BALONCESTO (NBA)

Butler y sus espartanos funden a los Celtics y se meten en la final de la NBA

Nikola Jokic espera a este Miami coral y áspero que promete lucha aunque los de Denver son favoritos pese a estrenarse en una final

Jimmy Butler se cuelga del aro en  presencia de Jaylen Brown.

Jimmy Butler se cuelga del aro en presencia de Jaylen Brown. / Winslow Townson/PIM

Fermín de la Calle

Fermín de la Calle

Cuando concluyó el sexto partido, con el palmeo milagroso de Derrick White, muchos dieron por muertos a los Heat. Como los pronósticos de la cadena ABC, que pronosticaban al inicio de la serie un 3% de posibilidades de que Miami llegase a la final de la NBA. Pero Spoelstra maneja como nadie ese contexto en el que su equipo es subestimado. Reunió a su gente y les puso un emotivo vídeo de 15 minutos recordando la travesía por el desierto que ha sido esta temporada agónica. Lo reveló Adebayo al recoger de manos de ‘Zo’ Mourning el trofeo de campeones de la Conferencia Este, que nadie se acercó a reclamar. Síntoma de la humildad del equipo.

Bam Adebayo machaca el aro de Boston durante el séptimo partido de la serie Celtics-Heat.

Bam Adebayo machaca el aro de Boston durante el séptimo partido de la serie Celtics-Heat. / NBA

Un minuto de partido

El séptimo partido duró un minuto. El tiempo que tardó Tatum, jugador franquicia de los Celtics, en doblarse el tobillo. la del 2022, al final de la cual Jimmy Butler advirtió: "El próximo año volveremos a estar en esta misma situación y la ganaremos".

Los Heats son un equipo sin glamour, pero con una ética de trabajo granítica esculpida por la mano de Erik Spoelstra. Una legión de espartanos con un Leónidas (Butler), al que apodan ‘Mister Playoffs’ por su competitividad voraz y al que la NBA ha infravalorado sistemáticamente. Octavos en su conferencia y con uno de los peores ataques en la liga regular, Miami es la confirmación de que el éxito solo precede al trabajo en el diccionario. Equipo diseñado por el ojo clínico de Pat Riley, el Padrino, inventor del Showtine de los Lakers en los 80, que ahora bucea en la Liga de Desarrollo y en el fondo de los banquillos rivales para descubrir jugadores sin pedigrí en el draft como Caleb Martin, Gabe Vincent, Max Strus o Duncan Robinson.

Poco importan las lesiones de Tyler Herro o el versátil Victor Oladipo. Al no estar ellos han dado un paso adelante Kyle Lowry y un deslumbrante Caleb Martin para asumir la responsabilidad. En el fondo del banquillo dos veteranos ilustres como Kevin Love y Udonis Haslem suman oficio al entusiasmo indómito del grupo. Es intrascendente que se colasen los últimos en los playoff o que cayeran incluso en el primer partido del play-in. Laminaron a Milwaukee (4-1), doblegaron a los Knicks (4-2) y han tumbado a los aristocráticos Celtics (4-3).

NBA: Playoffs-Miami Heat at Boston Celtics

NBA: Playoffs-Miami Heat at Boston Celtics / NBA

Ante los Nuggets de Jokic

Ahora se miden en una final inédita a unos Denver Nuggets que llevan ochos días descansando. Liderados por el unicornio Jokic, quien no ha tenido problema en admitir que "no he visto todos los partidos de la final entre Celtics y Heats", los de Colorado se enfrentan a su primer intento de ganar el anillo. Y lo hacen como claros favoritos, algo que suena bien a los oídos de los de Miami que están cómodos con el disfraz de víctima. Una vez más tienen poco que perder y mucho que ganar. La duda es saber qué inventará Spoelstra para frenar a ‘Joker’. El pívot serbio se echó el equipo a la espalda ante los Lakers asumiendo la labor de playmaker, no solo desde el poste, también a la hora de subir la pelota y, por supuesto, marcando la jugada a desplegar en cada ataque.

Será la final más heterodoxa de los últimos años, con un equipo aferrado a un genio de 2,11 frente a un ejército de infantería que juega un baloncesto de una época pretérita y respeta los viejos códigos. Jokic y Murray ante las hordas de Spoelstra, el talento de Nikola o la resiliencia de Butler.