen en futuros productores de música, cine, artistas, profesionales o estudiantes. Un intangible que con el tiempo podría convertirse en algo tangible, viene a decir.

Página web

Su departamento sigue sin tener una asignación presupuestaria que le permita desarrollar grandes proyectos (aunque se le faciliten para iniciativas como el Festival de la Hispanidad), así que su trabajo, sostiene Villapadierna, es dar forma a ideas que otros puedan poner en marcha y sufragar, pero a ser posible, bajo el paraguas de la Oficina del Español. Uno de estos proyectos que también detallará en la Asamblea es el portal "Yo estudié en Madrid". Una página web para un proyecto aspiracional.

¿Para qué? El heredero de Toni Cantó explica que en España la red de antiguos alumnos de las universidades o centros de estudios tiene menos arraigo que en otros países. Los estudiantes de la Sorbona francesa, señala, se autodefinen como tales el resto de su vida, al igual que los de las grandes universidades americanas o británicas. El objetivo, a compartir con empresas y centros especializados en atraer a Madrid a estudiantes extranjeros que lleguen aquí para aprender español u otros estudios (los hispanoamericanos), es crear un sentimiento de pertenencia a la región, que queden "vinculados" a Madrid de alguna manera, y que sirva para que estos futuros profesionales ejerzan de prescriptores o embajadores de Madrid.

Con la formación y currículum del nuevo director de la Oficina del Español, Ayuso quiso terminar con aquella idea del chiringuito que el propio Cantó asentó con sus declaraciones ("el chiringuito soy yo") y su escasa agenda pública en un momento en el que las competencias de su área estaban muy poco definidas. Tras su salida, las competencias de este departamento continúan siendo las mismas, según la información que publica la Consejería de Cultura (entre otros, promoción de la Comunidad de Madrid como capital europea del español; interlocución con instituciones públicas y privadas para impulsar las oportunidades económicas del español; y promoción, realización y gestión de informes, estudios, jornadas y encuentros que fomenten el debate en torno a la potencialidad cultural, económica y social del español) por lo que el nuevo director tendrá que esforzarse por demostrar a los diputados de la oposición que el cambio de perfil implica también un cambio en la ejecución de esas funciones si quiere salir airoso de su próximo examen parlamentario.