SALUD DE LA MUJER
¿Qué es el lipedema? La enfermedad de la "grasa enferma" que solo afecta a las mujeres
Vivir con lipedema, la enfermedad de las mujeres que solo engordan: "Me sentí liberada al saber por qué ganaba tantos kilos"
Las piernas de una afectada por lipedema / Alba Vigaray
El lipedema es una enfermedad crónica del tejido adiposo. Su diagnóstico clínico puede ser "desorden del tejido adiposo" o "desorden del metabolismo lípidico". Su particularidad es que la grasa -los médicos la llaman "grasa enferma"- que se acumula no es como la normal, por lo que no se puede eliminar ni con dieta, ni con ejercicio. Tiende a acumularse de forma simétrica en ambas piernas -a veces también en brazos- y deja intactas manos y pies.
Las afectadas suelen presentar siluetas descompensadas en las que las extremidades inferiores son más gruesas que el resto del cuerpo. En muchas ocasiones, no existe diferencia entre tobillo, rodilla y muslo. El engrosamiento más evidente o típico se da en las pantorrillas: la acumulación de grasa llega hasta el tobillo, donde se para, formando un anillo o dando el aspecto de un pantalón bombacho. Sin embargo, el engrosamiento de los miembros puede desarrollarse de múltiples formas.
Ganar peso constante
El lipedema no es obesidad, aunque suele mal diagnosticarse de esta manera. Eso sí, la obesidad sí puede aparecer en estadios más avanzados. El gran problema es que las afectadas tienen tendencia a ganar peso sin explicación y enorme dificultad para perderlo en las zonas más afectadas, que varían poco o nada a pesar del esfuerzo.
Además, se suele padecer sensación de pesadez, fragilidad capilar, lo cual facilita la formación frecuente de hematomas de manera espontánea o ante mínimos traumatismos, así como una hipersensibilidad al dolor (una leve presión sobre el tejido se convierte en dolorosa), por lo que también es llamado "síndrome de grasa dolorosa".
Tratamientos
La progresión del lipedema es variable, ni aparece en el mismo momento, ni todas las afectadas evolucionan de la misma forma ni al mismo estadio, y tampoco se responde siempre igual al mismo tratamiento. No se puede saber de antemano como se va a evolucionar. Los objetivos principales del tratamiento, explican las asociaciones de afectadas, son minimizar el dolo, detener o incluso revertir la evolución, prevenir el linfedema secundaria y mantener o mejorar la movilidad
Dentro de los tratamientos están los conservadores, como las medias de compresión, drenaje linfático manual (DLM) y la terapia descongestiva; y el quirúrgico que consiste en una liposucción con técnicas específicas para el lipedema.
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