Guerra en Ucrania

Las hijas de Putin, el secreto mejor guardado del exespía

Por seguridad y para preservar la confidencialidad de los negocios de estas mujeres ambas han cambiado su nombre

Vladimir Putin, presidente de Rusia.

Vladimir Putin, presidente de Rusia. / EFE/EPA/MIKHAIL KLIMENTYEV

F. Pascual

Como exespía del Comité para la Seguridad de Estado ruso, o KGB, al actual presidente de Rusia, Vladímir Putin, se le presuponen ciertas habilidades para ser capaz de aguantar la presión, pasar completamente desapercibido y ocultar o mentir acerca de cualquier información sobre sí mismo. Si le sumamos estas pericias al inquebrantable nivel de seguridad que rodea al mandatario soviético conocer un ápice de su vida personal es casi imposible. Lo único que el Kremlin ha permitido que se haga público es que Putin tiene dos hijas, dos nietos y una pareja que llegó a su vida después de que se separara de su primera mujer tras 30 años de matrimonio. La identidad de su nueva novia es como casi todo, un misterio.

Se dice que esta reserva acerca de la vida de la familia Putin se debe además de a la lógica seguridad, a evitar el control de los negocios de las descendientes y sus parejas.

Quiénes son las hijas de Putin

Las dos hijas de Putin reconocidas ante el público son fruto del matrimonio del presidente ruso con Lyudmila Putina, con quien se casó en el año 1983.

De esta unión nacieron dos chicas, María -nacida en San Petersburgo en 1985- y Katia (Yekaterina) -Dresde, 1986-. Muy poco se sabe de ellas, de hecho se dice que han cambiado de apellido para preservar su identidad. En un gesto muy extraño, el propio Putin dio a conocer un detalle sobre una de las mujeres: fue que en plena explosión de la pandemia de coronavirus, una de sus hijas se había presentado voluntaria para probar la vacuna Sputnik V desarrollada por los laboratorios rusos. Este aseguró que la joven solo había experimentado algo de fiebre. Eso sí, no se sabe cuál de las dos fue.

La hija mayor de Putin, María, es médica endocrina y según las últimas informaciones vive en un ático en Moscú junto a su marido holandés, el empresario Jorrit Faasen, con quien tiene dos hijos. Hace unos años, la prensa la ubicaba en los Países Bajos, después de que las autoridades neerlandesas pidieran expulsar del país a María Putina por la supuesta implicación de su padre, el presidente en la catástrofe del Boeing 777 de Malaysia Airlines.

Por su parte, la hija pequeña, Katya es científica y bailarina de rock acrobático. De esta joven se sabe aún menos que de la hermana mayor, solo que también estudió en la Universidad de Moscú.