ELECCIONES

El PP hace malabares para contentar a los veteranos tras la revolución en sus listas

Los populares prometen compensaciones a algunos de los damnificados en la elaboración de las planchas del 23-J

Antonio Alarcó, senador por Tenerife durante seis legislaturas (2008-2023), uno de los principales sacrificados por Feijóo

Zurita se ‘repesca’ para la Cámara Alta y Mariscal podría lograr algo en la ‘pedrea’ de cargos si el PP Gobierna en el Estado 

Jimena Delgado presenta la candidatura de PP al Congreso de los Diputados por La Palmas

Jimena Delgado presenta la candidatura de PP al Congreso de los Diputados por La Palmas / Jose Carlos Guerra

Joaquín Anastasio

El proceso de elaboración de listas en el PP para las elecciones generales del 23-J ha estado marcado en todo el Estado, también en Canarias, por la apuesta de la dirección nacional y del presidente del partido, Alberto Núñez Feijóo, por la renovación de nombres y de perfiles de quienes vayan a conformar los grupos parlamentarios del Congreso y del Senado. La obsesión era cumplir el compromiso de renovar el 75 % de los cabezas de cartel para ambas Cámaras, y de combinar en el resto de cada una de las planchas la inclusión de sabia nueva con la permanencia de algunos veteranos. Había que escenificar por una parte la llegada de un nuevo equipo a la calle Génova tras las crisis que se llevó por delante al anterior presidente, Pablo Casado, hace algo más de un año, lo que obligaba a una verdadera revolución en las listas, así como la idea de que Feijóo está en condiciones de alcanzar La Moncloa en base a su propia estrategia política, y apoyado en gran parte en perfiles de nuevo cuño en las Cortes.

Este objetivo se ha traducido en una serie de movimientos internos que, aunque sin apenas contestación, ha dejado decenas de damnificados. La recuperación de gobiernos autonómicos y locales en todo el Estado y la colocación en ellos de muchos cuadros medios del partido ha dado margen a la cúpula de Génova de llevar a cabo esa revolución en las listas limitando efectos secundarios. Es lo que está pasando también en Canarias. Sin embargo, el plan no ha evitado que algunos de los veteranos diputados y senadores eliminados de las listas, o relegados a puestos inferiores de los que tuvieron el 10-N de 2019, se hayan visto sorprendidos. Pero el malestar está controlado, según fuentes del partido.

En este marco, la dirección regional está haciendo malabarismos para explicar las decisiones tomadas y en algunos casos contentar a quienes consideran que tenían mejores expectativas en las listas de lo que realmente han logrado. El principal argumento del equipo del presidente del PP canario, Manuel Domínguez, es que la elaboración de las candidaturas en puestos de salida es plena responsabilidad de la dirección nacional, y que han sido los criterios de la calle Génova los que se han tenido en cuenta. Además, se insiste en que ninguna de la decisiones al respecto se ha tomado con ánimo de castigo, exclusión o marginación y que se ha valorado sobre todo la necesidad de abordar un nuevo tiempo político con otras claves también a efectos de listas electorales.

La dirección en Canarias insiste en que ninguna de la decisiones se ha tomado con ánimo de castigo, exclusión o marginación

Las dos decisiones más llamativas en este terreno en las Islas por parte de la dirección nacional han sido las de colocar como cabezas de cartel en las dos circunscripciones canarias a dos personas sin apenas bagaje político, sin experiencia en la política nacional, y escasamente conocidas como son Jimena Delgado como cabeza de lista por Las Palmas, y Juan Antonio Rojas por Santa Cruz de Tenerife. En el primer caso, desde el partido se explica que Feijóo había reclamado que fuera una mujer porque estaba empeñado en que así fuera en un alto porcentaje de las cabeceras de cartel en todo el país, pero también por el hecho de que el partido en las Islas quiere apuntalar su figura como alternativa de futuro para el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, donde concurrió como candidata a la alcaldía el 28-M y donde permanecerá como jefa de la oposición durante toda la legislatura. El escaño en el Congreso representará para ella una oportunidad de relanzar su figura también en el ámbito local.

Posibles compensaciones

En el caso de Rojas, se considera que se ajusta al perfil de ‘nuevos políticos’ que reclamaban desde Madrid también en el marco de ese 75 % de renovación que se pretendía en las cabeceras de cartel. Estas dos decisiones se han acompañado con otras paralelas de distinta lectura, como son el relego de Guillermo Mariscal al segundo puesto en la lista de la provincia oriental, y el rescate de Asier Antona como número dos en la plancha de la circunscripción occidental. Mariscal fue informado por Génova de su ‘caída’ a la segunda posición dos días antes de anunciarse, el pasado lunes, la lista de los números uno por cada provincia. Aunque esperaba repetir como cabeza de cartel por terceras elecciones consecutivas, sabía que los nuevos criterios del partido y la necesidad de incluir a mujeres en ese puesto ponían en peligro sus aspiraciones. En el partido se le sigue considerando como uno de los dirigentes isleños que podrían conformar la 'cuota canaria' en la ‘pedrea’ de cargos de segundo nivel de la estructura de un hipotético gobierno del PP.

Génova considera a Mariscal como uno de los dirigentes isleños que podrían conformar la 'cuota canaria' de cargos de segundo nivel de un hipotético gobierno del PP

El rescate de Asier Antona se considera en el PP canario como un ejemplo de la apuesta que ha hecho Feijóo por recuperar a dirigentes de la etapa de Rajoy, siendo su caso emblemático porque fue uno de los grandes sacrificados por Pablo Casado hace cuatro años de entre los presidentes regionales. Aunque ya fue compensado en su día con la designación como senador autonómico y se reconcilió con la anterior dirección del PP, Antona, que ejercerá paralelamente como alcalde de Santa Cruz de La Palma, logra ahora por primera vez un puesto de salida al Congreso, una de sus aspiraciones políticas.

La principal damnificada en las listas al Congreso ha sido la tinerfeña Ana Zurita, que también contaba con un puesto de salida. Aunque inicialmente se iba a dedicar en pleno a su puesto de jefa de la oposición en el Ayuntamiento de La Laguna, a cuya alcaldía optó el 28-M, finalmente se la ha recolocado en segunda posición al Senado por Tenerife tras la renuncia por motivos personales de Zaida González, por la que apostaba inicialmente el partido. También para el Senado ha sido una sorpresa la no inclusión en la plancha tinerfeña de Antonio Alarcó, que aspiraba a continuar (o en su caso ir al Congreso) tras seis legislaturas consecutivas en la Cámara Alta, desde las elecciones de 2008.

La dirección del partido, y en particular el presidente del PP tinerfeño, Emilio Navarro, que precisamente es el que le sustituye, explicó a Alarcó de manera personal la decisión del partido en una “reunión de trabajo” el pasado miércoles, en la que de alguna manera se le ha prometido alguna compensación en algún puesto institucional relevante de Canarias, no en el Gobierno, aunque quizá en alguna de las entidades dependiente del Parlamento. En un comunicado del PP tinerfeño, Navarro asegura que Antonio Alarcó “estará vinculado a las responsabilidades políticas durante este mandato en nuestra comunidad” y que “los resultados de las elecciones del pasado 28 de mayo dejan un panorama en el que vamos a necesitar su experiencia y vocación de servicio”