Antigua Roma: un asidero moral para tiempos de zozobra

La Semana Santa es una época propicia para revisar pasajes ambientados en la Antigua Roma. Las parrillas de las teles se llenan de clásicos del género péplum y en numerosas ciudades es fácil tropezar estos días con representaciones religiosas pobladas de centuriones coetáneos de Jesucristo. Este año, sin embargo, no ha hecho falta esperar a la Pascua para tener una experiencia genuinamente romana: basta con visitar la sección de novedades de las grandes librerías para constatar la llamativa abundancia de títulos que, a través de distintas miradas y con una pluralidad de registros, viajan a aquella época para volver a explicarla, o se inspiran en ella para construir relatos publicitados por las editoriales como grandes apuestas de temporada.

En los últimos meses se ha publicado una auténtica avalancha de ensayos, relatos y tratados ambientados en la Antigua Roma o protagonizados por personajes que fueron protagonistas de aquel período histórico. Algunos firmados por célebres investigadores de prestigio internacional, como Tom Holland, que relata de forma pormenorizada los años de máximo esplendor del Imperio Romano en Pax (Ático de los libros, marzo de 2024); o la experta en Roma Mary Beard, que traza un retrato implacable de los grandes líderes de la época en Emperador de Roma (Crítica, octubre de 2023).

Otros libros se centran en personajes concretos como Nerón, de Anthony Everitt y Roddy Ashworth, que publicará Edhasa en abril; o Julio César. El arte de la política de Francisco Uría, editado por Almuzara en octubre pasado. Y otros se fijan en grupos sociales que normalmente escapan al interés de los historiadores, como Los olvidados de Roma (Ático de los libros, noviembre de 2023), donde Robert Knap relata la vida cotidiana de gladiadores, prostitutas, forajidos, esclavos y romanos corrientes; o La historia de Roma en 21 mujeres, repaso con mirada femenina de aquel período histórico publicado por Emma Southon en marzo en la editorial Pasado y Presente.

Fenómeno editorial

Supera la veintena el número de títulos de inspiración romana salidos de imprenta desde el verano pasado. Más allá del fenómeno editorial, algunos autores creen que este acentuado interés por la Antigua Roma esconde razones sociológicas, aparte de culturales. "El cine y las novelas han fijado en la imaginación colectiva una imagen idealizada de aquellos siglos, muy atractiva en lo estético y glorioso en lo histórico. En tiempos de zozobra como los que vivimos, Roma evoca un pasado sólido y firme al que agarrarnos", explica Ibán Martín, autor de Roma Aeterna, publicado en La esfera de los libros en octubre pasado, y creador del podcast del mismo nombre en el que relata, año a año, la cronología de Roma a los 60.000 suscriptores de su canal y a otros muchos que le escuchan en las plataformas de audio. Va por el año 216 antes de Cristo.

Martín empezó a contar "cosicas romanas" (así llama a sus historias ambientadas en aquella época) tras un revelador viaje que hizo a Italia en 2005, y en los cuatro años que lleva con su actual programa ha podido comprobar el creciente interés del público por los hechos acaecidos en aquellos siglos, "quizá porque el presente es cada vez más incierto, y Roma se nos presenta como un pasado en el que todo parecía ir mejor, aunque la realidad fuera muy distinta", apunta.

En tiempos de zozobra como los que vivimos, Roma evoca un pasado sólido y firme al que agarrarnos

Ibán Martín

— Autor de libros y podcast sobre Roma

Asociamos Roma a la luminosa época imperial, pero en los 14 siglos que pervivió esa civilización hubo de todo y sus últimas centurias recuerdan, según algunos expertos en aquella época, al tiempo que vivimos hoy, marcado como entonces por una incierta sensación de fin de ciclo. "Ellos también sufrieron pandemias, crisis migratorias y asedios de pueblos bárbaros. Es lógico que todo lo que dijeron y escribieron aquellos romanos suene hoy interesante", explica David Hernández de la Fuente, responsable de la traducción y edición de Meditaciones de Marco Aurelio, publicado por Arpa en noviembre, y que va ya por la segunda edición.

Estoicismo romano

Que el célebre emperador romano esté hoy "de moda", aporta claves para entender nuestro tiempo. "Su reivindicación del individuo frente al grupo es un antídoto perfecto contra la dictadura de los ‘likes’ que soportamos hoy. Fue el líder más poderoso de su época, pero sus escritos íntimos muestran a un hombre preocupado por dilemas existenciales. Marco Aurelio recuerda: la vida es cambio, acéptalo, vive en libertad y sin miedo", señala el catedrático de griego Hernández de la Fuente, coautor, junto a los filósofos Javier Gomá y Carlos García Gual, de El estoicismo romano, recientemente publicado por Arpa, donde repasan, y traen a nuestros días, el pensamiento de Séneca, Epicteto y Marco Aurelio.

En contraste con los epicúreos, que promulgaban la búsqueda de la felicidad a través del placer, los estoicos proponen encontrarla en la virtud. "El estoicismo es una ética conservadora, alejada de cualquier propuesta revolucionaria. Promueve el orden y el juicio justo, y reivindica, ante todo, la libertad personal del individuo para decidir sobre su destino", detalla Carlos García Gual, casi como si describiera el patrón mental imperante en nuestro tiempo. En opinión del filósofo y experto en Epicteto, "el estoicismo es una corriente de pensamiento muy válida para tiempos de crisis de valores como la actual".

Más allá de coyunturas históricas momentáneas, Roma es, al igual que la Antigua Grecia, la fuente de la que mana la política, el derecho y la cultura que hoy, 2.000 años después, siguen rigiendo nuestros usos y costumbres. "Cuando conocemos sus vivencias y sus ideas, nos vemos reconocidos en ellas, porque seguimos pareciéndonos mucho a aquellos romanos", apunta Santiago Posteguillo. A través de la novela histórica, es uno de los autores que más ha hecho para promover el interés por aquella época. Desde 2006 ha publicado una docena de novelas ambientadas en Roma, de las que lleva vendidas en todo el mundo 4,5 millones de ejemplares.

Cuando conocemos sus vivencias y sus ideas, nos vemos reconocidos en ellas, porque seguimos pareciéndonos mucho a aquellos romanos

Santiago Posteguillo

— Autor de novelas ambientadas en la Antigua Roma

Y el material no se le agota, asegura: "Shakespeare ya contó la historia de Julio César, pero todas las generaciones hemos sentido la necesidad de volver a relatarla con el lenguaje de nuestro tiempo", razona.

Frente a la frialdad del ensayo, la novela histórica brinda la oportunidad de viajar en el tiempo, pero con la perspectiva que da el tiempo. "Hoy, la actualidad la protagonizan los casos de corrupción, los conflictos de poderes y la crispación política. Pero en cualquiera de mis novelas hay gobernadores corrompidos, choques entre el Senado y las asambleas, y fiscales que persiguen a cargos públicos. Este interés por Roma, en realidad, solo responde a la necesidad de entender de dónde venimos", concluye Posteguillo