ARTE

Así nos verán en el año 3024: una 'capsula del tiempo' se ha abierto en Madrid

¿Qué obra te gustaría que alguien encontrase en el futuro? Con esta premisa, la ceramista Laura Lasheras invita a cinco artistas a reflexionar sobre el concepto de legado en la nueva muestra que organiza Factory Of Dreams 

'La passeggiata' (2023) es el mural cérámico que Marta Jorio aporta a la exposición.

'La passeggiata' (2023) es el mural cérámico que Marta Jorio aporta a la exposición. / CEDIDA

Pedro del Corral

Pedro del Corral

“En el 3024, la prestigiosa arqueóloga Matilda Green encuentra una serie de piezas de cerámica en una excavación en Madrid (España) que datan de 1.000 años atrás. Después de un arduo trabajo de investigación junto a su equipo, la experta logra identificar a los autores. Todos ellos dan una idea del boom creativo que tuvo lugar en la primera mitad del siglo XXI. Un resurgir de esta disciplina milenaria que ha acompañado a la humanidad desde la prehistoria y que es una de las primeras manifestaciones artísticas de las que tenemos conciencia”. Esta es la carta que Laura Lasheras envió a Carlos Yuste, Daphne Chistoforou, Marta Jorio, Sergio Mora y Miguel B para participar en 3024. La exposición que llegó del futuro. La muestra, organizada por Factory Of Dreams, es una invitación a reflexionar sobre el concepto de legado.

El reto que les planteó fue claro: ¿qué obra te gustaría que alguien descubriese dentro de un milenio que sea representativa de tu contexto histórico? “Cuando vivía en Barcelona, un día me topé una especie de tienda regentada por un hombre con síndrome de Diógenes. Se dedicaba a vaciar casas de gente que había fallecido. Apenas se podían distinguir los objetos en aquella montaña desordenada de cosas. A pesar de ello, creo en los milagros… y localicé algunos de los tesoros que decoran mis estanterías. Aquella mañana me sentí como una exploradora que había rescatado diversas maravillas gracias al azar. De este mágico instante nació la premisa de este proyecto”, asegura Lasheras, también conocida como Lusesita en el gremio. Las creaciones que acoge la exposición, abierta al público hasta el 5 de abril, responden a esta pregunta.

Miguel B apuesta por gres porcelánico y cocción a baja temperatura para crear 'Molly' (2024).

Miguel B apuesta por gres porcelánico y cocción a baja temperatura para crear 'Molly' (2024). / CEDIDA

“El paso del tiempo siempre me ha fascinado y atormentado a la vez. Es una fuente de inspiración que quise compartir con el resto de participantes. Sus resultados son auténticos y personales”, subraya. Carlos Yuste, que busca la meditación a través del humor y la ironía, presenta una colección de artículos de broma realizados con técnicas tradicionales, posando su mirada en lo ilógico y lo absurdo de la vida. Daphne Christoforou, por su parte, desarrolla una fantasía adivinatoria en la que los dioses del Olimpo han decidido separarse de los humanos. Marta Jorio, en cambio, traduce su experiencia en entes funcionales: un árbol, un vestido, una montaña… Llevando así el paisaje exterior a una escala íntima. Para esta ocasión, exhibe varias esculturas que recrean un entorno de supervivientes donde no se percibe presencia humana sino animal.

Duchas, cohetes, prótesis...

Sergio Mora, cuya relación con la cerámica es conocida por sus grandes murales y colaboraciones con Phillipe Starck, habla del poder del ahora a través de un tríptico de azulejos donde el presente se ve acechado por el futuro y el pasado. Un juego protagonizado por Kaliman, el personaje de cómic que arrasó en México durante los 60. Como complemento, la obra de Miguel B es un ritual de invocación al niño interior que se niega a crecer. Modela objetos del imaginario infantil que aparecen de manera recurrente en su producción, generando un diálogo sobre temas universal como el amor, la muerte, el sexo… “Este material es capaz de sobrevivir al paso del tiempo. De hecho, lo que estamos haciendo hoy aguantará 5.000 años”, puntualiza Lasheras, que ha expuesto sus frutos en París, Tokio, Miami, Washington, Seúl y Milán.

'Dentadura vampiro' (2024), de Carlos Yuste. Y 'Cosmic Girls' (2020), de Sergio Mora.

'Dentadura vampiro' (2024), de Carlos Yuste. Y 'Cosmic Girls' (2020), de Sergio Mora. / CEDIDA

La artista ha hallado en la cerámica el lenguaje que mejor se adapta a sus necesidades expresivas. Con figuras de esmalte y cuerpos de algodón narra en clave poética los sinsabores del mundo. Así queda patente en la pieza que ha cedido para la muestra: dos perritos de porcelana que surgieron en la Inglaterra de los 60 e invadieron las chimeneas de los hogares de clase media. “Para mí, el legado que dejamos no tiene que ver con lo tangible, sino con los recuerdos y las emociones que nos despiertan”, concluye. Antes, un último apunte: “Nos han permitido descubrir joyas de todos los continentes. Vivimos un momento en el que se ha despertado mucho interés. Nunca olvidaré la lección más valiosa que me dio un profesor: hay cerámica en las duchas, los cohetes, las prótesis, los implantes… Nos rodea. Aunque, en ocasiones, no nos demos cuenta”.