Hacienda: cómo afectan los 400 euros del Bono Cultural Joven a la Declaración de la Renta

Cada año, millones de españoles deben enfrentarse a la Declaración de la Renta de Hacienda. Con este documento, los contribuyentes declaran su actividad económica a la Agencia Tributaria: qué ingresos y qué gastos ha tenido cada persona física a lo largo del ejercicio anterior y, a su vez, qué impuestos ha pagado por sus beneficios o qué deducciones le corresponden por su situación.

Qué es la Declaración de la Renta

La declaración de la renta es ese modelo donde, entre otros impuestos, se equilibra el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas: a lo largo del año los ciudadanos aportan este tributo -un porcentaje de los rendimientos del trabajo, cuyo porcentaje depende de la cantidad de dinero que ganemos al año- mediante las nóminas (en el caso de los trabajadores asalariados) o de las facturas (en el caso de los trabajadores autónomos).

Qué es el Bono Cultural Joven

El Bono Cultural Joven es una ayuda directa del Gobierno de 400 euros disponible para quienes cumplen 18 años y para adquirir o disfrutar productos y actividades culturales. Se recibe en en un único pago, en formato de tarjeta prepago virtual nominal con una vigencia de un año durante los doce meses siguientes a su concesión.

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Lo que no sabe mucha gente es que esta ayuda, al igual que otras estatales, está sometida a IRPF, ya que se considera ganancia patrimonial y, por lo tanto, hay que incluirla a la hora de realizar la declaración de la renta, integrando su importe en la casilla 0323.

Declarar el Bono Cultural a Hacienda

Al mismo tiempo, es importante saber que si por la razón que fuere el beneficiario de este bono cultural no lo hubiera agotado en el plazo de un año solo tendría que tributar por la cantidad utilizada: Hacienda entiende que se ha producido el cobro de la subvención en el momento que se le da uso.  En caso de que el beneficiario no hubiera recibido otro tipo de ayuda pública, la sola recepción del bono cultural joven no le obligaría a realizar declaración de renta, obligación que se establece cuando las ayudas o subvenciones que se obtienen superan los 1.000 euros al año.