NAUFRAGIO

A.C., tripulante nº 25: una muerte indultada en el 'Villa de Pitanxo'

El pesquero de Nores salió de Vigo con 25 tripulantes a bordo; un marinero de Cangas fue trasbordado a otro buque gallego y evitó la tragedia

El 'Pitanxo', a su salida de Vigo, en una imagen tomada por el tripulante número 25.

El 'Pitanxo', a su salida de Vigo, en una imagen tomada por el tripulante número 25. / Cedida

Lara Graña

El 'Villa de Pitanxo' fue la construcción número 76 del desaparecido astillero vigués MCíes. Con 50 metros de eslora y 9,7 de manga, fue diseñado para dar cabida a una tripulación de 22 personas. Para su última marea –con licencia en NAFO para faenar fletán negro, gallineta y raya–, dos de los hombres embarcados tuvieron que instalarse en el estrecho habitáculo de la enfermería. Eran el segundo oficial, Raúl González Santiago, de Cangas, y el observador canario Francisco Manuel Navarro Rodríguez. No tenían que haber estado allí; sus cuerpos, casi seis meses después del naufragio, no han aparecido.

El 'Pitanxo' tenía sitio para 22, pero el equipo comandado por el capitán, Juan Enrique Padín, era de 24. Ni él ni la armadora, Pesquerías Nores Marín, remitieron la lista real de marineros a bordo a Capitanía Marítima; este organismo, dependiente del Ministerio de Transportes, ha abierto ya un expediente sancionador por mentir en el número de enroles y en sus identidades, como destapó FARO. Es una investigación suspendida –en espera de que Fiscalía de la Audiencia Nacional analice estas infracciones–, pero que tendrá que ser previsiblemente ampliada. Porque tampoco fueron 24 las personas que salieron de Vigo en este barco, el pasado enero. Fueron, al menos, 25.

El pesquero puso proa a alta mar en la tarde del 26 de enero, tras haber desembarcado la jornada anterior en Marín a un marinero positivo por covid (Siaka Thior), haber celebrado una cena en el restaurante El Rincón de Zoila de Placeres (también en Marín) y sin haber guardado cuarentena. En el listado de 22 nombres entregado por Nores a Capitanía, por lo tanto, 'sobraba' el nombre de Thior y faltaban otros tres: el de Juan Martín Frías Riera, Miguel Lumbres Cumpa (ambos marineros) y este tripulante número 25, de iniciales A. C. y vecino de Cangas, según pudo constatar Faro de Vigo, del grupo Prensa Ibérica.

No era un trabajador del 'Villa de Pitanxo', sino que embarcó en el muelle de Frigalsa para ser trasbordado en alta mar a otro pesquero de capital gallego y que opera en el mismo caladero. Su nombre tenía que haber figurado en el despacho como “personal ajeno a la tripulación”. Pero ese recuadro del documento oficial está vacío. El joven A.C. salvó su vida al haber cambiado de buque antes del fatídico 15 de febrero.

Los trasbordos son habituales, pero deben declararse en el despacho

Este tipo de trasbordos son habituales. En el informe de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos (Ciaim) del hundimiento del 'Dorneda', de Freiremar, se hace referencia a una operativa de este tipo. “El buque llevaba en su dotación a dos pasajeros, dos marineros que habrían de ser trasbordados al 'Farruco', otro barco gestionado por la misma compañía, que se encontraba en la zona”. La obligación de una armadora, o del capitán cuando los embarques se realizan en puertos de otros países, es de remitir a Capitanía Marítima u organismos homólogos una información que sea cierta. Nores y Padín no lo hicieron: ni con los 24 tripulantes (no los 22 declarados en el despacho), con sus identidades, ni con esta persona ajena a la dotación del 'Pitanxo'.

Capitanía

A preguntas de este periódico, desde la Dirección General de la Marina Mercante han apuntado que no tienen constancia de este tripulante número 25, pero lo investigará. Fuentes oficiales recuerdan que “el enrole de personal ajeno a la tripulación aparece regulado en el art. 33 del reglamento sobre Despacho de Buques y también tiene que ser notificado”.

En concreto, la normativa establece lo siguiente: “El enrole del personal ajeno a la tripulación y al pasaje será autorizado por el capitán del buque, siempre y cuando el número de personas que puedan embarcar de acuerdo con el certificado de equipo lo permita, previa presentación” del DNI o pasaporte de esas personas y una “póliza de seguros vigente que cubra los riesgos de muerte o accidente con ocasión del viaje o viajes marítimos para los que se despache el buque”. El 'Villa de Pitanxo' no tenía capacidad para las 24 personas contratadas para esa marea por Nores, y mucho menos para este joven de Cangas.

Las mismas fuentes del Ministerio recuerdan que el expediente administrativo sancionador abierto contra Padín y Pesquerías Nores obedece a dos motivos. “El primero, porque no coincidían los tripulantes que realmente iban a bordo con los que figuraban en la lista de tripulantes en la salida de Vigo; el segundo, consecuencia del primero, por llevar más personas que las autorizadas en su certificado de conformidad”.

A día de hoy, abundan, “los expedientes están suspendidos porque se han remitido al Ministerio Fiscal por si los hechos transcendiesen el ámbito administrativo”. En caso de que no sea así –el caso Pitanxo se instruye en la Audiencia Nacional–, Capitanía retomará la instrucción de este expediente sancionador y “tratará de verificar” la información obtenida por Faro de Vigo respecto al marinero A. C. Presumiblemente la no notificación de este tripulante número 25 se enmarcaría dentro de los motivos por los que ya se ha iniciado la investigación administrativa. “Si se confirma –zanjan desde Marina Mercante–, probablemente agravaría la sanción definitiva propuesta en la resolución”.

El 'Dorneda', que se hundió en 2018, también elevó lastre tras una reforma

Hay otra coincidencia con el caso del hundimiento del 'Dorneda' (2018), en el que falleció un marinero y otro fue declarado desaparecido. Al igual que el 'Villa de Pitanxo', el pesquero de Freiremar fue sometido a trabajos de reforma de la cubierta de francobordo que, aquí, incrementó el lastre en 25 toneladas. En el del Pesquerías Nores, la remodelación incrementó el peso muerto en 16 toneladas, como figura en el informe de estabilidad expedido el 9 de marzo de 2018, y que también adelantó Faro. Como consecuencia de esta remodelación –no consta en el registro de flota de la Comisión Europea–, al 'Pitanxo' se le prohibió faenar en zonas de formación de hielos. Esta es la literalidad del informe de Capitanía.

El capitán, necesariamente con conocimiento de la armadora, incumplió este mandato; existen múltiples imágenes de tripulantes retirando hielo de cubierta a martillazos, del espardel a los carreteles, después de la notificación de los resultados de ese informe de estabilidad. El pesquero no volvió a realizar reformas que le hubiesen permitido revertir esta prohibición. Solo consta una única modificación, anotada el 19 de febrero de 2020, y que se ciñe a su motor principal, cuando se repotenció el Wärtsilä: pasó de 878 kw a 1.267 kw. Preguntadas a este respecto, fuentes de la representación legal de la armadora aseguraron a Faro que el 'Villa de Pitanxo' “estaba preparado y autorizado para navegar donde lo hacía”.