Opinión | EL CUERPO EN GUERRA

¡Estamos de feria!

El amor por los libros nos hace mejores

Imagen de archivo de libros

Imagen de archivo de libros / PIXABAY / KOLLINGER

Parece mentira que haya pasado un año, que nos hayan pasado 366 días por encima, y el bulevar luzca de nuevo repleto de casetas, mientras los visitantes a la 49º Feria del Libro de Córdoba siguen entonando el son de cada año: "'Libros, libros; futuro, futuro!", una variación de aquella cancioncilla tan pegadiza de Bart Simpson. Preparad vuestros bolsos y vuestros ahorros y corred al bulevar, arrasad con todos los libros que seáis capaces de cargar, que jamás podréis beneficiaros de un descuento tan suculento como el de estos días. Y tendréis todo el año para aprovechar las lecturas que cacéis.

Además, si leéis el periódico de buena mañana este sábado, llegaréis a tiempo a la presentación de ‘Poetas en espiral’, el primer ensayo-antología que aborda la Generación del 2000 (por llamarla de alguna manera), de los que aprendí casi todo lo que sé y que me acogieron como una más: Pablo García Casado, Joaquín Pérez Azaústre, José Daniel García, Rafael Espejo... Todos ellos amigos muy queridos y poetas brillantes.

De hecho, hace justo un año, Dani, Joaquín, José Luis y yo (además de María González, poeta de mi generación), estrenábamos títulos que no han dejado de darnos alegrías: Joaquín con su ‘El querido hermano’ (Galaxia Gutenberg, 2023), que va ya por su ¡cuarta edición!, acaba de ganar el Premio Andalucía de la Crítica; José Luis ha despertado con ‘El dorado’ (Visor, 2023) la atención de todos los críticos del país con la que él mismo cataloga como su obra culmen (y bien merecía el Premio Andalucía de la Crítica en Poesía -sí, ya lo he dicho–)... Y allí estaba ‘La cierva implacable’ (Cántico, 2023) de estreno. Gracias a todos los que me arropasteis y a los que aún hoy seguís cuidando de esta cierva que corre libre entre dehesas de encinas y grandes avenidas.

Este año la Feria se celebra con autores como Mario Cuenca Sandoval, Rodrigo Fresán, José Ovejero, Vicente Luis Mora, Monika Zgustova (y su pedazo de obra sobre Milena), Vanessa Monfort, etc., con las casetas de nuestras librerías de confianza (Librería Luque, República de las Letras...), las de los grandes grupos, como Almuzara, o las pequeñas editoriales que ponen especial cariño en todo lo que hacen, como la longeva Ediciones Depapel o la joven Bunker Books. El paseo promete. ¿Mi consejo? Fijar objetivos, marcar en la agenda la presentaciones y firmas imprescindibles y ponerse un presupuesto orientativo, aunque acabemos traspasándolo.

Mientras haya lectores, mientras la Feria del Libro sea la cita imprescindible del año en muchas agendas, seguirá habiendo futuro para esa labor loca y romantizada del editor y el librero, que cargan con más problemas que alegrías durante todo el año pero que en esta fecha se lían la manta a la cabeza para mostrar orgullosos sus libros y se recuerdan que sí, que el amor por los libros no paga difícilmente la supervivencia pero nutre y nos hace mejores.