LA NUEVA ESPAÑA

Un error judicial deja impunes a ocho 'ángeles del infierno' de Asturias tras una operación policial contra ellos

Un Juzgado de Siero no tomó declaración a los detenidos y caducó la instrucción

Claudiu Bogdan Fluierasi, 'Machete', uno de los líderes del grupo.

Claudiu Bogdan Fluierasi, 'Machete', uno de los líderes del grupo. / GUARDIA CIVIL

Fiasco en el juicio a los miembros de la banda motera de los Ángeles del Infierno que traficaban con marihuana y hachís desde Noreña y Oviedo. Ocho de los acusados han tenido que ser absueltos por la Audiencia Nacional debido a un flagrante error judicial. Un Juzgado de Siero tendría que haberles tomado declaración, en noviembre de 2016, cuando fueron detenidos y se realizaron diversos registros en una gran operación de la Guardia Civil. Pero es que luego se dejó caducar la instrucción en julio de 2018 –justo cuando Audiencia de Asturias decretaba que el caso pasase a la Audiencia Nacional–, de forma que, cuando se les tomó declaración en 2019 por el Juzgado Central de Instrucción número 4, ya no podían realizarse más diligencias de investigación.

De no haber ocurrido este error, posiblemente habrían sido condenados. Sin embargo, al no haber declarado se vulneró su derecho a la defensa, por lo que se declaran nulas sus declaraciones y se les absuelve.

En cuanto al resto de los acusados, uno falleció, y a los otros ocho les han impuesto penas de hasta cinco años, sumando un total de 26 años y 10 meses de cárcel, e indemnizaciones de casi 160.000 euros. Unas cifras que se quedan muy pequeñas respecto a las pretensiones iniciales de la Fiscalía, que pedía penas que sumaban 159 años de cárcel e indemnizaciones por importe de 1,6 millones de euros.

El juicio gravitaba en torno a dos grupos. Uno de ellos, que actuaba en el País Vasco y Cantabria, e investigado por la Comisaría de Bilbao, tenía cinco plantaciones de marihuana en viviendas unifamiliares de Castro Urdiales. Los agentes encontraron en ellas 34,2 kilos de esta planta. Uno de los implicados en este primer grupo tenía relación con miembros del capítulo Hamc Northside de los Ángeles del Infierno (Hells Angels) que estaban instalados en La Felguera de Noreña y en Oviedo. A este grupo, que pretendía hacerse con el tráfico de marihuana y hachís de Asturias, Cantabria y Galicia, se le encontró en poder de 7,4 kilos de hachís y marihuana, y 5,5 kilos de resina de hachís.

Dos kilos en bellotas de hachís fueron interceptados en Navia cuando uno de los ahora condenados viajaba hacia La Coruña por la Autovía del Cantábrico. En Cardeo (Morcín), se encontraron seis kilos de marihuana. En el Club House de los Ángeles del Infierno de La Felguera de Noreña no se encontró droga, pero sí material para montar laboratorios interiores de marihuana. En la casa de Machete, en Oviedo, se hallaron 1,1 kilos de marihuana y casi medio kilo de hachís, amén de una nutrida panoplia de armas ilegales, como catanas, puños americanos, porras extensibles. En un trastero de la calle La Tenderina de Oviedo se hallaron otras 98 bellotas de hachís, con un peso de unos 200 gramos. A otro de los implicados se le encontró en la calle Trapones de Oviedo otros dos kilos de hachís y 30.000 euros.

Los cuatro principales implicados, Manuel Alfonso Sánchez Aguiar, Claudiu Radu Fluierasi, Javier Alonso Cebrián e Israel Díaz Cano reciben condenas de cinco años cada uno. La sección segunda de la Sala Penal de la Audiencia Nacional considera además que concurre la atenuante de dilaciones indebidas. Los acusados pidieron atenuantes por confesión y drogadicción, pero fueron rechazadas. Ninguno de ellos pudo demostrar que actuase impelido por la dependencia de las drogas. También se acuerda una indemnización de 22.000 euros para Iberdrola por los pinchazos a la red para mantener los laboratorios. Los acusados han sido defendidos por los letrados Beatriz Díaz Fernández, José Ignacio Botas, Benito González, Víctor Ignacio Hernando y Francisco Pérez Platas.