FÚTBOL

El veredicto unánime de los 'otros Gironas': "La Liga necesita estos pequeños 'milagros' futbolísticos"

El Sevilla de Juande Ramos en la temporada 2006-07, la Real de Raynald Denoueix en la 2002-03, el Depor de la Liga de 1999-2000 y el Zaragoza de Rojo de aquel mismo año marcan el camino a los catalanes

Paco Liano, ex del Depor, y Paco Jémez, ex del Zaragoza, recuerdan aquellas batalla con Madrid y Barça y analizan las opciones del Girona

GIRONA ATLÉTICO DE MADRID

GIRONA ATLÉTICO DE MADRID / Siu Wu

Fermín de la Calle

Fermín de la Calle

El Girona visita el Santiago Bernabéu este sábado (18:30) instalado sorprendentemente en la zona aristocrática de la clasificación. Hasta el punto de ser el único equipo que le aguanta el ritmo a un Real Madrid consistente que completa, a estas alturas de la temporada, su tercer mejor desempeño de la historia con 58 puntos en 23 jornadas, en la que solo ha cosechado una derrota y cuatro empates.

Sin embargo, los de Míchel no solo se mantienen al rebufo de los de Ancelotti, además despliegan un fútbol que está siendo elogiado por rivales y expertos. Se trata del equipo más ofensivo de la competición, con 52 goles, por 47 de los blancos. No son muchas las ‘cenicientas’ que se han atrevido a desafiar a Real Madrid, Barcelona y Atlético en la lucha por el torneo de la regularidad en los últimos tiempos. Entre ellos estaba el Sevilla de la temporada 2006-207, que peleó hasta la última jornada por ganar el título con un once en el que aparecían Palop, Alves, Poulsen, Renato, Navas Koundé o Luis Fabiano; y antes la Real Sociedad de Raynald Denoueix en la 2002-03, que se dejó el título en Balaídos la última jornada con Xabi Alonso, Nihat, Kovacevic, De Pedro o Karpin.

Sí consiguió el propósito el Deportivo de Augusto César Lendoiro y Javier Irureta. Fue en el año 2000 y en ese equipo destacó, entre otros, la actuación de su portero, Paco Liaño. El cántabro observa ahora al Girona y encuentra algunas similitudes con el desafío que libró su equipo con merengues y azulgranas. “El Girona es una grata sorpresa y lo sigo muy de cerca porque tengo una gran relación con Pablo Torre. Da gusto verle jugar, al margen de la posición que tiene en la tabla y que nadie esperaba. Pero para todos los aficionados neutrales es un equipo muy agradable por las variantes tácticas, por cómo saca el balón jugado, por su propuesta ofensiva de mediocampo hacia arriba... Desde luego que es una sorpresa que le compita al Real Madrid. A mí me retrotrae al recuerdo de lo que viví en el Deportivo, que como el Girona, era un equipo con el que nadie contaba para pelear por los títulos".

Jémez cree en los "milagros"

Paco Jémez vivió algo parecido con el Zaragoza en la temporada 1999-2000. Los maños, entrenados entonces por Txetxu Rojo, se quedaron a 90 minutos de ser campeones de Liga. A la última jornada se llegó con el Deportivo en cabeza con 66 puntos, seguido del Barcelona y el Zaragoza, con 63. Pero los gallegos hicieron los deberes y sus dos perseguidores empataron. Jémez, que hoy entrena al Tractor Sazi de la Iran Pro League, apunta que “normalmente competir con Madrid y Barça está fuera del alcance de cualquier equipo de la Liga. De vez en cuando se producen esos pequeños 'milagros' futbolísticos como el Girona que son necesarios para la Liga. Y se agradece. Nosotros con el Zaragoza, y después con el Deportivo, fuimos capaces de estar a su altura y competir con ellos hasta el final”. Paco recuerda aquella temporada con el Zaragoza de Rojo como “un viaje en el que la mayoría no creía que pudiésemos conseguirlo”.

