ELECCIONES EN CATALUÑA

El PSC afronta las comparecencias de Illa por el caso Koldo sin temor a que afecte a su campaña

Sánchez y Zapatero se vuelcan en la campaña del PSC para llevar a Illa a la presidencia

El líder del PSC, Salvador Illa, en un acto de partido.

El líder del PSC, Salvador Illa, en un acto de partido. / Manu Mitru

El PSC empieza la semana en la que arranca oficialmente la campaña en Cataluña con las dos comparecencias de su candidato, Salvador Illa, en el Congreso y el Senado por el caso Koldo. Los socialistas catalanes, que lideran todas las encuestas, aseguran no temer esa coincidencia en el calendario y están convencidos de que la trama de las mascarillas y la concesión de la amnistía no tendrá "ningún impacto" en sus expectativas electorales. El equipo del candidato y exministro de Sanidad lleva semanas arremangándose para que así sea, pese a que son conscientes de que hay imponderables que no pueden preverse.

"Estoy tranquilo, que salga lo que tenga que salir", ha insistido Illa desde que estalló una polémica que defiende que nada tiene que ver con su gestión. Su plan es explicarse esos dos días para, después, dar por zanjado el asunto y centrarse en el pulso por alcanzar la presidencia de la Generalitat, un hito que el PSC considera que tiene más cerca que nunca en los últimos años. El partido descarta que puedan trascender novedades a nivel judicial que le afecte en las urnas y trunque ese objetivo, además de estar convencido de que las coordenadas que marcarán el voto de los catalanes tendrán que ver más con la gobernabilidad que no con el conflicto territorial que agitan los independentistas o con la presunta trama de cobro de. comisiones por venta de mascarillas.

El foco de sus rivales políticos

El líder del PSC tiene bien pautado el guion de las comparecencias porque es el mismo hilo argumental que ha desplegado en los últimos dos meses. Ha defendido que mientras él era ministro desde Sanidad no se firmó ningún contrato con la empresa de Koldo García y, de hecho, fuentes socialistas explican que pidió una revisión de las adjudicaciones cuando la trama salió a la luz pública para cerciorarse de ello. Sin embargo, ante el riesgo de que sus rivales pongan el foco en el asunto, el líder del PSC ya ha dejado caer que hay quien desde el primer día de la pandemia "intenta enfangar" su figura.

Lo dice en referencia al PP, que lo ha citado en la Cámara alta a escasas horas de que empiece oficialmente la campaña catalana; pero también a Junts, a quien días atrás señaló por tratar de enturbiar la competición electoral a costa de su etapa como exministro gestionando la excepcionalidad de la pandemia. "Que busquen lo que quieran, que daré las explicaciones que tenga que dar", dijo entonces.

"Más de 20 veces"

Tratando de quitar hierro a las dos comparecencias, Illa sostiene que se explicará de la misma manera que lo hizo "hasta más 20 veces" mientras el virus hacía estragos a escala mundial, recordará que las compras que hizo Sanidad están publicadas en el portal de transparencia, que había una unidad centralizada dedicada a filtrar las ofertas que se recibían, que ha reconocido que eran muchas en un contexto de "excepcionalidad" en el que la prioridad era tener el material para poder hacer frente a la pandemia. Además, asegura que se dieron explicaciones de todo el material que, pese a haber sido adquirido, no llegó en plena competición mundial para conseguir mascarillas, tests o equipos de protección.

"Ni yo ni nadie de mis equipos han cometido ninguna irregularidad", ha abanderado desde que la trama de las mascarillas se hizo pública. A Koldo García, admite, lo conocía por ser la persona de confianza del entonces ministro José Luis Ábalos, pero mantiene que no hizo tratos con él. Pese a que hace una acérrima defensa de que muchas personas dieron "lo mejor" de ellas mismas en una situación de emergencia y la mayoría de los que se ofrecieron a ayudar lo hicieron "con buena voluntad y a coste cero", añade que también afloró "la peor parte" en plena emergencia, la de "aprovechados" sobre los que pide que caiga "todo el peso de la ley".

¿Y la amnistía?

Esta es la línea que mantendrá en sus intervenciones en el Congreso y en el Senado y con la que el PSC espera dar carpetazo al asunto. Si bien en el congreso que celebró el partido hace un mes y medio había dirigentes socialistas que no escondían cierto temor a que la sombra del caso se hiciera más larga, la zozobra se ha ido mitigando. Eso mismo ha pasado también con la amnistía, pese a que una parte del electorado de Illa no la suscribe con entusiasmo. De hecho, la lectura que hacen en la calle de Pallars es que los mismos que podrían desmovilizarse por el olvido penal que podría facilitar el retorno de Carles Puigdemont serán los que echarán mano del voto útil para impedir que el candidato de Junts sea president, a sabiendas de que el único candidato no independentista con opciones de liderar el Govern es el del PSC.