Los mejores partidos de Wimbledon en la historia del tenis

Wimbledon es el torneo de tenis británico más importante, el cual se celebra desde hace casi 150 años en Londres, Inglaterra. Cada año, el All England Lawn Tennis and Croquet Club celebra lo que es el tercer Grand Slam del circuito ATP y uno de los torneos más importantes del mundo, en el cual se han jugado muchos de los mejores partidos de la historia del tenis. Para muchos jugadores y aficionados clásicos de tenis, Wimbledon representa el torneo más importante del año porque es el más antiguo, tradicional y relacionado con los valores de la elegancia en el tenis, siendo también es el único torneo ATP celebrado sobre hierba y el mejor pagado durante un tiempo. Este torneo ha sido testigo a lo largo de todos sus años de historia de numerosos partidos de tenis históricos entre las mejores raquetas que han pisado su hierba a lo largo de las décadas.

En este artículo os vamos a hacer un repaso a los mejores partidos que se han dado cita en el abierto inglés durante todo este periodo:

1980 – Final de entre Bjorn Borg y John McEnroe:

La final entre el tenista sueco Bjorn Borg y John McEnroe de 1980 es uno de los partidos más vibrantes de la historia del tenis, merecedor de una película propia (Borg vs McEnroe, de 2017) y considerado el mejor partido de tenis de la historia hasta que se disputó el duelo en la final de 2008 disputada entre Roger Federer y Rafa Nadal, aunque algunos puristas le sigan dando esta denominación. En una final, que marcaría la historia del tenis, definida en el tie-break.

Borg consiguió batir al tenista norteamericano en cinco apasionantes sets, con un resultado de 1-6, 7-5, 6-3, 6-7(16) y 8-6 al final que al año siguiente se reeditaría. En 1981 se enfrentaron los mismos contendientes, siendo en esta nueva ocasión la victoria para el estadounidense, que alzaría a McEnroe a lo más alto del tenis.

2001 – Final entre Goran Ivanisevic y Pat Rafter:

Esta final tuvo dos particularidades: la primera, es que fue la única final de Wimbledon que tuvo que ser aplazada al lunes por culpa de la lluvia. En segundo, porque fue la primera vez que un jugador invitado se hizo con la victoria final. Fue el caso de Goran Ivanisevic, jugador que ya había alcanzado grandes cotas durante la década de los 90, pero que en aquel 2001 ocupaba el puesto nº125 del ranking ATP y ganó en cinco sets al australiano Pat Rafter como 'wildcard' por 6-3, 3-6, 6-3, 2-6, 9-7.

2008 – Final entre Roger Federer y Rafael Nadal:

Uno de los partidos más épicos y recordados de la historia del tenis como comentábamos antes. En la edición de 2008, Rafa Nadal venció a Roger Federer tras cinco sets y un 6-4, 6-4, 6-7(5), 6-7(8), 9-7, en una batalla de casi cinco horas de duración sin cuartel sobre la hierba inglesa. Más allá de que fue uno de los partidos que todavía hoy se recuerdan y de su alto valor tenístico, también supuso un punto de inflexión. Federer venía de ser uno de los máximos dominadores en hierba y Nadal todavía no habia conquistado un título sobre este terreno. La victoria de Rafa significó un fin de un ciclo, el inicio del reinado de Nadal equiparado definitivamente con los más grandes y el primer título de los dos que ha conquistado el tenista mallorquín en Londres (2008 y 2010).

2009 – Final entre Roger Federer y Andy Roddick:

La final del año siguiente devolvió a la ronda final al suizo Federer, amo y señor de la hierba, contra un tenista en auge en aquellos años conocido por ser un hueso duro de roer, Andy Roddick. Federer se quitó la espina del día anterior ganando por un 5-7, 7-6(6), 7-6(5), 3-6, 16-14. Federer conseguiría en esta edición el sexto de sus ocho Roland Garros (ganaría dos más en 2012 y 2017) y en ese momento se convertiría en el primer tenista en superar a Pete Sampras como máximo ganador de títulos de Grand Slam en el cuadro masculino.

2010 – Partido entre John Isner y Nicholas Mahut, el partido más largo de la historia del tenis:

Este fue el partido más largo de la historia del tenis, el cual fue disputado durante tres días distintos en la edición de Wimbledon 2010. Después de 11 horas y 5 minutos, ganó John Isner bajo la atenta mirada de la reina Isabel y provocando que la organización llegase a colocar una placa conmemorativa en la misma cancha número 18, el lugar donde se jugó el partido, para honrar el esfuerzo titánico de Isnet y Mahut en aquellos tres días en Wimbledon. Tenistas históricos como John McEnroe o Roger Federer destacaron emocionados el hito que supuso este partido interminable en el que se rompieron varios récords más tales como el set más largo (8 horas y 11 minutos), mayor cantidad de juegos durante un partido (183) o el récord de servicios mantenidos durante un partido (168)

2013- Novak Djokovic-Juan Martín del Potro: la semifinal más larga de la historia.

El duelo entre el serbio Novak Djokovic y el argentino Juan Martín del Potro se convirtió en la semifinal más larga de la historia del tenis. Un duelo entre dos tenistas con una mentalidad ganadora de hierro y que siempre se han crecido en los grandes escenarios. Novak se impuso tras cuatro horas y 43 minutos de intenso tenis tras cinco sets en los que Del Potro demostró ser uno de los rivales más duros a los que te podías enfrentar en esa década.

2019 – Final entre Novak Djokovic y Roger Federer:

Esta final fue más conocida por ser el partido más largo en la historia de las finales masculinas de Wimbledon, la cual enfrentó a dos de los mejores tenistas de la historia. El mayor ganador de Grand Slams de la historia, el serbio Novak Djokovic contra otro de los máximos ganadores y actualmente, tercer ganador histórico de Grand Slam, el suizo Roger Federer, uno de los tenistas más elegantes de la historia. Djokovic se impuso en este duelo de titanes con un resultado final de 7-6(5), 1-6, 7-6(4), 4-6, 13-12(3) en el que supuso el quinto de sus siete títulos actuales sobre la hierba del abierto inglés.

Esta es la lista de mejores partidos de la historia sobre la hierba de Roland Garros, una lista que seguro que se irá ampliando y actualizando en ediciones futuras, porque Wimbledon, a pesar de sus casi 150 años de historia, sigue estando más vivo que nunca.