TRÁFICO DE DROGAS

VTC usadas para el tráfico de droga: "Cada vez nos hacen más controles"

Entre conductores y pasajeros, al menos cinco personas han sido condenadas durante el último año por cinco casos distintos de tráfico de drogas en VTC

Cerco en Madrid al tráfico de drogas en los VTC

Cerco en Madrid al tráfico de drogas en los VTC / Nacho García

Alberto Muñoz

Alberto Muñoz

Julián no lleva ni tres meses como conductor de VTC y ya sabe “cómo funciona esto”. “Al poco de empezar, tres chicos en la zona de Lavapiés me ofrecieron llevar fardos en el maletero para sacarme un extra. Poco después, otro me contrató para ir haciendo paradas en distintos portales. Se bajaba, debía de entregar algo y volvía a subir al coche. La policía no es tonta, ya se está oliendo algo y cada vez nos paran más. Mira a tu alrededor en Madrid y vas a ver VTC parados en cada control”, explica a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA.

Tanto es así que durante el último año solo en Madrid ya se ha condenado a cinco personas, tanto conductores como pasajeros, que intentaron aprovecharse del servicio de VTC para traficar con drogas: cilindros rellenos de cocaína prensada, mochilas cargadas de heroína y marihuana, y bolsitas ocultas por todo el cuerpo con MDMA, ketamina y cannabis.

“Nosotros como conductores no podemos hacer nada, solo pedir que haya un mayor control por parte de la Policía, cuyo trabajo respetamos mucho, pero, evidentemente, nosotros no podemos cachear a los clientes cuando se suben a nuestro vehículo”, explica a este periódico José Manuel Berzal, presidente ejecutivo a nivel nacional de UNAUTO, una de las principales asociaciones que representan al sector de alquiler de vehículos con conductor en España.

'Pantera rosa' en la "zona inguinal"

Un pasajero, según la documentación judicial a la que ha tenido acceso EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, fue condenado el pasado 7 de marzo por la Audiencia Provincial de Madrid a tres años de prisión después de que la policía local de Alcobendas le 'cazase' en un control aleatorio de vehículos VTC.

Dentro de sus pantalones, concretamente "en la zona inguinal", llevaba un alijo de drogas listo "para la realización de transacciones ilícitas e indiscriminadas" en el que había MDMA, cannabis, ketamina, anfetaminas y varias bolsas de 2C-B, la llamada 'pantera rosa' o 'droga de los pijos'. En total, la Justicia estima que lo incautado se podría haber vendido en la calle por 890 euros.

En la misma línea, la Audiencia Provincial también condenó a un año de cárcel a otro pasajero que fue detenido en Carabanchel durante un control rutinario tras ocultar debajo del asiento del conductor una mochila con casi 100 gramos de marihuana que en el mercado se habría podido vender por alrededor de 500 euros. Además, llevaba 60 euros que se considera probado que procedían del "tráfico ilícito de estupefacientes", por lo que podría haber hecho paradas previas para vender la sustancia.

"Yo creo que uno de mis clientes hizo algo parecido. No lo puedo asegurar porque mejor no preguntar en estos casos, pero me contrató para ir haciendo paradas en distintos portales y la situación tenía toda la pinta. Se bajaba, debía de entregar algo y se volvía a subir", explica un conductor de VTC. "Es algo que en el sector se sabe que se intensificó con la pandemia y que, si no se hace algo, se va a seguir haciendo porque les resulta muy cómodo".

A la fuga con tres kilos de heroína

En junio del año pasado, por ejemplo, se condenó a un joven que, con 20 años y en pleno confinamiento por el coronavirus, "fue sorprendido" por la policía municipal de Madrid en Moratalaz montándose en un VTC con una bolsa roja de grandes dimensiones.

En ella, además de una báscula de precisión y cuatro navajas, los agentes encontraron resina de cannabis, MDMA y componentes para el 'cortado' de sustancias estupefacientes como la cafeína o la fenacetina. En total, más de dos años de prisión por un delito contra la salud pública y por el puñetazo que propinó a uno de los policías, ante los que se resistió con "golpes y patadas".

No fue el único, en cualquier caso, al que cogieron intentando huir en un VTC con una bolsa cargada de droga. En el parking de un centro comercial en Orcasur, un hombre fue detenido con una mochila que contenía tres kilos de heroína, razón por la que ha sido condenado a siete años y medio de prisión.

Los conductores, también implicados

Sin embargo, el problema no son solo los clientes. El pasado 28 de febrero, la Audiencia Provincial de Madrid condenó a un conductor de VTC a un año y nueve meses de prisión por un delito contra la salud pública, según ha podido saber EL PERIÓDICO DE ESPAÑA gracias a la documentación judicial del caso.

El hombre de 57 años, que fue detenido en una de las vías que atraviesan el barrio de Tetuán y que dan a parar al Paseo de la Castellana, fue interceptado por un coche de paisano de la policía cuando transportaba varias bolsitas y cilindros rellenos de cocaína prensada. En el bolsillo de su camisa, 330 euros que la Justicia considera probado que fueron fruto del trapicheo.

Un mes antes de esta condena, es decir, a finales de enero de 2023, la Policía Municipal de Madrid informó de que había detenido al conductor de un VTC que llevaba consigo 37 gramos de droga entre cocaína rosa y lo que parecía heroína, además de 185 euros en billetes que podrían ser el resultado del tráfico de drogas.

9 años de prisión y multa de 31 millones de euros a un conductor

Sin embargo, el conductor de VTC que se ha visto envuelto en un caso más importante recientemente fue uno que el año pasado fue condenado por la Audiencia Provincial de Madrid a nueve años de prisión y a pagar una multa de 31 millones de euros tras participar activamente como chófer encubierto en una red de tráfico que buscaba traer droga desde Ecuador hasta una nave en el distrito de Humanes.

La Policía no confirma si ha intensificado sus controles

Contactada por este periódico, la Policía no ha querido confirmar si están incrementando los controles aleatorios a taxis y VTC por este motivo, pero entre algunos conductores existe la sensación de que sí. "No son tontos, se están oliendo algo porque cada vez nos paran más", explica Julián.

Agentes del Cuerpo reconocen a título personal que no existe una directriz que les marque hacer más controles, pero que saben que tienen que tener un ojo puesto en los "patinetes de alquiler, repartidores, taxistas, VTC y similares porque desde la pandemia son como el 'teledroga'".

El caso de los traficantes que se aprovechaban del servicio de Glovo para enviar droga durante la pandemia fue uno de los más significativos y uno de los que pusieron en alerta al sector, ya que si los repartidores eran detenidos con la sustancia en su poder podían verse envueltos en el procedimiento.

"Igual que un cliente puede negarse a subir a un vehículo por su estado o porque el conductor no le transmita confianza, los trabajadores de VTC también pueden hacer lo mismo. En ese sentido, las plataformas nos protegen, sabemos que tenemos la posibilidad de no coger a un cliente si desconfiamos de sus intenciones", apunta el presidente ejecutivo a nivel nacional de UNAUTO, que asegura que en la próxima reunión propondrá el tráfico de drogas como uno de los temas a tratar.