El juez del 'caso Villarejo' cita el 25 de abril a tres investigados por "presionar" al exabogado de Bárcenas

El juez Manuel García Castellón ha citado el 25 de abril como investigados al abogado José Luis Moreno Cela, la exclienta de este último Mónica Gil Manzano y al empresario Juan Ramón Díaz Moro, quienes según la Fiscalía Anticorrupción recibieron un encargo de personas "vinculadas al PP" para "presionar" al extesorero de la formación conservadora Luis Bárcenas y a su abogado, el exjuez Javier Gómez de Liaño.

Esta intimidación, que se habría producido en 2013 y 2014, tenía como finalidad "evitar la publicación de informaciones comprometedoras para el Partido Popular", según se desprende de cuatro grabaciones que fueron descubiertas por la Policía en un registro en Marbella, especifica un auto de 1 de febrero en el que la Audiencia Nacional ordenaba la reapertura de la pieza separada número 36 del caso Tándem o Villarejo, que había sido archivada.

"Conexión política"

Anticorrupción considera que las mencionadas grabaciones son pruebas relevantes de la "conexión política" de la trama policial Kitchen con el Partido Popular. En las conversaciones se alude, en concreto, a la intención de conseguir de un preso ruso información que se pudiera utilizar contra el exjuez Gómez de Liaño, que en esos momentos lideraba la estrategia de Bárcenas de tirar de la manta y reconocer la existencia de una caja en el PP nacional.

El contenido de tres correos electrónicos incluidos en la denominada Operación Prima, publicados por este periódico, apuntan a que en los hechos también habría participado un abogado que no está imputado en la Audiencia Nacional.

"Todos los pagos"

En uno de los mensajes, dirigidos al mencionado letrado, que fue detenido, Villarejo le hace un encargo: "Interesa de K. Todos los datos de los pagos en el extranjero que le hizo a G. de L. Todos los pagos que les hizo a miembros del CNP, GC y otros. Otros pagos a políticos". Según fuentes de la causa, al escribir "K" se refieren al condenado rusogeorgiano Zakhar Kalashov; y al redactar "G. de L" a Gómez de Liaño. En las agendas de Villarejo también se alude la posible existencia de una grabación en la que un comisario de Policía recibe una mordida.

En las conversaciones grabadas, según la transcripción de las mismas encargada por la Fiscalía Anticorrupción, se llega a decir, de forma literal: "Si Kalashov dice cómo ha cobrado eso, se le puede levantar un tema de delito fiscal y de blanqueo de capitales”. Otros audios, incluidos en el sumario del caso Kitchen, también evidencian que Villarejo informó a sus superiores de que había participado en las presiones contra Gómez de Liaño.