Cultura, turismo, accesibilidad y sostenibilidad: las cuatro claves del nuevo 'Chinatown' de Almeida en Usera

Usera es el 'barrio chino' oficioso de Madrid. Sus calles transpiran una identidad propia vinculada a la cultura de la comunidad china, afincada en gran parte dentro de este distrito sureño de la capital. Una identidad que el Gobierno de José Luis Martínez-Almeida quiere potenciar mediante un ambicioso plan de regeneración que transforme el paisaje urbano de Usera y dé forma al 'Chinatown' de Madrid.

El proyecto, dividido en dos fases, abarcará 63.000 metros cuadrados del distrito a través de un trazado de 1,7 kilómetros que unirá peatonalmente la plaza del Hidrógeno con el paruqe de Madrid Río. La actuación, que contará con una inversión de alrededor de 9 millones de euros y estará terminada a mediados de 2025, persigue un doble objetivo: transformar el barrio para hacerlo más habitable y reforzar la identidad propia del 'Chinatown' de Madrid.

“Es una diversificación de nuestra apuesta turística y cultural por sacar también el turismo del centro de la ciudad, por llevarlo a otros lugares extraordinarios como es en este caso el distrito de Usera”, ha resumido Almeida en declaraciones a la prensa, en las que ha expresado su confianza en tener lista la vertiente administrativa “antes de que concluya este primer trimestre” para poder ejecutar las inversiones. 

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Las cuatro claves del 'Chinatown de Madrid

Integración cultural y atracción del turismo

Uno de los puntos fuertes del proyecto es potenciar la imagen y la identidad de Usera como 'barrio chino' de Madrid. Así, el Consistorio pretende tanto favorecer una mayor integración entre la cultura de la comunidad china y las tradiciones más castizas del barrio, como crear un nuevo polo turístico en la ciudad, un 'Chinatown' propio, a imagen y semejanza de otros tan emblemáticos como los de Londres o Nueva York.

En este sentido, uno de los aspectos de la remodelación será la "instalación de elementos que refuercen la identidad del entorno como 'barrio chino'”, señala el Consistorio, mediante mobiliario específico y referencias culturales en pavimentos y señales. De esta manera, y unido a la revitalización del barrio y a la mejora de sus conexiones, Cibeles espera que incrementar el número de visitantes que "tendrán la posibilidad de acercarse al sur de Madrid y disfrutar de una gran oferta cultural y de ocio".

Un propósito que cuenta con el visto bueno y la implicación de la comunidad china de Usera, que se ha mostrado "dispuesta a participar y colaborar en el desarrollo de este ‘Chinatown’ a la madrileña", según el Ayuntamiento. Este, a su vez, subraya que el proyecto en cuestión supone poner "en valor la convivencia con una comunidad con una alta riqueza cultural".

Mejora de la accesibilidad y la sostenibilidad

El proyecto se llevará a cabo en dos fases: la primera abarcará la plaza del Hidrógeno, en la calle Dolores Barranco, hasta la plaza José Luis Hoyos, frente al mercado de Usera, que prevé comenzarse a principios de primavera; y la segunda, entre el mercado de Usera y Madrid Río, que está en proceso de redacción del proyecto y se espera que comience a finales de primavera o principios de verano, informan fuentes municipales.

Esta primera fase se desarrollará sobre 40.600 metros cuadrados y supondrá el incremento de las zonas peatonales en 6.000 metros, la reducción de los pavimentos asfálticos y la puesta en marcha de 4.000 metros cuadrados de suelos drenantes, así como la incorporación y renovación de mobiliario urbano. Asimismo, la sostenibilidad ambiental será uno de los puntos más destacados de la intervención, por lo que se plantarán en torno a 200 nuevos árboles, se mejorará el aprovechamiento del agua y se sustituirá el alumbrado por otro más eficiente.