Mónica García, nueva ministra de Sanidad: "Mi máxima prioridad es trabajar escuchando"

Lleno total en el salón de actos Ernest Lluch del Ministerio en el acto de entrega de la cartera ministerial por parte de José Manuel Miñones a Mónica García como nueva titular de Sanidad del Gobierno. La exportavoz de Más Madrid en la Asamblea de Madrid ha estado arropada por la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo Yolanda Díaz, y por Teresa Ribera, vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica.

La ministra ha sido recibida con una enorme ovación y ha reiterado el que ya es su principal 'grito de guerra'. "¡Viva la sanidad pública!", reivindicó Mónica García, que avanzó que la salud mental, la Atención Primaria o el cuidado de los profesionales y los pacientes estarán en el centro de su mandato.

El traspaso de cartera se convirtió en un acto muy emotivo en el que el ya exministro Miñones recordó sus casi ocho meses en un departamento al que dedicó cariñosas palabras. Se dirigió a Mónica García a la que, dijo, asume un "reto enorme, con una responsabilidad inmensa, pero tienes una oportunidad única".

Los retos principales

La ya nueva ministra respondió con el mismo afecto y desglosó los principales retos del mandado que ahora inicia. Un gran pacto por la salud mental, atención a la salud visual, a la bucodental, refuerzo de la Atención Primaria y una sanidad muy centrada en atender los determinantes sociales de salud.

"Mi máxima prioridad es trabajar escuchando", señaló García en el salón bautizado con el nombre del ex ministro de Sanidad socialista Ernest Lluch, en el 23 aniversario de su asesinato por la banda terrorista. Un salón que se quedó pequeño para acoger a los invitados al acto, que arrancó pasadas las 12.30 del mediodía. Tanto que fueron muchos quienes tuvieron que quedarse de pie y ocupar cualquier hueco disponible en el amplio espacio ubicado en la primera planta del edificio. Ante ellos, la ministra reiteró su principal objetivo: defender y mejorar esa sanidad pública que a tantos retos se enfrenta.

El acto contó con la presencia de numerosos representantes de la administración sanitaria como Chus Lamas, directora de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios o personalidades del sector, como el presidente del Consejo General de Enfermería, Florentino Pérez-Raya; o el presidente del grupo HM Hospitales, el doctor Juan Abarca.

Defensa de la sanidad pública

La defensa de la sanidad pública centró el emocionado discurso de García. Lo dijo el mismo lunes, el día de un nombramiento que ya sonaba con fuerza desde hace días y adelantó EL PERIÓDICO DE ESPAÑA. "La sanidad pública es un orgullo de nuestro país. Voy a poner alma, corazón y cerebro para defenderla desde el Ministerio", avanzaba la nueva titular del departamento que siempre se ha destacado por su defensa a pie de calle del sistema sanitario.

"A raíz de los años de recortes que pusieron el negocio por delante de la salud y después de los embistes de la pandemia, nuestro sistema sanitario ha quedado tocado y el espíritu con el que nació se encuentra en sus horas más bajas", admitía Mónica García en su primera intervención pública este mismo lunes, a través de un post en X (antes Twitter).

Los retos del sistema

Con la sanidad pública volviendo a alcanzar su máximo histórico de pacientes en lista de espera para una intervención quirúrgica no urgente en el conjunto del Sistema Nacional de Salud -con un total de 819.964 personas- y un tiempo medio de demora de 112 días, según los datos a 30 de junio de 2023 publicados este mismo lunes por el Ministerio de Sanidad, la recién estrenada titular del departamento aludió a los varios problemas a atajar. "Mi máxima prioridad es trabajar escuchando", aseguró.

Habló de esa sanidad pública como la "joya de la corona de nuestro estado de bienestar" y marcó una fecha, el 2012, en la que "con los recortes comenzó una década perdida". Los tres años de pandemia, abundó, solo contribuyeron a "agrandar las dietas de años anteriores". Los retos de 2023 pasan por gestionar una sanidad muy marcada por los determinantes de salud, añadió, como el cambio climático, las desigualdades sociales, el acceso a una vivienda digna, un buen salario "o tener tiempo para vivir mejor porque esto impacta en la salud de todos".

Avanzó, también, que trabajará de mano de la ciencia y que existen una serie de pactos "urgentes y necesarios", por ejemplo por la salud mental "para que la vida duela menos" o por la Atención Primaria, "el mayor emblema sanitario". Además, auguró, su propósito pasa por "blindar" la sanidad pública y cuidar a los profesionales y los pacientes, que deben estar en el centro de las políticas sanitarias. La prestación de la salud visual, bucodental o Atención Temprana, serán otras prioridades, dijo la ministra.

El ministro saliente

José Miñones llevaba en el cargo desde el pasado mes de marzo, cuando dejó su puesto como delegado del Gobierno en Galicia para sustituir a Carolina Darias. Bajo su mandato se impulsó un Real Decreto que ponía fin a la emergencia sanitaria por la pandemia de covid eliminando la obligatoriedad de mascarillas en centros sanitarios y sociosanitarios. También impulsó el olvido oncológico para supervivientes de cáncer y ha dado continuidad al Plan de Atención de Salud Mental 2022-2024, uno de los apartados que seguirá siendo prioritario para el Gobierno.

Durante el tiempo en el que ha estado al frente de Sanidad, Miñones acordó aumentar las plazas en Formación Sanitaria Especializada (FSE) en un 4%, convocando un total de 429 nuevas plazas. En abril se aprobó la distribución territorial de más de 579,1 millones de euros para la mejora de infraestructuras de Atención Primaria y hace apenas unos días, una nueva transferencia de 68 millones de euros a las comunidades autónomas y Ceuta y Melilla que irá destinada al Plan de Salud Bucodental, que Mónica García también ha puesto en el epicentro de su política sanitaria.