En la inaguración del MWC

Sánchez anuncia la creación de un modelo de lenguaje de IA en castellano y las lenguas cooficiales

Tras inaugurar el MWC, el Rey Felipe VI se desplazará este lunes hasta el edificio incendiado de Campanar: "El luto de toda Valencia es el luto de toda España"

Sánchez anuncia que España trabajará en un "Gran Modelo Fundacional de Lenguaje de IA entrenado en español".

Sánchez anuncia que España trabajará en un "Gran Modelo Fundacional de Lenguaje de IA entrenado en español". / Atlas

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este domingo la creación de un "Gran Modelo Fundacional de Lenguaje de inteligencia artificial" entrenado en castellano y en el resto de lenguas cooficiales, lo que incluye el catalán, el Euskera y el Gallego. Lo ha explicado durante la cena inaugural del Mobile World Congress (MWC) que ha vuelto a celebrarse en el Museu Nacional d’Art de Catalunya (MNAC), en la montaña de Montjuïc. Sánchez ha explicado que, para hacerlo, el ejecutivo central colaborará con el Barcelona Supercomputing Center (BSC), la Red española de supercomputación, la Real Academia Española de la Lengua (RAE) y la Asociación de Academias de la Lengua Española. Además, aprovechando la presencia del presidente de Paraguay en el acto, ha invitado a los países iberoamericanos para que se sumen a la iniciativa.

A pesar de este anuncio, Pedro Sánchez ha querido aprovechar la cita para pedir que se compatibilicen los beneficios de la IA, con sus posibles puntos oscuros. En este sentido, ha reivindicado seguir apostando por la innovación, pero ha pedido hacerlo sin perder de vista la protección de los menores, a los que ha definido como los "más vulnerables en la red", y sin alejarse tampoco de la "visión humanista" de la tecnología para no "socavar la democracia". Un discurso muy similar al del Rey Felipe VI, que ha presidido la cena, y que ha aprovechado para pedido al sector del móvil trabajar "conjuntamente" para poder compatibilizar la "innovación" con la "seguridad" y la "sostenibilidad" ante los nuevos avances de la tecnología, y especialmente ante el "reto" de la Inteligencia Artificial (IA).

Además de con Pedro Sánchez, el monarca ha coincidido en la cena con Pere Aragonès, que un año más el protocolo establecido por la Generalitat en los actos donde se coincide con la Casa Real. No ha participado del besamanos, pero sí ha compartido mesa con el Rey y el resto de autoridades. La diferencia de esta edición, sin embargo, la ha marcado el otro lado de la plaza Sant Jaume: el ayuntamiento de Barcelona. Hasta el año pasado, Ada Colau, entonces alcaldesa de la ciudad, secundaba la política de Aragonès y tampoco participaba en el besamanos. Sin embargo, el actual alcalde, Jaume Collboni, sí se ha posicionado al lado de Sánchez y ha saludado con normalidad al Rey. Este año, Colau no asistiría ni siquiera a la inauguración de este lunes, en protesta por la presencia de la embajada de Israel en el congreso.

Por parte de las instituciones catalanas, también han participado del evento la presidenta del Parlament, Anna Erra, así como los consellers de Empresa, Roger Torrent, y de Educació, Anna Simó. Todo ellos han mostrado la misma frialdad ante el monarca, en una cena que llega en plena polémica sobre la aprobación de la ley de amnistía. La norma debería haberse aprobado hace casi un mes, pero Junts la rechazó alegando que no incluía las acusaciones de terrorismo del caso Tsunami, ni las de alta traición que sobrevuelan lo que se conoce como la trama rusa del 'procés'. El próximo 7 de marzo es la fecha límite para que la Comisión de Justicia valide el dictamen de la ley.

Felipe VI, Sánchez y Aragonès volverán a coincidir este lunes en la inauguración del congreso en el recinto de Gran Via de Fira de Barcelona, en L'Hospitalet de Llobregat, donde se reunirán con varios expositores para conocer las novedades de esta edición, en la que se espera llegar a los 95.000 visitantes -un 7,3% más que en la anterior edición- y más de 2.400 compañías. También se prevé un impacto económico superior al de la edición anterior, que se cifró en 461 millones de euros.