Sentencia

El presidente de Extremadura quiere revisar la protección de la Red Natura 2000

Los ecologistas afirman que "ha triunfado la legalidad" en Valdecañas

Imagen actual del complejo de Valdecañas

Imagen actual del complejo de Valdecañas / Vinccihoteles

Redacción

El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha planteado la necesidad de que se reforme la Ley del Suelo actual para revisar los criterios de protección derivados de la Red Natura 2000 al objeto de que en el interior de estos espacios (o al menos, de algunos de ellos) haya margen “para poder hacer cosas”.

Tras conocerse la sentencia del Tribunal Supremo que obliga a derribar la totalidad de lo construido en el complejo de Valdecañas (un área turística con casi 200 chalés, un hotel, puerto deportivo, campo de golf y pistas deportivas), el presidente extremeño pide que se revise si algunos de los espacios actualmente protegidos en Extremadura realmente merecen la protección que tienen.

Fernández Vara considera,

en declaraciones

recogidas por El Periódico de Extremadura, que en algunos casos debería permitirse el desarrollo y la construcción de ciertos proyectos empresariales.

«Es que dentro de la Red Natura no se puede construir nada y en Extremadura tenemos el 30% del territorio con esta protección. Tenemos zonas en las que será muy difícil que podamos hacer nada», aseguró el presidente.

Parte de los chalets que deberán derribarse

Parte de los chalets que deberán derribarse / Google Earth

El mandatario extremeño señaló que hay municipios extremeños que incluso carecen de suelo disponible para desarrollos industriales, porque todo su territorio es protegido.

Además, también hay grandes ciudades como Cáceres, dijo, donde la protección alcanza el 50% de su superficie. «Estas limitaciones hacen difícil luchar contra la despoblación, que paradójicamente es uno de los objetivos de la Unión Europa».

Por eso, el presidente extremeño quiere abrir un diálogo con Europa (dado que la Red Natura 2000 de espacios protegidos depende de la UE) para realizar una revisión de los criterios de preservación.

Se trata de una situación que, en su opinión, no afecta solo a Extremadura, sino a todo el país, y afrontar el «enorme reto que supone luchar contra la despoblación teniendo que hacer frente al mismo tiempo al exceso de protección» que tienen algunos territorios. «La sentencia de Valdecañas es para todos, no solo para esta región: no se puede construir nada en la Red Natura», remarcó ayer Fernández Vara.

Actualmente, Extremadura tiene 14.276 kilómetros cuadrados incluidos bajo alguna figura de protección, sobre un total de 41.633 kilómetros cuadrados, lo que supone el 34% de la superficie de la comunidad autónoma.

El presidente extremeño, Fernández Vara

El presidente extremeño, Fernández Vara / Efe

“Tanta protección es contraproducente, porque no hay contraprestaciones, solo limitaciones a la inversión y a cualquier expectativa de desarrollo para la región”, señaló Fernández Vara.

El presidente, incluso, señaló que “habría que pedir responsabilidades a quienes en ese momento [los años 90, cuando las autonomías propusieron a Europa las zonas a proteger] se pusieron a delimitar tanto espacio”.

Ecologistas en Acción reclamará que se ejecute el derribo

Mientras tanto, el coordinador y abogado de Ecologistas en Acción en Extremadura, Ángel García Calle, ha mostrado a Europa Press su satisfacción por la sentencia de Valdecañas, que da la razón a esta entidad tras 15 años de reivindicaciones para demostrar la ilegalidad del complejo.

Esta entidad “seguirá peleando hasta el final” si la Junta y los propietarios recurren al Constitucional el auto del Tribunal Supremo, señaló. En caso de que no se recurra, Ecologistas en Acción reclamará la inmediata ejecución de la sentencia para que se lleve a efecto.

La resolución del Supremo, ha declarado el dirigente ecologista “ha sido coherente” y representa “un triunfo, no del ecologismo, sino de la legalidad”.

Sobre la propuesta de Fernández Vara de revisar la protección de la Red Natura 2000, García Calle ha considerado su propuesta totalmente inviable. “No deja de sorprendernos”, ha afirmado en alusión al presidente.

“Ya desde hace tiempo está clara cuál es la política del PSOE, del Gobierno regional, y es llevar a cabo proyectos aberrantes contra el medio ambiente y el futuro de Extremadura”, ha dicho.