Paco Jémez, durante una entrevista

Paco Jémez, durante una entrevista / Juan Carlos Hidalgo/EFE

Surge entonces el dilema de si la presión juega en contra de esas ‘cenicientas’ o no les afecta porque no tienen expectativas de estar luchando por esos objetivos. Para Liaño “la presión que realmente afecta, que te medra, es la negativa. Cuando estás peleando por la permanencia o por no bajar, eso lastra mucho más que la presión positiva de estar peleando por algo a lo que no estás obligado. Esta última presión no va a ser la que eche abajo las posibilidades del Girona. La complicación para ellos ahora es que todos los equipos les plantean los partidos enfrentándose a un candidato a ganar la Liga. La Real el otro día le planteó un partido para mermarle más sus virtudes que para aprovechar las propias”. Jémez, por su parte, cree que “para un equipo que no está acostumbrado a pelear por títulos resulta muy difícil sentirse cómodo en esa situación. Deberían darse más casos como los nuestros para que los 'modestos' y sus aficiones puedan sentir lo que es pelear por lo imposible”.

El meta deportivista está seguro que el Girona “va a estar cerca hasta el final. Si pierden en el Bernabéu aumentará el favoritismo del Madrid, que ya lo es. Pero hay que valorar que el Madrid se va a distraer con una competición muy exigente como la Champions, mientras el Girona tiene la ventaja de que se puede centrar en la Liga. Para mí los de Míchel han tenido una debilidad en defensa en los últimos partidos y eso les puede pesar. Sin embargo, hasta ahora no hemos oído quejarse a Míchel y lo ha resuelto con maestría. Es cierto que llega con algunas bajas a Madrid, pero también las tiene Ancelotti, sobre todo en defensa”.

Liaño ve al Girona enganchado hasta el final

Liaño puntualiza que “el único equipo que ha superado al Girona ha sido el Madrid, aunque en los primeros veinte minutos fueron superados por los de Míchel. Espero un partido de esas características, aunque el Real Madrid en casa es un muy fiable y solvente. Además, Ancelotti recuperará a algún defensa y veremos si finalmente estará Dovbyk. Lo que sí creo es que al Madrid le favorecen los rivales que le proponen juego porque son letales a la contra. Es más fácil defenderte y contraatacar”.

Paco Liaño defiende la portería del Deportivo en un partido de Liga.

Paco Liaño defiende la portería del Deportivo en un partido de Liga. / Fernando Zueras

Si hay alguien que sabe lo que es ganar, y golear en el Bernabeú, ese es Paco Jémez, que participó en la goleada de aquel Zaragoza en el coliseo blanco por 1-5: “Para mí aquel partido es una pequeña medalla, casi un título en el palmarés. Hay que reconocer que nosotros estábamos en un momento espectacular y supimos jugar en el Bernabéu contra el Madrid con una valentía inusual. Es un pequeño logro personal de todos los que participamos en aquello porque no creo que haya muchos jugadores que puedan decir que han ganado en el Bernabéu (1-5)”.

Paco Liaño reflexiona sobre lo que significa jugar en un estadio como Chamartín con todas las miradas puestas sobre ti. “Desde mi punto de vista, el futbolista sabe que todo lo que ocurre en el Bernabéu tiene una trascendencia mediática superior a lo que pasa el resto de la temporada. Y eso te puede pesar, es algo que depende de la personalidad de cada uno. Pero el Girona fue capaz de vapulear en Montjuic al Barça, aunque no fuera el Camp Nou. Y creo que tratar de repetirlo en el Bernabéu también será un aliciente para ellos”. Por último, el que sigue siendo trofeo Zamora menos goleado de la Liga, tiene unas palabras para Míchel: “Como entrenador creo que ha encontrado un entorno perfecto para él. Está muy bien donde está. Este año se ha proyectado internacionalmente y hasta se ha hablado de él como candidato al banquillo del Barça. Pero para dirigir equipos de este calado hace falta atesorar más experiencia, y aún no la tiene. Lo estamos viendo con el mismo Xavi, y a Míchel podría le podría pasar eso en banquillos de esta trascendencia. No debe tener prisa porque tendrá tiempo y oportunidades de llegar a banquillos como el del City o el del Barça. Pero que no se precipite”.