SEMANA SANTA 2023

“Prohibido niños”: el requisito de un piso para alquilar en esta Semana Santa

El escrito Javier Castillo denuncia en Twitter la prohibición de niños en el anuncio de alquiler de un piso turístico

Niños en una piscina

Niños en una piscina / PEXELS

H.G.

Los hoteles 'only adults' son una polémica realidad que, ahora, parece haber llegado también al alquiler de pisos turísticos. Así lo ha denunciado el escritor Javier Castillo, autor de 'La Chica de Nieve' o 'El día que se perdió la cordura', a través de su cuenta de Twitter.

"He visto un piso que me ha gustado un montón para las vacaciones y al mirar las reglas del piso pone PROHIBIDO NIÑOS", comienza el mensaje publicado por Castillo. Para, a continuación, añadir una reflexión personal: "Cada cual puede alquilar el piso a quien quiera, faltaría más, pero imaginad esto mismo cambiando niños por cualquier otro colectivo".

Una pregunta que reabre el debate: ¿es legal discriminar a niños de hoteles y otros espacios?

Una práctica discriminatoria

El concepto de 'only aduts' o 'solo para parejas' define a establecimientos diseñados exclusivamente para personas mayores de 18 años y que incluyen restricciones de edad, es decir, no permiten niños y niñas. Buscan atraer a los viajeros que quieren un ambiente más tranquilo y relajado durante su viaje. Pero, ¿la ley permite este tipo de restricciones?

Jorge Fernández, profesor colaborador de los Estudios de Derecho y Ciencia Política de la UOC, lo clarifica. “Sí, la definición en sí misma comporta un trato desigual al colectivo de menores, que, así planteada, comporta un trato discriminatorio por razón de edad". ¿Y pueden este tipo de alojamientos denegar la entrada a una familia con hijos menores? "Se trataría de un acto discriminatorio por razón de edad, que atentaría contra el artículo 14 de la Constitución española, establecido en el título relativo a los derechos y deberes fundamentales", explica.

"La práctica habitual no es denegar, sino disuadir a las familias con hijos menores de reservar o contratar alojamientos en dichos hoteles", añade Fernández. Las formas de disuasión son muy variadas: publicidad enfocada a actividades de adultos, inexistencia de animación infantil, de menús infantiles, de camas supletorias o cunas, promoción del hotel como un lugar de descanso romántico, etc. "Se trata de medidas que en principio disuaden a las familias con hijos menores de reservar en dicho tipo de hoteles, sin que conste una expresa prohibición de acceso a los mismos", afirma.

Los hoteles only adults se publicitan libremente en webs de reservas y aplicaciones de viajes, a lo que Fernández cree que la Administración debería controlar más este tipo de publicidad. "Las administraciones no son excesivamente activas a la hora de fiscalizar los alojamientos que se publicitan como solo para adultos. Y, en casos de inspecciones, la respuesta de los establecimientos se centra en negar que se prohíba la entrada a menores y a decir que simplemente están enfocados a un público adulto, si bien puede acceder todo tipo de clientes sin restricción alguna en cuanto a la edad. La remisión a un error en la expresión publicitaria suele ser habitual", concluye.