Un juez cuelga el cartel de 'Se vende' en Velintonia, la antigua casa de Vicente Aleixandre

Velintonia, la casa de Madrid donde el poeta Vicente Aleixandre vivió su exilio interior  y donde produjo casi toda su obra, punto neurálgico y refugio de artistas y autores de todo signo durante la dictadura franquista, está a la venta. Tras décadas transitando entre la memoria y el olvido, un juez ha decretado la subasta pública del inmueble, que pasará a manos de quien pague al menos los 4,5 millones de euros del precio base.

Se trata de un procedimiento tramitado por un juzgado de Madrid para subastar el inmueble en un plazo de veinte días, una vez que el edicto ha salido publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), ante las desavenencias irresolubles entre los herederos del premio Nobel en 1977. Según la información del portal de subastas del Boletín Oficial del Estado (BOE), la vivienda, en el número 3 de la calle Vicente Aleixandre, en el barrio de Vallehermoso del distrito de Chamberí, es una edificación de 630 metros cuadrados (m²) en tres plantas construida en 1930 sobre una parcela de 799 metros cuadrados (m²).

La casa se encuentra en la calle antes llamada Velintonia y ahora Vicente Aleixandre en honor al poeta que la habitó desde los 11 años hasta su muerte el 13 de diciembre de 1984. Sus muros dieron cobijo a figuras de la Generación del 27 como Dámaso Alonso, Gerardo Diego o Rafael Alberti, Carlos Bousoño, José Luis Cano, José Hierro, entre otros muchos. Vacía y cerrada desde 1986, cuando falleció Concepción Aleixandre, hermana del escritor, la Comunidad de Madrid anunció el 1 de junio de 2022 el inicio de los trámites para declarar a la casa como Bien de Interés Patrimonial (BIP) por su "valor simbólico" y por "ser una casa referente de la literatura".

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Un futuro incierto para Velintonia

Un declaración que muchas voces del mundo de la cultura consideran tardío e insuficiente. Entre ellas, la de la Asociación de Amigos de Vicente Aleixandre (AAVA), que ha pasado los últimos 36 años luchando por la declaración de Velintonia como Bien de Interés Cultural (BIC), el mayor grado de protección patrimonial, y que ve como una "aberración" la subasta judicial decretada por el juez ante las desavenencias irresolubles entre los herederos.

La declaración como Bien de Interés Cultural (BIC) otorga el máximo nivel de protección a aquellos elementos que poseen un valor excepcional por su importancia artística, patrimonial y arquitectónica; mientras que los Bienes de Interés Patrimonial (BIP) gozan de una protección menor, aunque poseen una especial significación histórica o artística, y garantiza que toda intervención en ellos respete sus valores históricos, artísticos y culturales.

Al carecer de este grado de protección superior, las administraciones públicas no pueden entrar en la puja. Además, el comprador podrá hacer reconvertir el inmueble según su voluntad, sin obligación de respetar el legado que representa. Alejandro Sanz, presidente de la AVAA, ha lamentado que haya habido "lamentables directores generales de patrimonio, lamentables consejeros y lamentables ministros de Cultura que no han trabajado por conseguir esa protección" de la vivienda de Alexandre que "podrá quedar convertida en clínica dental, en una residencia de ancianos en un colegio mayor".