ACCIDENTE AÉREO

La versión del piloto de la DGT que dio positivo en drogas y llevaba un polizón: "El helicóptero se hundió"

La DGT investiga por qué en la aeronave viajaba la mujer del operador de cámara sin autorización

El piloto, que dio positivo en cocaína y metanfetaminas, asegura que el helicóptero "se hundió" y no pudo recuperar el control

El piloto del helicóptero de la DGT que se estrelló en Madrid dio positivo en cocaína y metanfetaminas

PI Studio

El accidente de un helicóptero Pegasus de la Dirección General de Tráfico (DGT) el pasado domingo en la localidad madrileña de Robledo de Chavela sigue dando de qué hablar. Si primero salió a la luz que el piloto dio positivo en cocaína y metanfetaminas tras darse a la fuga del lugar del accidente, como adelantó El Periódico de España, ahora la DGT investiga por qué en la aeronave viajaban tres ocupantes cuando en ese vuelo sólo estaba previsto y autorizado que estuviesen dos, el piloto y el operador de la cámara. Esa tercera persona sería la mujer del operador, que se habría unido para "disfrutar de las vistas aéreas de la región" y que también huyó tras la colisión, según han informado varios medios.

El helicóptero despegó el domingo desde el aeropuerto de Cuatro Vientos y se dirigió hacia la carretera M-512, al oeste de la Comunidad de Madrid, donde iba a realizar una actividad de vigilancia del estado del tráfico. El accidente se produjo aproximadamente 40 minutos después del despegue, según el informe preliminar sobre el siniestro de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (CIAIAC), al que ha tenido acceso EFE.

Según el relato del piloto que incluye este documento, el vuelo transcurrió sin incidencias hasta que alcanzaron la M-512 y acababan de entrar en vuelo estacionario cuando el helicóptero "se hundió". Cuenta que en ese momento inició un descenso y un viraje hacia la derecha para intentar recuperar el control, pero el helicóptero hizo contacto con el terreno en rumbo opuesto al que tenía al inicio de la maniobra. Tras impactar, la aeronave se detuvo a 167 metros de la carretera, en un bancal empinado, apoyada sobre su costado izquierdo y con el cono de cola desprendido del fuselaje.

El informe preliminar de la CIAIAC, dependiente del Ministerio de Transportes, añade que los restos de la aeronave se encontraban concentrados en un radio de 40 metros y que los ocupantes abandonaron el helicóptero por sus propios medios. El documento confirma además que en el helicóptero de la DGT viajaban tres personas, dos miembros de la tripulación y un pasajero

Tanto el piloto como el operador de cámara ocultaron la presencia de un tercer ocupante tras el accidente. Cuando se pidió a la torre de control de Cuatro Vientos el plan de vuelo, aprobado un mes antes, se comprobó que autorizaba el viaje con dos personas en el aparato, pero los controladores del aeropuerto aseguraron que habían autorizado la salida con tres personas a bordo. El operador de cámara reconoció que se trataba de su mujer. "Le pedí permiso al piloto para subir a mi mujer y me dio el ok, así que volamos los tres", reconoció el hombre, de 58 años, en unas declaraciones recogidas por El Mundo.

Por este motivo la DGT ha abierto una "información reservada" que se ha trasladado a la unidad de Policía Judicial de la Guardia Civil que lleva el caso, tras constatar que el plan de vuelo solo incluía dos ocupantes. La apertura de la "información reservada" se trata de un paso previo a la apertura de un expediente disciplinario y la investigación sobre las causas concretas del siniestro continúa abierta.

Tras el accidente los agentes detuvieron al piloto por un delito contra la seguridad aérea tras dar positivo en el test de drogas que se le realizó tras darse a la fuga del lugar e intentar refugiarse en la casa de un familiar en la localidad cercana de Villanueva de la Cañada.

La DGT ha calificado como "reprobables" este tipo de "malas praxis" entre sus trabajadores y, en caso de esclarecerse la responsabilidad del piloto en el suceso, tomará las medidas oportunas. El hombre es un funcionario de Tráfico, de 60 años, que contaba con permiso de vuelo programado para el día del accidente y con toda su documentación en regla.

El helicóptero accidentado es un Eurocopter AS355N, valorado en unos tres millones de euros y que en España operan las policías autonómicas, agentes forestales y la DGT. Tráfico cuenta con 23 pilotos habilitados para tripular los 13 helicópteros a su disposición, aunque sólo 10 de ellos cuentan con las cámaras MX15 del fabricante canadiense L3 Wescam que completan el sistema de vigilancia Pegasus que da el nombre coloquial a estas aeronaves que controlan las carreteras españolas desde el aire.

Sin embargo, no todo el país está cubierto por helicópteros Pegasus. En las Canarias y Baleares no tiene presencia, mientras que en el País Vasco y Cataluña no actúa porque no tiene competencias. Además existen zonas a las que no llega por la distancia con su base de operaciones.

Los controles sobre este tipo de vuelos recaen en la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), también dependiente del Ministerio de Transportes.

Al lugar del accidente en Robledo de Chavela acudieron agentes de Seguridad Ciudadana y Policía Judicial de la Guardia Civil, así como miembros de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes Aéreos (CIAIAC), el organismo encargado de realizar la investigación sobre las causas del suceso y notificarlo al SNS (Sistema de Notificación de Sucesos) de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA).