PERMISO DE PATERNIDAD

Así gestionan sus bajas los hombres en política: Lobato quiere diferenciarse de García Egea

El dirigente socialista de Madrid acaba de ser padre y pretende disfrutar de la baja completa de paternidad coordinándose con su pareja

El número dos del PP, Teodoro García Egea, ha reducido su agenda pero mantiene su presencia en el partido y el Congreso.

Elena Marín

Elena Marín

Las bajas por paternidad son un derecho que en los últimos cuatro años han pasado de solo 15 días en 2016 a 16 semanas completas desde el 1 de enero 2020, igualándose así de forma progresiva al derecho de baja por maternidad de las mujeres. El nuevo secretario general del PSOE de Madrid, Juan Lobato, acaba de ser padre de su tercera hija y asegura que no tiene intención de perderse estos primeros meses.

Pablo Iglesias tuvo que pedir perdón por un cartel en el que se mostraba como algo extraordinario su regreso al trabajo tras la baja de paternidad

“¡El permiso lo voy a disfrutar!”, exclama eufórico aún desde el hospital. En política nunca es buen momento para desaparecer del mapa y recluirse en la vida familiar y, además, “los parlamentarios no están vinculados a la institución pública por la legislación laboral”, por lo que no tienen derecho a paro y hasta hace poco tampoco a la baja por paternidad, recuerda un diputado de la Asamblea de Madrid. Pero a pesar de la falta de relación laboral, ahora prima el derecho al permiso de paternidad y quien quiera acogerse al mismo, puede hacerlo sin problema.

Aunque los derechos para ambos progenitores son ahora los mismos, para parte de la opinión pública, incluidos los políticos, sigue aún siendo extraño que ellos se queden al cuidado de sus hijos mientras está ya normalizado que las mujeres lo hagan. Ejemplo de este desfase es aquel cartel de Podemos de marzo de 2019 que decía “VuELve”, en referencia a Pablo Iglesias tras finalizar su baja de paternidad por su tercera hija, cuando a nadie en el partido se le ocurrió hacer lo mismo cuando la madre, Irene Montero, terminó con su permiso para reincorporarse al trabajo.

Entre el nacimiento del nuevo retoño de Lobato (25 de noviembre) y el recién nacido del secretario general del PP, Teo García Egea (23 de octubre), apenas ha pasado un mes. Pero mientras el socialista asegura sin ninguna duda que piensa disfrutar de su baja completa, “las 16 semanas”, al dirigente popular se le ha visto reducir su agenda pública en los primeros días, pero ha optado por seguir trabajando y, además, de forma visible.

Ni diez días después del nacimiento de su tercer hijo, a García Egea se le esperaba en la Junta directiva del PP de Madrid celebrada el 29 de octubre, en la que Isabel Díaz Ayuso informó oficialmente en los órganos internos de su partido que iba a presentar su candidatura a la presidencia del PP de Madrid. Su equipo informó de que asistiría a la reunión, aunque finalmente, precisamente por razones familiares, García Egea no pudo asistir.

Además, a lo largo de este último mes, el secretario general de los populares ha participado en los congresos autonómicos del PP de Andalucía celebrado en Granada el pasado fin de semana y en el de Castilla La Mancha, que tuvo lugar en Puertollano entre el 12 y el 14 de noviembre. Igualmente, como número dos del partido, en este último mes no ha dejado de asistir al comité de dirección de Génova cuando ha sido convocado, ha participado en entrevistas en medios de comunicación o incluso ha acudido a recoger el premio Teleco de 2021, tal y como él mismo anunció en su cuenta de Twitter.

Su asistencia al Congreso sí se ha visto reducida porque la Cámara baja permite el voto telemático y así ha podido evitar asistir de forma presencial a cada votación, pero su nueva paternidad no le ha impedido acudir a la sesión de control al Gobierno, donde García Egea no ha dejado de preguntar a la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, con lo que eso supone de tiempo de trabajo invertido no solo en los minutos que dura el rifirrafe del Congreso sino en preparar el contenido de ese breve debate parlamentario con su equipo.

Reparto de semanas

Lobato, por su parte, tiene aún que demostrar en las próximas semanas que la actualidad no le va a obligar a interrumpir su permiso de paternidad, pero de momento, su intención es clara. "Tener familia numerosa tiene tela...", asegura, por lo que sus días de baja serán para dedicarse no solo al recién nacido sino a conciliar con la familia al completo: "Me hace buena falta". Reconoce que podría participar en algún acto esporádico en las próximas semanas, pero su actividad parlamentaria quedará “suspendida” y la nueva dirección del partido quedará al frente.

Su intención es cogerse ahora las seis primeras semanas que los padres están obligados a tomarse, precisamente, inmediatamente después del parto de forma simultánea con la madre, "quizá", dice, incluso "lo amplíe a ocho". La ley permite que las restantes semanas puedan disfrutarse a lo largo del año siguiente al nacimiento.

Tal y como explicaba Violeta Molina en un reportaje sobre las trampas de los permisos de paternidad que frenan corresponsabilidad de los hombres, entre enero y septiembre de 2021 más hombres que mujeres accedieron al permiso de paternidad en el sector privado, dado que la ocupación es mayor entre ellos que entre ellas, pero no hay datos sobre cómo se reparten las semanas no obligatorias, que quedan en manos de las empresas.

En el caso de Lobato, explica el dirigente socialista, la previsión es hacerlo en verano: "Será dependiendo del trabajo de mi mujer para cubrirnos bien entre los dos, que para eso son (estas semanas restantes)". Quiere que su decisión sirva “para visibilizar que existe de verdad la corresponsabilidad en el cuidado de los hijos”.

El polémico cartel de Pablo Iglesias

En 2019, cuando Podemos aplaudió la vuelta al ruedo de Pablo Iglesias con aquel polémico cartel, el permiso de paternidad era aún de solo ocho semanas. El dirigente morado, que dio el relevo a Irene Montero tras las semanas de baja de ella, interrumpió su permiso en una ocasión para mantener una reunión con Pedro Sánchez e intentar desbloquear los primeros presupuestos de la coalición de Gobierno, pero se mantuvo ausente de la vida pública durante sus semanas al cuidado de la recién nacida.

Podemos lanzó este cartel para informar de que Pablo Iglesias volvía a trabajar después de semanas de baja por paternidad, pero no hizo lo mismo con Irene Montero.

Podemos lanzó este cartel para informar de que Pablo Iglesias volvía a trabajar después de semanas de baja por paternidad, pero no hizo lo mismo con Irene Montero. / PIM

Cuando el cartel se lanzó, enseguida se hizo viral porque desde diferentes sectores se acusó al propio líder de Podemos de mostrar casi como un sacrificio haber cumplido con su baja de paternidad. Él mismo, a través de twitter, tuvo que disculparse y lamentar haber publicitado "como algo extraordinario regresar de un permiso de paternidad en lugar de normalizarlo".

Hace solo unos meses, en febrero de este año, otro representante público del ámbito local de Madrid, fue padre y optó también por disfrutar de su baja, pero no lo hizo del tirón. José Manuel Calvo, entonces en Más Madrid y ahora en el grupo mixto de los escindidos de este partido en la capital, optó por hacer lo mismo que Lobato. Disfrutó de sus primeras semanas junto a su pareja, diez semanas seguidas, pero tiene aún pendientes las seis restantes, que confía en poder repartir en las fechas en las que no hay sesión de control y plenos en el ayuntamiento, según él mismo confirma a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA.