De la C1 a la C9, solo una línea de Cercanías de Madrid se libra de las 700 incidencias este año

De nueve líneas que tiene la red de Cercanías de Madrid, solo una ha quedado libre de incidencias en los últimos tres años, la C10 (la C6 no existe), una de las dos únicas líneas que tiene destino final en el Aeropuerto de Barajas. Es lo que se extrae de la información facilitada por el Consorcio de Transportes de la Comunidad de Madrid, que recibe puntualmente los datos de las incidencias que registran Renfe y Adif para que, en caso de suspensión del servicio en alguna línea, el Consorcio pueda informar a los servicios públicos de la región para que incrementen su capacidad o adopten las medidas necesarias para ofrecer un servicio alternativo (más frecuencia de autobuses o metro, en definitiva).

El Gobierno de la Comunidad de Madrid ha encontrado en el caos que se vive cada poco tiempo en las Cercanías de Madrid un elemento más con el que confrontar con el Gobierno de la nación, responsable último de la infraestructura ferroviaria y de los trenes, y al que acusan de no invertir en Madrid porque está más preocupada de hacerlo en las rodalíes de Cataluña. La crítica no es nueva, llevan meses repitiéndolo, pero la llegada del nuevo ministro de Transportes y Movilidad, Óscar Puente, ha coincidido con el balance del año y las más de 710 incidencias que se han registrado en lo que va de 2023, en el que han circulado 440.798 trenes, duplican las que se produjeron en 2022, cuando se sumaron 375. Así que la guerra entre las administraciones está servida.

Emplazados a la comisión de seguimiento

Jorge Rodrigo, consejero del ramo en el Gobierno regional, acusaba este miércoles al ministro desde la Puerta del Sol de querer "seguir e el barro y en la confrontación" por no querer reunirse con él y apuntar por carta que solo se reuniría con la presidenta Isabel Díaz Ayuso. Lo ha contado después de elevar al consejo un "informe oral" en el que ha trasladado algunos datos sobre la situación de las Cercanías, como que "los problemas más frecuentes han sido producidos por las averías en las instalaciones (39%), en el material móvil (25%) e infraestructuras y obras (12%)". Asimismo, según los cálculos de la Consejería, de los más de 650.000 madrileños que viajan diariamente en esta red ferroviaria, "más de 300.000 se ven perjudicados como consecuencia de la falta de calidad del servicio".

En su carta de respuesta a Rodrigo, Puente informaba al consejero de que sería debidamente convocado a la Comisión de Seguimiento que preside el secretario de Estado, que desde hace dos semanas es el vasco José Antonio Santano. Precisamente en la anterior reunión de esta comisión, celebrada el pasado 25 de octubre con su antecesor David Lucas, el ministerio negó las acusaciones del Gobierno regional acerca de la falta de inversión y trasladó a los medios que se había incrementado el presupuesto inicial del plan de mejora de las Cercanías de Madrid, pasando de 5.089 millones de euros a 7.116 millones.

Mejoras en la infraestructura y compra de trenes

El problema, alegan desde el gobierno regional, es que los presupuestos no sirven de nada si no se ejecutan y en aquella reunión les reconocieron que solo se habían ejecutado 819 millones (ahora son cerca de 850 según la última actualización del Ministerio). Sin embargo, desde el el equipo de Puente defienden que la cantidad "movilizada" es muy superior, 4.862 millones. Por "movilizada" puede entenderse desde la planificación hasta la licitación de proyectos o inicio de algunas obras. Estos datos se traducen en que la cartera de Transportes tiene ya terminadas 23 actuaciones y hasta 115 sobre la mesa para el corto y medio plazo.

De momento, del presupuesto total que tiene previsto el ministerio,  3.104,4 millones corresponden a Renfe (compra de nuevos trenes que están a punto de incorporarse a la red a inicios de 2024, incremento de la capacidad de los talleres actuales y otras mejoras en el material rodante y estaciones), y de los 4.012 millones que invierte Adif, 1.058 son para la ampliación de la red (nuevo eje transversal y extensión de las líneas actuales) y el resto a mejoras de la capacidad de la red y de la fiabilidad de la infraestructura, de las instalaciones de mantenimiento y de los sistemas de información.  

Ayuso pide más transparencia

Las informaciones que salen del Ministerio no convencen al gobierno regional, que pide "más transparencia" al Ejecutivo para conocer "con más detalle las inversiones realizadas y previstas a medio y largo plazo" porque, insistió este miércoles el consejero madrileño, "el mal funcionamiento repercute directamente en la Comunidad de Madrid".

Desde el equipo de Isabel Díaz Ayuso esgrimen que los problemas en el servicio de Cercanías requieren de un "sobreesfuerzo de recursos económicos", pero cuando se les pregunta cuánto cuesta a las arcas regionales la prestación de servicios adicionales no ofrecen datos concretos. Lo que sí señalan es que la semana pasada, tras los descarrilamientos a la entrada de la estación de Atocha que afectó a 140.000 usuarios según sus datos, "el 58% utilizó el Metro, un 22% se decantó por los autobuses interurbanos y el 20% hizo sus trayectos en los autobuses de la EMT".

Rodrigo insiste en que desde la Comunidad se  hará "todo lo que sea necesario" para garantizar los derechos de los madrileños, pero reconoce que de momento, solo pueden insistir en pedir información y transparencia y "quejarse y patalear".