RUPTURA CON VOX

Ayuso teme manifestaciones en su contra promovidas por Vox durante la precampaña

La dirigente popular cree que en las próximas semanas podrían organizarse protestas de organizaciones provida alentadas por Monasterio

Isabel Díaz Ayuso en un acto de campaña del PP de Castilla La Mancha junto al candidato popular de la comunidad, Paco Núñez.

Isabel Díaz Ayuso en un acto de campaña del PP de Castilla La Mancha junto al candidato popular de la comunidad, Paco Núñez. / EFE / Ismael Herrero

Elena Marín

Elena Marín

La ruptura escenificada este jueves entre PP y Vox en Madrid, manifestada por Isabel Díaz Ayuso en la Asamblea de Madrid, puede tener ahora consecuencias en las calles. Esa es al menos la percepción de la presidenta de la Comunidad de Madrid, que ha vuelto a insistir esta mañana en que no quiere verse "arrastrada" por el partido que lidera Santiago Abascal.

La dirigente popular ha pronosticado en una entrevista en Onda Cero que a partir de ahora y hasta la cita electoral del 28 de mayo, no le extrañaría encontrarse en las calles con "manifestaciones de HazteOir", organización provida muy cercana a Vox. Díaz Ayuso ha asegurado que a pesar del distanciamiento que quiere marcar con la formación que dirige Rocío Monasterio en Madrid, ella no quiere "ir contra nadie", pero le ha parecido oportuno sugerir, con esta referencia a las posibles protestas de HazteOir, que Vox, por el contrario, sí podría hacer lo contrario, y ha justificado que "necesitan estar en los titulares", ha apuntado. Eso y confirmar que diputados de Vox le han llamado "abortera" y "globalista" a modo de insulto.

Ruptura preelectoral

Estas palabras se producen después de que este jueves Ayuso dejara claro en el último pleno de la legislatura algo que se viene fraguando desde hace meses. "Que cada una siga por su camino", le espetó a Monasterio hasta en dos ocasiones con la idea de soltar lastre antes de la campaña electoral después de cuatro años de entendimiento en los que, como quiso recordar la portavoz de la ultraderecha, los populares han conseguido sacar adelante una veintena de leyes en esta legislatura precisamente porque Vox lo ha permitido con su apoyo o su abstención en las votaciones en el parlamento autonómico.

La presidenta, sin embargo, en línea con lo que decían ayer en los pasillos de la Asamblea sus compañeros de partido, recuerda algo molesta que ella tiene una mayoría superior a la suma de la izquierda y que solo necesita que Vox le deje hacer. "Quiero dejar claro que PP y Vox no somos socios", ha señalado esta mañana y ha incidido en que tiene "65 escaños" y en que no quiere verse con "tanto freno" por apenas "cuatro abstenciones" que necesita de Vox.

Discrepancias con Feijóo

Tras el anuncio de ruptura realizado por Ayuso, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, respaldo las palabras de la dirigente madrileña desde Bruselas. Allí apuntó que el único objetivo de Vox era "intentar buscar algún rédito electoral de la antipolítica" y no tanto el interés por Madrid. Sin embargo, Ayuso discrepa de esta percepción de Feijóo sobre los de Abascal. "Decir que ellos son la antipolítica cuando está sentada en la Moncloa es faltar a la verdad". Tras atacar al Gobierno de coalición de "erosión constante" de las instituciones, Ayuso tiene claro que "eso sí que es la antipolítica".

Las dificultades son evidentes en la relación entre la dirigente popular y la de Vox. Cada vez que se le pregunta por si el entendimiento entre ellas será reconducible tras las elecciones, la presidenta madrileña evita responder directamente, como ha vuelto a hacer hoy mismo, y se limita a decir que hay buena relación con algunos diputados del grupo parlamentario de Monasterio y que cuando han tenido que negociar a lo largo de la legislatura, hasta que llegó el fiasco de los presupuestos en diciembre, han podido entenderse entre los grupos. Pero ese entendimiento se reduce a las personas que conforman el equipo de Monasterio y los diputados del PP, nunca a ellas dos, algo que corroboran en la formación de la ultraderecha y a lo que su portavoz puso voz hace unas semanas en una rueda de prensa en la Asamblea cuando señaló que Ayuso no le da "ni los buenos días".

A pesar de esto, a pesar de que ella aspira a "volar libre" y obtener la mayoría absoluta en mayo para poder gobernar sola, y a pesar de que Monasterio lleva días deslizando la idea de que Génova ha dado orden de que el PP busque acuerdos con los socialistas y no con ellos, Ayuso reconoce que para ella Vox es el único socio posible que ella podría tener en Madrid. "Habrá que ver la situación en las urnas", señala, pero advierte que ella no es "equidistante".