La reina Letizia queda exenta de declarar su patrimonio: "El Jefe del Estado es el rey"

Felipe VI ha decidido hacer público su patrimonio, valorado en 2,57 millones de euros netos, entre depósitos bancarios, obras de arte, antigüedades y joyas. Una medida de ejemplaridad y transparencia que persigue "dar cumplimiento a su compromiso de renovar la monarquía para un tiempo nuevo" pero que no incluye a la reina Letizia, a pesar de que, como el monarca, percibe una asignación de dinero público.

La Zarzuela ha descartado que Letizia dé cuenta de su patrimonio porque no ostenta “la titularidad de la Corona”. "El Jefe del Estado es el rey", remarcan a EFE fuentes de la Casa del Rey, que considera justificado que la reina, como tampoco la reina Sofía, den a conocer su patrimonio al no tener las responsabilidades constitucionales que tiene el monarca.

"Si la reina fuera regente, declararía su patrimonio", puntualizan las fuentes, que recuerdan que las parejas del presidente del Gobierno, de los ministros o de otros altos cargos no facilitan la información sobre su patrimonio.

Respecto a la princesa Leonor, no ha descartado que lo haga una vez que sea mayor de edad.

2,5 millones

En el caso del monarca, Zarzuela informó de que tiene en estos momentos 2.573.392,80 millones de euros, divididos en 2.267.942,80 millones en depósitos en cuentas corrientes o de ahorro, y 305.450 en "objetos de arte, antigüedades y joyas de carácter personal". El rey no tiene propiedades inmobiliarias ni tampoco fondos en el extranjero, concretaron fuentes de la Zarzuela.

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En 2022, Felipe VI tiene asignada una retribución de 258.927 brutos, mientras que la última que percibió como príncipe de Asturias en 2013 fue de 146.376 euros. En el caso de la reina, el montante para este año asciende a 142.402, unos 3.000 euros más que en 2021.

Es la primera iniciativa de calado que el jefe del Estado toma después de los escándalos de su padre, Juan Carlos I, por su fortuna oculta en paraísos fiscales. La última medida para regenerar la institución la aprobó en junio de 2015, cuando le retiró el ducado de Palma a su hermana Cristina, imputada entonces en el caso Nóos que llevó a la cárcel a su marido, Iñaki Urdangarin.