ACTOR DE 'ELEFANTE'

Jason Fernández: "Alguien me dijo: '¿Cómo haces el corto de Almodóvar, que es de gays?'"

El actor de la serie 'Alba' ahora participa en el corto 'Elefante', que se estrenó el Día del Orgullo y se puede ver bajo demanda en Cosmo. Con él se quiere concienciar sobre el acoso laboral que sufre el colectivo LGTBI+

El actor Jason Fernández.

El actor Jason Fernández.

Empezó con 7 años en la interpretación y poco a poco fue descubriendo que con esa profesión aprendía mucho y tomaba conciencia de cosas como el machismo. Como le pasó con su papel en Alba. Ahora participa en el corto de Cosmo Elefante, que se estrenó el miércoles, Día del Orgullo, con el que se quiere concienciar sobre el acoso laboral que sufre el colectivo. Jason Fernández (Madrid, 1994), que tiene una cabeza bien amueblada y la mente abierta lo tiene claro. Pero lamenta que se cuestionara su orientación sexual por cómo vistió en Cannes o que se asombraran de que no le diera asco besarse con un chico en el corto Extraña forma de vida, de Pedro Almodóvar, sin ser gay. Él no puede cambiarlo, dice, pero el cine y el arte, sí.

P. Cuando le propusieron el corto le gustó por ser algo diferente.

R. El personaje es muy ajeno a mí. Es un chico introvertido, bastante tímido que a nivel social solo se suelta si está rodeado de gente con el que se siente cómodo. Se aleja un poco de lo que he hecho y del estereotipo en el que podría entrar. Y, obviamente, la historia que cuenta toca temas polémicos y sociales: el acoso laboral y el acoso por tu orientación sexual. En esta profesión aprendes tantas cosas... Es como una conciencia interior de aspectos que tú pensabas que no pasaban, como, en el caso de la serie Alba, con el machismo. Porque hay un montón de micromachismos a tu alrededor. Con este corto se aprende muchísimo. A ver si conseguimos concienciar.

P. ¿Le apetecía formar parte del compromiso de Cosmo con el Día del Orgullo?

R. Lo estrenamos en un momento clave, pero no tratamos de llegar al colectivo, porque este ya está concienciado, sino a esa población con, digamos, mente cerrada que no comparte que se pueda querer a alguien sin importar sea hombre o mujer. Y este corto no es invasivo, porque no usa los típicos estereotipos de la persona gay es así y lleva un bolso rosa y las lesbianas se rapan. Elefante entra en la vida de una persona real y habla de que da igual la ropa que lleves, cómo andes, cómo hables... A mí me han cuestionado mucho mi orientación sexual por la vestimenta que llevaba en el festival de Cannes, y eso no tiene nada que ver.

P. Lo peor es que los acosadores no son monstruos: sino personas normales. Microhomofóbicos.

R. Justo. Y es a lo que hay que darle voz. En el caso de Alba una violación es una cosa gordísima. Pero para llegar a la violación hay un montón de micromachismos que hay que frenar. En la homofobia, eso de "es igual que seas gay o no, pero mantente calladito", eso ya es una agresión hacia tu orientación. O lo de "yo conozco a un gay y hablo con él". En el mundo del arte tenemos una mente más avanzada, quiero pensar. Es que no hay cosa más bonita que amar y a mí qué me importa si amas a un chico o a una chica. No influye en mi vida. Qué molesta, es que no te va a afectar a ti en nada, no está invadiendo tu mundo. Eso es algo tan arcaico... Y hace años éramos más abiertos.

P. Nadie habla del elefante que hay en la habitación. El 72% de las personas LGTBI+ no sale del armario en el trabajo por miedo a las burlas o a perderlo. Y el resto callamos. ¿Somos cobardes?

R. El personaje más cobarde del corto, el mío, acaba intentado romper el silencio. Pero no vale con que Jaime hable. Tienen que haber muchos más para frenar al acosador. Si no riéramos sus gracias ni les apoyáramos, esas personas se empezarían a cuestionar sus actos. Jaime se ríe, pero por la presión social. Hace poco estaba estaba en un coche con una persona al volante y me dijo: "¿Cómo haces el corto de Almodóvar, que es de gays?". ¡Qué asco besarse con un chico! ¿Tenéis que ser gays o algo? ¡Qué le digo a esa persona en un entorno cerrado! Al final: "Esa es mi profesión". Yo no puedo cambiar la perspectiva, pero el cine y el arte sí que tienen ese poder, porque te tocan por dentro.

P. Aunque el mundo de la interpretación sea más abierto ¿ha vivido acoso?

R. Yo llevo en este mundo muchísimo tiempo y te das cuenta de que es una profesión que requiere mucha formación, pero en la que te tratan como un objeto. Delante de ti dicen: este no me encaja porque no es muy guapo o anda raro. Y debes hacer oídos sordos. Pero hay machismo. No muchísimo, pero sí he visto cómo una de las actrices tiene que ponerse cierta vestimenta y le dicen: "¡Jo, cómo estás!". Además, en el mundo actoral los jóvenes somos gente muy alegre, cariñosa, abierta, porque estamos ilusionados, y eso se confunde. Compañeras mías lo han sufrido. Y lo triste es que hay que callarse la boca. Elefante habla de eso: mejor no digo mi orientación sexual, doy gracias de que estoy en el despacho de abogados, hago mi trabajo y me voy a mi casita.

Jason Fernández y Javier Pereira, en el corto de Cosmos 'Elefante'.

Jason Fernández y Javier Pereira, en el corto de Cosmos 'Elefante'. / COSMOS

P. Usted empezó muy joven, pero ha habido un antes y un después de Libertad.

R. Yo soy actor desde los 7 años en una compañía de teatro en Inglaterra, y a los 8 y medio Kuranda nos fichó a mí y a mi hermano e hice mi primera película: El corazón de la tierra. Me fui a Londres a formarme y abrirme paso ahí, y llegó Libertad, con Enrique Urbizu, lo que me volvió a dar la vida. Urbizu ha sido para mí como Epicteto para Marco Aurelio: la persona que me ha introducido a lo que es la vida. A nivel profesional aprendí una barbaridad, pero a nivel personal me dio un libro, El manual de vida de Epicteto, en cuya primera página ponía. “Primero descubre lo que quieres ser y luego haz lo que tengas que hacer”. 

P. Y ahora es un chico Almodóvar con Extraña forma de vida.

R. Eso es un sueño. Me llegó un casting. Pasé la primera fase y me llegan 17 páginas de separata y no sabía quien era el director. Y luego te llaman y te enteras que era... ¡Pedro Almodóvar! Y te cuentan que están Pedro Pascal y Ethan Hawke. Pero no acaba. Dejas de volar y apareces en la alfombra roja al lado de gente a la que admiras. Y encajando. Eso es lo que más me fascinó. No sentirme un invasor. Me sentía parte de un mundo al que siempre he admirado de la mano de un director al que toda España admira y dos actores impresionantes; al lado de esos tres chicos maravillosos y de la mano de Yves Saint Laurent. Y no he parado. Ahora estrenamos una comedia, Matusalén, y a la espera de ver el camino prometedor que tenemos.

Esta profesión te enseña que como no controles la cabeza estás perdido. Puedes ser el mejor actor del mundo, pero tienes que ester muy centrado. Me lo enseñó Urbizu. Él me ha dado la clave de la vida: la naturaleza y controlar la cabeza. Eso y poco más.

Las risitas cómplices del acoso

Cosmo estrenó Elefante el Día del Orgullo, aunque pretende concienciar al resto de la población. Porque en sus 15 minutos, esta pieza producida por la plataforma junto con Lasdelcine (Cristina y María José Martín) y Apoyo Positivo, explica mucho: cómo una persona gay debe esconder su orientación sexual para no sufrir acoso en el trabajo. Es lo que le pasa a Mario (Javier Pereira), un brillante abogado que entra a trabajar en un bufete donde se reencuentra, 20 años después, con un amigo de la infancia, Jaime (Jason Fernández), que le admiraba. Y que ve cómo sufre y él no sabe frenar esas risitas cómplices del acoso.